Captain Tsubasa: Eikou no Kiseki (GameBoy)

Capitán Tsubasa, u Oliver y Benji tal y como se conoce la serie en España, es seguramente la serie más conocida de fútbol que ha dado el manga japonés. Este juego de GBA permite meterse de lleno en el universo de esa serie, jugando partidos de fútbol al más puro estilo de la serie.

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¿Quien no ha soñado algún vez con hacer el "tiro del tigre" o la "catapulta infernal", en el partido de los Viernes con los amiguetes?. Cualquiera que haya visto la serie seguramente haya pensado en la cara que pondría todo el mundo al verle volar por los aires para marcar un gol, o tirar tan fuerte que sea capaz de derribar a los defensas, al portero y hacer un agujero en la red. Aunque, lamentablemente, esto sea físicamente imposible para un ser humano (por lo menos sin implantes biónicos), no quita el hecho de que sea algo divertido de imaginar, y tambie'n divertido de jugar, tal y como demuestra este "Captain Tsubasa: Eikou no Kiseki", un juego que, aunque basándose en una serie con el fútbol de protagonista, no es un juego de fútbol, sino de estrategia por turnos.

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Antes de extrañarse por este hecho, mejor explicar la mecánica general del título. Se tiene un campo de fútbol con sus 11 jugadores por equipo y dividido por casillas, siendo el "tablero", por llamarlo de alguna forma. El tiempo del partido se divide en turnos, uno para cada equipo, y en cada turno se tiene un numero de movimientos, que determinan cuantos jugadores pueden moverse, distancia de un pase, o lugar donde se puede efectuar un tiro (no la distancia que puede recorrer un jugador, ya que este está siempre limitado a moverse una casilla a su alrededor).

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En esa pantalla es donde se efectúan los movimientos a cada turno, pudiendo decidir hacer alguna acción (ilustrada con una secuencia corta de animación), o que la computadora haga una. las acciones depende si se está en defensa o en ataque. Estas acciones solo se limitan a "entrada" si se está a la defensiva, tiro si se está atacando (tanto pase como movimiento quedan reflejados en la tabla y no tienen secuencia). Llegados a este punto, hay que hablar de como se deciden estas acciones, que no es de otra forma que con cartas, y es que, en el fondo, este es un juego de cartas.

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Cada jugador aparece ilustrado mediante su carta personal, en donde aparecen sus números en las tres áreas: Defensa, Control y Tiro. Cada una de estas características se aplican en un momento concreto, como Defensa, que es cuando se realiza una entrada, o Control que es cuando se está uno defendiendo de una entrada. Aparte de la tarjeta personal, cada turno se va añadiendo una carta a la lista del jugador, hasta un máximo concreto (por encima de ese número habrá que descartar una). Estas cartas sirven para distintas cosas según sus colores, unas sirven para dar moral a todo el equipo, otras para cambiar las estadísticas de los jugadores y las rojas, que sirven para efectuar "acciones especiales", además cada carta tiene asignado un número en su borde izquierdo.

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Las acciones se resuelven en una secuencia aparte, en donde se ponen en juego tres cartas como máximo. La primera es siempre la personal del jugador, en la que se refleja su estadística en la acción a jugar, luego se permite poner una carta especial si es que quiere ponerse en juego (hay que tener en cuenta, que las rojas hay que ponerlas en un mazo aparte de entre las que tiene el jugador, solo pudiendo almacenar un máximo de tres) y por último, una carta en donde solo se tiene en cuenta su valor. Se suman los números de cada jugador, y el que tiene mayor puntuación gana, apareciendo una secuencia con el resultado.

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Las secuencias están bastante bien, aunque son siempre las mismas, a menos que se utilice una carta especial, en donde se mostrará el movimiento especial que se haya efectuado. Esto está bastante bien, porque se puede ver una gran cantidad de movimientos como la Catapulta Infernal, el Tiro del Tigre, la parada usando el póster para impulsarse de Ed Warner y una gran cantidad de acciones que hacen el juego todavía más ameno de jugar.

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Se trata de un título de estrategia bastante bueno, con mucha variedad de posibilidades y acciones. Si se tiene un mínimo conocimiento de japonés, se le puede sacar todo el jugo, ya que no hay una gran cantidad de texto (incluso no sabiendo japonés se hace bastante divertido). Si este redactor insiste en el tema del japonés, es que, lamentablemente, la posibilidades de traer este título en España son nulas. No tiene sentido, porque la serie goza de popularidad aquí, pero si ninguna distribuidora está interesada, lo único que se puede hacer es ir a tu tienda de importación de confianza y hacerte con el juego. Sin lugar a dudas, es un título de mucha más calidad y capacidad de diversión que el 90% de los títulos que se pueden encontrar en las tiendas de nuestro país para la portátil de Nintendo, así que para los que ya tengan ese 10%, quizás ya va siendo hora de darle algo de variedad y exotismo a tu colección, la diversión está asegurada.