No hemos podido contenernos. Uno de los juegos de lucha más originales, divertidos y adictivos no podía escaparnos inadvertido. Y así fue... Desde su lanzamiento en Japón el pasado noviembre nos hicimos con una copia y éste ha sido el resultado...
No hemos podido contenernos. Uno de los juegos de lucha más originales, divertidos y adictivos no podía escaparnos inadvertido. Y así fue... Desde su lanzamiento en Japón el pasado noviembre nos hicimos con una copia y éste ha sido el resultado...
Después de muchas horas de juego a la versión nipona del título (Smash Brothers DX es el nombre que recibe en Japón), los motivos de este éxito quedan más que justificados, pues este juego remedia en gran parte los defectos achacados a la primera parte, además de traer un aspecto completamente renovado técnicamente y conservando buena parte de la mecánica que ha hecho tan popular a este título.
Una vez superado este homenaje entrañable a Miyamoto San, Mario y la princesa Toadsol esperan al jugador en el castillo para un combate uno contra dos. A partir de ahí, se visitan varios juegos como Zelda, F-Zero o Metroid, cada fase con sus propias peculiaridades, y algunas mejores que otras, pero gozando todas de un buen nivel que hace que la experiencia para un jugador cobre una nueva dimensión en un título que la tenía un poco desamparada.
Este sistema no es matemático, simplemente, cuando más se golpea al adversario, más posibilidades hay de pegarle el golpe definitivo, pero uno puede dejar a su contrincante al 200% y no conseguir echarlo ni a patadas, por lo que es poco predecible. Además de ese sistema, también se puede eliminar a un adversario haciendo que caiga fuera del ring sin posibilidades de que pueda regresar, algo realmente complicado pues todos los personajes tienen un doble salto que pueden combinar con un movimiento de impulso, haciendo la tarea harto difícil.
Esto tiene su doble filo, pues en este aspecto influye lo alocado y rápido que discurre la acción, lo que hace que haya personas que no estén atraídos por este modo de jugar, gustando de algo más definido controlado como son los juegos de lucha 3D al estilo de Virtual Fighter o 2D como King of Fighters, pero en esto juega un gran papel los gustos de cada uno.