¿Eficacia probada?

Disney acaba de estrenar su nueva película en España, y los juegos basados en el film no se han hecho esperar. En GBA Lilo & Stich prefieren proponernos el arcade más brutal y el uso pausado de la razón.

La historia nos sitúa cuando Lilo, la regordeta niña hawaiana es secuestrada por los alienígenas en un desesperado movimiento fatal... para ellos claro. Stitch, un bicho de armas tomar, creado genéticamente y conocido oficialmente como 'Experimento 626', ha sido diseñado como un instrumento infalible, rápido, escurridizo y mortal. Y ahora anda bastante cabreado, oyes, cuando ve que el único ser capaz de comprenderle y enseñarle el verdadero significado de la vida le ha sido apartado de su lado... ¡snif!.

Así de "lacrimógeno" comienza el cartucho para GameBoy Advance basado en la última película de la factoría Disney en aterrizar en nuestras carteleras. Digital Eclipse, los creadores de este título y sabios consumados ya en las tareas de programación para las portátiles de Nintendo, ha decidido crear un juego que se aparta bastante de las directrices típicas de lo que se ha ido denominando 'juego Disney'. No en vano aquí no tendremos que sortear simples obstáculos, hacer de buen samaritano, resolver simplemente puzzles o convertirnos en el ser más adorable del planeta pegando un par de puñetazos indoloros. En Lilo & Stitch nos encontraremos con un título algo gamberro, lleno de acción, muchos disparos y dificultad a raudales, siguiendo en cualquier caso el espíritu que impregna la película de animación y tratando de acercarse a lo que acontece en la misma desde diferentes puntos de vista.

Sin embargo, lo que en un principio parece prometer diferencias notables con respecto a bodrios anteriores, acaba por fallar y caer en los mismos errores de siempre. Lilo & Stitch trata de conjugar un buen puñado de géneros en un solo cartucho. Desde el arcade de acción más clásico (pon tu nombre favorito), hasta las aventuras copiadas de un tipo extraño, algo amnésico y perdido en un planeta que no parece ser el suyo, pasando eso sí, por unas pequeñas internadas en el espacio sideral a bordo de una endeble nave. Pero Lilo & Stitch no es Flashback (¡premio para el que lo haya adivinado!), no es Metal Slug, ni siquiera se le acerca, no es un shooter impagable de Raizing... Acaba por ser un compendio de todo sin llegar a sobresalir, quedándose en lo meramente anecdótico y desaprovechando una oportunidad de oro en definitiva. Con lo bien que podría haberles salido...

Mención especial también para las escenas cinemáticas, sacadas directamente de las películas, y que aunque están bastantes comprimidas por la propia naturaleza del cartucho, son un bonito aliciente. Las imágenes estáticas por su parte son digitalizaciones en su mayor parte, y no sorprenderán pero sirven perfectamente para llevar el hilo de la narración y como enlace virtual hacia la película.

Desde el primer nivel, en la playa, serás acosado incansablemente por un buen puñado de enemigos que no cejan en su empeño de que pases a mejor vida. Te disparan una y otra vez, desde casi cualquier ángulo y posición dentro de la pantalla. Tú, en el papel de Stitch tienes para defenderte cuatro respetables y terroríficos brazos con sus respectivas armas, pero si de mi dependiera podría haber tenido 20 o más brazos con 10 armas en cada uno. Bueno, puede que haya exagerado un poquito, pero es que la anulación sistemática de poder disparar mientras estás agachado es todo un suicidio y un crimen contra la naturaleza de un juego con un espíritu arcade tan marcado como es este. Une a esto además que los enemigos necesitarán de unos cuantos impactos de bala antes de caer, que muchos de ellos se resisten hasta la eternidad antes de dejarte el paso libre (sobre todo los enemigos finales) y que las bombas en forma de piña tardan una eternidad en ser lanzadas. En definitiva Stitch adolece de lentitud en sus movimientos de ataque lo que agrava aún más el continuo acoso de los enemigos.

Por otro lado, los niveles donde controlamos a Lilo no se escaparán tampoco de nuestra cruzada y de nuestra ira sin límites.. *Ejem*. Si bien pueden ser mejor controlados, ya que no tendremos que disparar tampoco, puede que en ocasiones ponga a prueba tu paciencia con las idas y venidas de un lado a otro sin saber muy bien cual es el camino a seguir o recordar si antes habías pasado por esta u aquella puerta en incansables escenarios laberínticos plagados de ascensores, puertas e interruptores. Afortunadamente en esta ocasión no sentiremos el aliento de un mosquito mutante en nuestra nuca en todo momento, e incluso dispondremos de un arma infalible, como es la de convertirnos en un bonito matorral (basta apretar los botones laterales) y pasar desapercibido en... un momento, ¿una nave alienígena? Lo comprenderíamos si estuviéramos tratando de escapar de un hotel de lujo con millones de macetas con plantas exóticas inundando la recepción, pero no es el caso. Bueno, tanto da, el caso es que probablemente acabéis por disfrutar más de la pausa y razonamiento en las misiones de Lilo, y no tanto del 'machaca-malos' en los niveles de Stich.

Los niveles donde controlaremos la nave de Stitch a través del espacio es finalmente lo peor con lo que nos encontraremos en el cartucho. Por suerte su duración es más bien escasa y su dificultad contrasta peligrosamente con lo que nos encontraremos en el resto de los niveles.

Llorábamos la llegada en nuestra portátil de un auténtico arcade de los de antes, de los que crean escuela y se ganan a pulso un puesto entre los mejores en el limbo de los videojuegos, pero parece que desgraciadamente deberemos seguir tirando de pañuelos porque ese día aún no ha llegado. ¿Quizás CT Special Forces sea finalmente la sorpresa? Ojalá pueda arreglar este o cualquier otro juego, el desaguisado en GBA de juegos arcade frenéticos. Desde luego lo estaremos esperando con los brazos bien abiertos.