Como de repetición de lo ya visto en el E3 de Los Angeles puede ser calificado este ECTS 2002 que el pasado sábado 31 de agosto llegaba a su fin. Han sido 3 días en los que por el Earls Court de la capital inglesa se ha mostrado escasísimo producto inédito, 3 días en los que han predominado los anuncios de fechas de lanzamiento para Europa, las demostraciones con títulos ya vistos, y la publicación de imágenes y tráilers de los videojuegos que aún se encuentran en tempranas fases de desarrollo.
A pesar de que en esta última edición el ECTS ha tenido apoyos importantes, obligadas tras el fiasco del año pasado, con compañías japonesas como Konami, Capcom, Namco o Square, la mayoría de las americanas y europeas -con Revolution a la cabeza presentando Broken Sword 3- y la presencia estrella de SONY y su PlayStation Experience -con muchas facilidades por parte de la organización- lo cierto es que en Londres ha seguido habiendo grandes ausencias, motivadas todavía no se sabe porqué.
En definitiva, entre la ausencia de nombres propios como Microsoft y Nintendo, las escasas novedades presentadas, motivadas por el escaso margen que tienen los desarrolladores para mostrar progresos desde lo ofrecido en el E3, y la pérdida del interés que esta experimentando el ECTS entre la prensa especializada, parece que la feria más importante del viejo continente está de capa caida, y ya por segundo año. De nada ha servido abrir el evento al público en general para intentar captar más interés.
Mientras reflexionamos en voz alta sobre las razones del punto muerto en el que se encuentra la feria, los planes de la IDSA para la posible celebración de un E3 Europe siguen planeando en el aire. O mucho cambian las cosas en las próximas ediciones o la aparición de competencia para este decano de las ferias internacionales será algo más que probable...