Jedi a los mandos...

Star Wars JediStarfighter sigue la estela dejada por su predecesor en Xbox, el Starfighter Special Edition. Se trata de un arcade espacial lleno de giros en su trama, que discurre paralelamente a los eventos que se describen en el Episodio II: El Ataque de los Clones, pero sobre todo que derrocha acción por los cuatro costados.

Después de haber tenido el placer de contar entre los juegos de salida con el Star Wars Obi Wan en exclusiva, y tras la sensación de indiferencia causada en la mayoría de los usuarios no seguidores de la saga galáctica por éste título, nos encontramos ahora con la versión de este Jedi Starfighter, que promete volver a tener las mismas sensaciones de diversión que el anterior Starfighter.  El juego tiene nuevas naves, nuevas armas y nuevos "poderes" con los que saciar la sed de acción de los que en su día jugaron el Star Wars Starfighter.

Básicamente la historia es la siguiente: Tras la derrota de la Federación de Comercio en la Batalla de Naboo, el Conde Doku y el capitán Cavik Toth han unido secretamente sus fuerzas. El maestro Jedi Mace Windu presiente problemas así que consigue que el consejo Jedi envíe a la maestra Jedi Adi Galia para investigar al sistema estelar Karthakk. Parece que todo está relacionado con el sentimiento separatista que está invadiendo la Galaxia.

Adi Galia ayuda a Nym a derrotar a la Federación de Comercio, ya que el Capitán Cavik Toth ya había tomado el lugar donde se asienta el hogar de Nym con lo que pretendía tomar el control de las fuentes de riqueza del sistema Karthakk.

Los eventos que narra el videojuego discurren paralelamente a los que narra la película sin que por ello se desvelen más que los nombres de algunos personajes de la misma. Aunque no sabemos si ciertos giros del guión son guiños a la trilogía clásica, incluso al Episodio I, o simplemente es que los guionistas han puesto el "piloto automático" y han "tirao p'alante".

Los gráficos vuelven a ser buenos. Mejoran los vistos en la anterior entrega más que nada porque la anterior fue una mera conversión y ésta no. Aun así esperábamos un salto cualitativo mucho más grande, pero no ha sido así y nos tenemos que conformar con bastantes mejoras que no llegan a saciar las ilusiones creadas durante la espera.

El juego incorpora una larga lista de nuevos modelos de naves, un buen puñado de nuevos personajes, nuevas localizaciones a visitar y sobre todo una mayor calidad en las texturas, en los vídeos y en la implementación del motor gráfico que consigue una fluidez muy por encima de la media en lo que llevamos visto hasta ahora en XBox.

Las naves están más detalladas que en la anterior entrega. Pero comparando las que vuelven a aparecer, como es el caso del Havooc de Nym, se puede comprobar como el paso del tiempo y las múltiples aventuras han dejado su huella en el fuselaje de la misma, pues los programadores se han encargado de reflejar dicho paso en las texturas de la misma. 

Las texturas están mucho más trabajadas que en el capítulo anterior y se nota, pero mucho de éste apartado se lo debe a la potencia de la consola, que apenas se despeina para tratar con tantas y tan buenas texturas a lo largo de todo el juego. Las texturas han sido recreadas de una manera que sorprende por su variedad y su realismo, con un resultado brillante por momentos.

La mezcla de misiones, unas veces en superficie de planetas y otras a espacio abierto, dotan al juego de una variedad que hace que pierda monotonía y gane en jugabilidad y adicción, así como la posibilidad de ofrecer una experiencia visual muy variada al estar cambiando de escenario cada dos por tres.

Las luces y las sombras que éstas generan tienen un tratamiento mejorado que sin embargo no acaba de llenarnos de una manera convincente, al tratarse esta consola de la más potente de las que hay en el mercado. Esperábamos algo más impactante. El resto de efectos visuales como las explosiones, los rayos láser y demás rayan a gran altura. Las explosiones son muy variadas y dependen del tipo de estructura que estalla, es decir, que no se ve la misma explosión si es una torre de defensa lo que estalla que si es un caza o todo un crucero estelar, o una nave de reconocimiento, etc.

El sistema de partículas ha sido mejorado y ahora las naves estallan en muchos más fragmentos que en el episodio anterior pero siempre considerando el tamaño de la nave y el lugar de la explosión. Las más grandes suelen dejar tras de sí un anillo a modo de onda expansiva que ilumina el espacio o el cielo, dependiendo de donde se produzca.

La banda sonora es algo que LucasArts siempre cuida con mucho esmero y esta vez no iba a ser menos. Maravillosas las melodías, como siempre, la orquesta interpreta temas de la trilogía clásica y del episodio I. Quizás la única pega sea que no hayan sacado todo el partido posible al sistema surround y que de haberlo explotado convenientemente habría sido uno de los aspectos más destacables del juego. Pero no ha sido así.

La traducción y el doblaje al Castellano vuelven a estar presentes, a pesar de que las "betas" enviadas a la redacción nos hacían temer todo lo contrario. Un dato que nos parecía  incomprensible habida cuenta de que otras versiones del juego si habían gozado de esta característica. Una vez más LucasArts no ha escatimado esfuerzos a la hora de contar con grandes voces y buenos profesionales para llevar a cabo esta labor, que sirve de ejemplo a seguir por otras compañías más reacias a embarcarse en estas localizaciones para países de habla no inglesa.

Destacar las voces durante los combates aéreos, que están muy logradas y transmiten bastante bien la tensión, sobre todo en las misiones más avanzadas. 

La jugabilidad del juego es la misma que la exhibida por el anterior episodio. Misiones de escolta, de defensa de objetivos aliados, de destrucción de objetivos enemigos, ataques a bases del enemigo, defensa de las bases aliadas, etc. han dividido este juego en tres episodios que divide la aventura en 15 misiones. Pero contaremos con unas cuantas misiones extra.

Los objetivos de las misiones se dividen en tres variedades: objetivos básicos, objetivos bonos, y objetivos secretos. El juego es una continuación y como tal sólo aporta las pequeñas novedades necesarias, no cambios radicales que hagan variar la fórmula de diversión que vimos la vez anterior.

Adi Galia pasa a ser la protagonista principal, junto con Nym, ya que los desarrolladores decidieron que fueran sólo dos personajes esta vez los que participaran en la historia. Nym ya apareció en la primera entrega, y pilotará su conocido "Havooc" al cual le ha hecho las oportunas mejoras para hacerlo más poderoso, más demoledor, más destructivo. Vuelve con toda su artillería, pero además se le ha armado de misiles crucero, misiles "racimo" y minas de proximidad.

La maestra Jedi, que ya hiciera sus pinitos en el Jedi Power Battles de otras plataformas, es Adi Galia, una intuitiva mujer nacida en el seno de una familia diplomática de Coruscant muy bien situada, gracias a la cual tiene unos muy buenos contactos políticos. Pertenece al Alto Consejo Jedi. Lleva en la cabeza un tocado Tholoth que la hace fácilmente reconocible.

Como personajes secundarios están Geti, pilotando un "Zoomer", Jinkins a los mandos de su "Freefall" y Siritachi, otro maestro Jedi que controla su propio Jedi Starfighter. Como viene siendo habitual cada nave tiene sus propias características de maniobrabilidad y armamento.

De todas las acciones que tiene el juego, la que destaca por encima de todas son las acciones derivadas del uso de la fuerza que tiene ciertos personajes. Los poderes son los siguientes:

El uso de estos poderes hará bajar considerablemente el nivel de fuerza del personaje. Según vayamos avanzando comprenderemos la importancia de vernos con el nivel de fuerza reducido a 0 ya que sin su uso la nave de los Jedi no es tan poderosa. Además conviene controlar este tipo de acciones ya que son de vital importancia a la hora de combatir a los jefes finales del juego.

Los botones siguen distribuidos de la misma manera que en la entrega anterior, por lo que los jugadores veteranos no tendrán problema en hacerse con los mandos. Los nuevos jugadores que se acerquen por primera vez a este juego se verán sorprendidos por la fácil asimilación de los mismos, por la suavidad del control y por lo maravilloso que resulta muchas veces el botón de zoom.

Es un control muy intuitivo y fácil. Podemos realizar muchas acciones , pero aún así se comporta de una manera muy versátil, como el de la primera parte.

El modo para dos jugadores se divide en dos: modo cooperativo y modo uno contra uno. De los dos el más jugable y rejugable es el modo cooperativo. Es una de las facetas que alargan la vida del juego, su "durabilidad". Bueno, esto y los múltiples extras que esconde.

Tiene multitud de secretos por desbloquear, desde nuevas naves entre las que se encuentra el Slave I de la familia Fett, hasta trailers de juegos de LucasArts que saldrán próximamente para la consola de Microsoft.

Las misiones B dejarán al descubierto los extras del juego, como trailers de futuros juegos de LucasArts, más misiones para uno o dos jugadores, galerías de imágenes, vídeos relacionados con Star Wars, nuevas naves para usar en el juego entre las que se encuentran los legendarios Tie-Figter y X-Wing, así como la aparición estelar del Slave I.

También es muy recomendable para los aficionados a los shoteers de ciencia-ficción con naves como protagonistas, por su sencillo manejo y su atrayente historia. Mayo está a la vuelta de la esquina. Vayamos matando el gusanillo.

Esta versión del juego para Xbox no aporta nada que no hayamos visto en la anterior, a no ser el gran modo cooperativo para dos jugadores, en el que podemos pasarnos la aventura con un colega, misión por misión, como si de un tándem de jedis se tratase.

La fuerza empieza a ser poderosa n XBOX, aunque lo haga más por la variedad y el número de títulos, presentes y futuros, que porque verdaderamente explote convenientemente la máquina que le han puesto a su disposición.

L  o    p  e  o  r