Este verano los aficionados a los juegos estamos de suerte, no sólo porque dispondremos de tiempo extra para disfrutar de nuestros juegos favoritos, sino porque en esas mismas fechas comenzará el primer gran asalto para la supremacía de los gráficos 3D.
Y es que no es simple coincidencia que Nvidia y ATI hayan fijado para primeros de verano la comercialización de los nuevos chipset de gama baja, es decir, los chips basados en el núcleo NV18 para Nvidia y RV250 para ATI. O hablando más comercialmente, la sustitución de las actuales tarjetas Geforce4 MX440 y Radeon 7500. El lugar seguramente escogido tanto por desarrollarse a principios de verano, como su situación geográfica será la exposición Computex Taipei.
Este enfrentamiento será el primer punto de contacto para estudiar las estrategias iniciales de ambas compañías, mientras esperamos la llegada de las Navidades donde se realizará la verdadera cruzada por tener la tarjeta 3D más rápida del mercado. Los chips estrella NV30 para Nvidia y R300 para ATI demostrarán a los usuarios hasta que punto la potencia gráfica ha aumentado desde la aparición de las primeras tarjetas 3D y sobretodo la calidad gráfica que puede apreciar el usuario con un optimización del código en ambas tarjetas, listas para trabajar a toda potencia bajo las nuevas DirectX 9, que serán distribuidas como muy tarde en el mismo momento que se comercialicen ambos chips.
Mientras ATI de momento es la compañía que lleva más avanzado su desarrollo interno, la compañía canadiense Matrox, la gran relegada al tercer puesto, vendrá a demostrar también con la llegada de la nueva Matrox Millenium G1000 que no ha abandonado el tren de los productos enfocados a usuarios exigentes en todos los frentes gráficos, con especial atención en el ámbito profesional.