Birdie en 3D para Woods!

Introducción

No. No nos engañemos. El golf no es un deporte de masas. La mayoría de los mortales jamás pisaremos una de esas selectas masas de verde hierba, como jamás pisaremos el estadio Santiago Bernabéu o el Camp Nou. No, todos sabemos que ese césped, esa alfombra verde, está vetada para casi todos.

Más aún, estaremos muy contentos cuando visitemos esa especie de miniatura que llaman mini-golf, por no decir lo que fardaremos cuando vayamos a un Pitch and Putt. Luego, ¿por qué adquirir un juego de golf? Pues porque es divertido y… que diablos… ¡ yo también quiero jugar en Augusta!!

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Recuerdo perfectamente la primera vez que un "simulador" de golf aterrizó en mi 286. Ocupaba la friolera de 270 kb, ocupando algo menos que un diskette de 5 y ¼ de baja densidad. No recuerdo la compañía que lo desarrolló, pero en un alarde de originalidad lo llamaron "Golf". Estaba programado para una CGA (4 colores) o una Hércules (monocromo) pero ya permitía una modalidad para dos jugadores. Eran las mismas épocas de Test Drive 1 y creedme, el "Golf" estaba entre mis favoritos. Fue ese juego, y parece increíble, el que me inició en el deporte de los palos, mediante el que aprendí las reglas y con el que pasé ratos de diversión inolvidables. Los tiempos han cambiado y los nombres de los jugadores también, es verdad, pero la esencia persiste.

Y es uno de los pocos deportes donde existe unanimidad para nombrar al nº 1. Mientras el mundo del fútbol se debate entre Raúl, Rivaldo y Zidane, el baloncesto intenta olvidar a Michael Jordan y el tennis encumbra a Lleyton Hewitt, el universo del golf, más elitista que todos los anteriores deportes juntos, lo tiene claro. Ese universo gira alrededor de una sola estrella: Tiger Woods. Es joven, perfeccionista y técnicamente imbatible. ¿Quién mejor para protagonizar un videojuego de Electronic Arts?

Vídeo

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Tiger Woods ha supuesto una revolución para el golf. Tiger Woods PGA Tour 2002 es una revolución desde el punto de vista gráfico. Si, los tiempos cambian, y uno tiene que adaptarse. La desgracia de los que vivimos con un PC en la mesa es que los desarrolladores no saben que nuestros bolsillos SI tienen un fondo; contínuamente están apretando para que invirtamos todos nuestros ahorros en constantes actualizaciones del hardware. Bueno, pues si uno quiere disfrutar al máximo del novedoso engine gráfico de Tiger Woods PGA Tour 2002, ya puede ir pensando en adquirir una nueva tarjeta gráfica como poco.

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Y es que es difícil encontrar un juego deportivo en la actualidad que consuma tantos recursos como el que tenemos entre manos. El juego iba bastante bien en mi Athlon 1600 con 256 RAM y una Radeon 64DDR a 1024 x 768, pero pegaba tirones en algunos momentos. Eso, que a primera vista parece una mala notícia, en realidad no lo es. Headgate / Electronic Arts han desarrollado un novedoso engine gráfico que dejará sorprendido a más de uno. TODOS los campos (aunque en realidad sólo hayan 6 disponibles) están renderizados en 3D en su totalidad. Incluso aquellas zonas que jamás pisaremos, aquella parte de la hierba que nunca llegaremos a ver (o nunca deberíamos, de jugar de manera mínimamente decente) pues también está renderizada como si fuese una parte crucial del campo. ¿Todo está en 3D? Bueno, no todo, vale. La galería está en 2D; alta resolución, si, pero 2D.

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No me cansaré de repetir la fabulosa labor gráfica de los programadores. Prácticamente la totalidad del campo (por lo que dicen excelentemente recreado, pues un servidor no ha estado nunca en ninguna de esas maravillas), con todos sus detalles, está ante nosotros para explorar, disfrutar… ah, y también para meter la bola en el hoyo, de vez en cuando. Si, de acuerdo, las texturas parpadean en los cambios de cámara, pero si tenemos en cuenta la increíble masa de polígonos que forman jugadores y escenario, los múltiples ángulos desde los que podemos observar tanto el recorrido como a los jugadores… si, creo que vale la pena. No se si estoy yendo muy lejos pero, con el debido respeto a la serie Links, nunca un juego de golf ha tenido tan buen aspecto. Es caro de disfrutar al máximo, eso si, pues los requisitos del sistema son altos, pero gráficamente es muy, muy bueno. Todos los jugadores, desde el mismo Woods, Justin Leonards, Vijay Singh, Collin Montgomerie, Brad Faxon… son plásticamente casi perfectos.

No tan buenas son las animaciones de los golfistas. Es curioso, pero tan pronto mostré el juego a 2 colaboradores amigos míos, todos coincidimos en el mismo aspecto. Tanto en éste como en la física de la pelota, de la que hablaremos más adelante. Es extraño como tras la extraordinaria labor gráfica de un juego como el que tenemos entre manos, las animaciones no le acompañen en cuanto a calidad o en cantidad. De hecho, en muchos casos no hay ni tan siquiera transición de un golpe a otro.

Si bien es cierto que tras 4 ó 5 partidos pulsaremos "enter" tras cada bola, pues querremos observar inmediatamente el resultado de nuestros esfuerzos cuanto antes (y en mi caso no será pulsar sino aporrear el "enter", hay que ver lo mal que puedo llegar a jugar a veces), no estaría de más haber añadido unas cuantas animaciones extra tras un buen golpe (o añadir todavía muchas más tras uno malo) para dar una mayor sensación de realismo. El seguimiento que la cámara hace a la bola es asimismo bastante malo. La mayoría de las veces no sabremos a qué diablos está siguiendo la cámara, pues es virtualmente imposible ver la trayectoria de nuestro golpe mediante el sistema automático.

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Audio

La melodía durante el juego es… bueno, digamos que cumple su función. No olvidemos que el golf es un deporte de silencio, y si queremos disfrutar en su totalidad de la esencia de este deporte deberíamos oír cuanto menos, mejor. Sin embargo, la sintonía que acompaña los menús es alegre y el sonido in-game bastante realista. El suave golpeo del agua contra la roca, los aplausos o las expresiones de júbilo del público, el cantar de los pájaros o los árboles cuando mecen sus copas a raíz del viento son solo breves ejemplos del intento de los chicos de Electronic Arts para sumergirnos dentro del mundo del golf donde, como ya dije, no proliferan el ruido de fondo ni los sonidos fuera de lugar.

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Mención aparte merecen los comentarios de los speakers. No creo que lleguen traducidos al castellano, pero debo admitir que en inglés no solo son muy acertados sino que además son de muchísima utilidad. Ya que nuestro caddy muchas veces olvida su labor, los comentaristas suplen su función con una pasmosa precisión. La exactitud y la variedad de frases que han sido programadas es la más extensa que he visto nunca; los consejos que dan para el siguiente golpe son sorprendentemente minuciosos y realistas. Y, eventualmente, incluso son graciosos. También es verdad que un servidor les daba pie a que descargaran en mi toda su ira dialéctica pues la realidad es que yo, un humilde handicap 27, no di pie con bola en los primeros recorridos. Y a eso venía cuando antes hablé de los rincones renderizados del campo que nunca deberíamos ver: yo se que están ahí porque yo he estado. Todo sea por indagar en el juego, ¡ qué le vamos a hacer…!

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En definitiva, un apartado sonoro que poco podía hacer para ser brillante, que muy difícil no lo tenía para ser correcto, y que finalmente se queda en una zona intermedia, mejorable, pero adecuada al fin y al cabo. Queda pendiente ver si, en su versión española, está completamente traducida y doblada al español (aunque el manual indica que así se hará, hasta que no lo vea no lo creeré).

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Jugabilidad

El mundo del entretenimiento evoluciona. Hace algunos años ya nos pudimos montar en un avión para pilotar "Afterburner". Hemos fabricado coin 'op de fútbol donde chutamos verdaderamente un balón, hemos fabricado un simulador de ski donde verdaderamente vamos montados sobre dos skis… Bueno, no creo que Thrustmaster nos deleite con un pad con forma de palo de golf, y creo que los chicos de Electronic Arts tampoco confían en eso, así que han centrado sus esfuerzos en intentar ofrecer una máxima sensación de realismo… desde el mouse.

El resultado de esos esfuerzos es el también novedoso "TrueSwing". El TrueSwing es la culminación de los sistemas de manejo de un palo golf con un mouse. Tras el sistema tradicional de dos o tres clicks, Electronic Arts ha querido dar un paso adelante en este campo, asignando los parámetros de fuerza y efecto a un solo movimiento del ratón. De este sistema existen también dos variantes, pero la más compleja de todas puede ser la más gratificante… y a la vez la más frustrante. Todo gira en tratar de simular el movimiento del palo (preparación, golpeo, terminación) con una "U" a realizar con la mano derecha. Debo admitir que tras probarlo en un par de recorridos, lanzar mi mouse inalámbrico varias veces contra el monitor, y tras acabar con 25 golpes sobre el par, desistí y volví al sistema tradicional de 3 clicks. Qué queréis que os diga, estoy chapado a la antigua.

Ah, si sois los afortunados poseedores de un mouse óptico estáis de enhorabuena. Al querer dar la máxima velocidad al golpe a menudo la bola del ratón resbala y la precisión no alcanza las cotas que desearíamos (o como mínimo esa es la excusa que yo pongo al fallar un golpe). Más en serio, aquellos que todavía no sepáis que bajo ese aspecto inofensivo que tiene vuestro ratón, se esconde una bola con una serie de rodamientos que se ensucian, olvidad el TrueSwing. Bueno, en realidad deberíais limpiarlo igualmente, no nos engañemos, y a buen seguro que nuestros compañeros de la sección de hardware os pueden echar una mano para enseñaros cómo hacerlo, pero para este Tiger Woods con el TrueSwing esa pulcritud es cuanto menos que im-pres-cin-di-ble.

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TrueSwings aparte, supongo que no hace resaltar que todas las posibilidades que existen dentro del juego del golf vienen representadas en Tiger Woods 2002, incluso los gimmies. 6 campos de juego vienen representados a la perfección en los dos discos que acompañan el simulador, lo cual deja lugar a múltiples expansiones (oficiales y oficiosas) por parte de EA que seguramente nos invadirán en un futuro. También es cierto que faltan algunos jugadores del circuito profesional, incluso algunos "históricos" que dieron nombre a otros también históricos simuladores de golf. Bueno, tal vez los veamos en el futuro… El juego nos da la posibilidad también de crear un personaje desde el nivel amateur (mi primer personaje se llamó Nicklaus) y muchísimas opciones más que jamás llegaremos a utilizar. O que la mayoría jamás llegará a utilizar, que no es lo mismo.

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Respecto a alguna corrección que haya podido comprobar sobre alguna versión anterior destaca especialmente la física de la pelota. Se ha mejorado mucho y sin embargo todavía no alcanza la perfección. Me explico: hay un par 3 en el campo de Pebble Beach que me tuvo insistiendo una y otra vez hasta que entendí que era físicamente imposible conseguir que la bola parara en el green al primer golpe. Sencillamente el bote de la bola la lanzaba al agua. Y cuando tocaba la hierba alta, el rough, frenaba en seco sin posibilidad de ni tan siquiera rodar un poco. Algo que parece tan absurdo me tuvo golpes y golpes… y nada. Y ese tipo de error se reproduce en algunas ocasiones a lo largo de los recorridos. Simplemente no afectan demasiado a la jugabilidad, pero son cosas que deberían pulirse de cara a futuras versiones. Y es agradable ver como este error no era propio de mi versión, pues tras consultar otros redactores de otros medios que habían probado el juego, coincidieron en este punto.

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El manual, que a nosotros nos ha llegado en formato pdf es muy completo. Trae incluso biografías de los jugadores, los campos… Esperemos que en su versión impresa conserve la totalidad de su contenido o, mínimo, respeten la versión acrobat como extra en los dos cds que integran el videojuego.

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Por último, y no por ello menos importante, recordar el campeonato via internet del juego. El año pasado había un premio nada despreciable de 15000 dólares americanos al ganador y este año se repite. Otro punto a favor para la compra de este Tiger Woods PGA Tour 2002… ¿o es que no había ya suficientes?

Lo que está bien

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Lo que no está tan bien

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