Acción sin más...

La compañía Ucraniana GSC Game World que ya nos brindó el excelente Cossacks, nos ofrece en esta ocasión un juego basado en un guión poco original que pretende ser una mezcla de acción, estrategia y táctica. Sin embargo no llega a lograr ese cóctel que por otro lado hubiera sido una buena alternativa a juegos como Operation Flashpoint que puede llegan a abrumar a algunos jugadores debido a su complejidad táctica.

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Lo primero que sorprende del juego es que durante la instalación se nos indica que vamos a instalar determinados componentes, algunos de terceras compañías, pero sin darnos información alguna sobre la utilidad de cada uno ni del tamaño que ocupan. Además se nos da la opción de hacer una instalación completa o reducida pero sin darnos datos sobre la cantidad de "megas" que necesitaremos en cada una (ni siquiera en el manual).

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Pasado este pequeño bache tenemos opción, una vez instalado el juego, a configurar los gráficos y el sonido a nuestro gusto. Hecho esto podemos ejecutar ya el juego seleccionando si queremos una partida de un jugador o multijugador en red o por Internet. Seleccionando la opción de un jugador se pasa a la introducción de la misión por medio de un mapa y texto (no hay comentarios por voz). Tras esto podemos seleccionar el equipo que intervendrá (sólo dos personas por misión) y empezar a jugar.

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Hay que comentar que aunque el juego no está doblado al español, sí que está subtitulado aunque sólo veremos dichos subtítulos durante el transcurso de las misiones ya que durante los videos introductorias que preceden a las mismas los comentarios nos son acompañados de subtítulo alguno por lo que, a menos que tengamos un buen nivel de inglés, no nos enteraremos de lo que nos están explicando antes de comenzar la acción.

Audio / Vídeo

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El sonido ambiente es, con diferencia, lo que más destaca del juego. A medida que avanzamos campo a través para no ser detectados podemos oír grillos, pájaros, el ruido de un río cercano e incluso la actividad cercana de algún enemigo. Es el aspecto más cuidado del juego y es una gozada pues te sientes más inmerso en el entorno. Asímismo el sonido de las armas, vehículos que aparecen en el juego y de los disparos que nos alcanzan de los enemigos están, a su vez, bastante logrados y aportan una buena dosis de realismo. La música sin embargo se limita a hacer acto de presencia con un ritmo de rock cuando nos enzarzamos en un tiroteo con algún enemigo. Su calidad es simplemente correcta y su presencia en el juego bastante limitada.

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Lo que no acaba de estar a la altura de un juego de este tipo son los gráficos. Aunque GSC ha hecho un esfuerzo por crear su propio motor 3D, éste no se encuentra a la altura de los mejores del momento y se muestra más bien similar a otros más antiguos. Los escenarios son correctos y ganan algo más de calidad con todas las opciones gráficas a tope (32 bits de color, filtrado trilineal, etc.), pero exigiendo a cambio una configuración muy alta. Sin embargo choca que el interior de los edificios del juego esté tan mal modelado y con tan pocos detalles, es un aspecto que han descuidado bastante.

Resulta a su vez un poco desconcertante ver como determinados elementos gráficos son repetidos con descaro en un mismo mapa. Así en la primera misión del juego podemos comprobar que cada vez que nos topamos con ruinas de casas que se encuentran dispersas por el mapa, observamos que son casi idénticas repitiéndose en todas ellas un gráfico de una pared derribada bloqueando una puerta. Podían haberle echado algo más de imaginación ¿no?.

Los efectos del agua, además, son francamente malos. La verdad es que no parece ni agua de tan mal que está representada. Resulta también apreciable un horrible efecto de popping que hace aparecer repentinamente elementos del entorno a medida que nos acercamos a ellos. Y eso teniendo desactivada la opción de que el juego adapte los gráficos automáticamente en función de la carga de polígonos que haya en pantalla. El motor 3D sí permite, sin embargo, modificar ciertos aspectos del entorno, así si tiramos un misil en el interior de un edificio, ciertos elementos del mismo aparecerán quebrados o rotos después del disparo, pero poco más.

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Guión

Hay que reconocer que este aspecto es el menos original del juego. Sencillamente trata sobre unos alienígenas que han llegado a la tierra en un meteorito y que están empezando a abducir a los humanos controlando su voluntad. En fin… lo de siempre.

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Por lo visto en su origen la historia iba a estar situada en el conflicto checheno, lo que se consideró improcedente por los continuos actos terroristas que sufren actualmente los rusos en aquella zona, cosa que podría herir la sensibilidad de más de uno. Luego se pensó situarlo en el desastre de Chernobil, pero también se descartó por el mal gusto de la historia. Finalmente se optó por la solución más sencilla y universalmente utilizada en videojuegos: la invasión extraterrestre. Lo dicho...

Jugabilidad

El juego se divide en misiones que habrá que ir cumpliendo de forma secuencial. Algunas transcurren en campo abierto y otras en el interior de edificios. Siempre hay una serie de objetivos a cumplir en cada misión de los que se nos informa antes de empezar y durante el juego pueden surgir otros nuevos sobre la marcha. Sin embargo los objetivos son confusos de verdad. Por ejemplo, en la primera misión debemos, supuestamente, hacer un reconocimiento de la zona sin pegar un solo tiro. Bien pues, nada más aparecer en el mapa nos encontramos con que nos están acribillando a tiros sin haber dado tiempo ni a mover el ratón, lo que nos obliga a apuntar rápidamente y empezar el tiroteo… ¡Un comienzo un poco extraño para una misión de reconocimiento!

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En estos detalles es donde se nota que el componente táctico es realmente inapreciable. También en la primera misión tenemos que evacuar sobre la marcha a un científico a una zona de evacuación. De acuerdo, pero… ¿Dónde está esa dichosa zona de evacuación? Esta no aparece en el mapa lo que nos obliga a ir dando tumbos, y los mapas son enormes, buscando la zona de evacuación. Resulta desesperante de verdad.

Dado que se trata en el fondo de un shooter en primera persona, los controles que encontramos son los habituales en este tipo de juego con ligeras modificaciones. Se añade la posibilidad de dar ciertas órdenes a nuestro compañero de misión (sólo llevamos uno), de modo que podemos ordenarle atacar, que nos cubra, mantener la posición y ordenarle el alto el fuego. Lo cierto es que, a la vista de los comandos disponibles, de nuevo queda patente que el pretendido componente táctico del juego queda muy reducido resultando a fin de cuentas un juego de acción en el que debemos disparar sobre todo lo que se interpone a nuestra misión. Esto resulta todavía más evidente en aquellas misiones que transcurren en el interior de edificios en las que no paran de salir "malos" de todas partes para que los eliminemos.

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La IA del juego resulta un poco floja, la verdad. Otros juegos similares bordan este aspecto pero no es el caso de Codename Outbreak. Si bien es cierto que el ruido que hagamos puede alertar a los enemigos y que estos no se quedan parados esperando a que los matemos, sus reacciones sin embargo distan mucho de ser inteligentes y se muestran bastante torpes. Asimismo, nuestro compañero de misión, el cual también es controlado por la IA del juego aunque podemos pasar a controlarlo en cualquier momento si así lo deseamos, tiene también un comportamiento bastante extraño por momentos. Si nos encontramos en tierra firme este nos seguirá allá donde vayamos, pero si se nos ocurre subir a una de las torres de vigilancia que hay por algunos mapas pueden ocurrir 3 cosas:

A pesar de todo nuestro compañero tiene una utilidad, que es la de indicarnos la posición de los enemigos escondidos que nos disparan. Muchas veces recibimos tiros sin ser capaces de ver el origen de los mismos. Sin embargo nuestro colega los detecta enseguida y se lía a tiros con ellos. Basta con echar un ojo para ver dónde está disparando para adivinar dónde se esconden los malos. Sin este truco es imposible saber quién te está masacrando.

Para defendernos en el juego disponemos de una curiosa arma multifunción que combina varias armas en una. De este modo, en función de la tecla que pulsemos nuestro subfusil (arma por defecto) girará y se convertirá en un rifle francotirador, en un lanzamisiles o en cualquier otra a la que tengamos acceso. Desde luego es una forma de ahorrar en modelado 3D… Todas las armas disponen de un zoom que permite acercar la imagen y de paso escuchar ruidos y conversaciones de enemigos lejanos. Lo cierto es que, como la mayoría de las veces no vemos a los enemigos, mientras nuestro compañero de misión no detecte alguno tenemos que ir escudriñando constantemente el horizonte con el zoom intentando detectarlos antes de que nos vean ellos.

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Multijugador

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Las opciones multijugador de Codename Outbreak se dividen en cooperativa y enfrentada. Si optamos por el primer modo podemos jugar con otros compañeros (hasta 16) en cualquiera de los mapas del juego en modo cooperativo enfrentándonos a enemigos controlados por IA.

El segundo modo es el más extendido en este tipo de juegos y podemos elegir entre 3 variantes:

Cristal: En este modo dos equipos de 8 jugadores como máximo deben luchar por obtener más cristales que el otro. Estos cristales aparecen aleatoriamente por el mapa y se pueden incluso robar al equipo contrario.

CTF (Capture The Flag): El modo ya conocido en otros juegos de este estilo. Los dos equipos, cada uno de un color, deben intentar capturar la bandera del bando contrario y llevarla hasta su base para puntuar. El que más puntos consiga gana.

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Caja Negra: Aquí los dos bandos deben esmerarse encontrar una caja negra situada en algún punto del mapa que contiene información clave. Una vez encontrada debe ser llevada a la base para descifrar su contenido.

Para estos modos no cooperativos solo disponemos de 6 mapas en los que jugar, lo que se nos antoja un poco escaso. No existe ningún modo Deathmatch. Además existen algunos trucos que se pueden utilizar en la opción multijugador y que permiten colocar minas en sitios estratégicos o crear hologramas que confundan al equipo contrario.

En el momento de escribir estas líneas sólo se pudieron encontrar, por medio de un programa de búsqueda de servidores de juegos, veintiséis servidores en todo el mundo para jugar al Codename Outbreak. Tal vez se vaya ampliando progresivamente su número pero no parece que este juego esté teniendo demasiada aceptación en la red.

Estrategias y trucos

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Para avanzar campo a través es recomendable no dejar de mirar continuamente el horizonte con el zoom de nuestra arma, con la finalidad de detectar algún ruido o conversación que delate la presencia de un enemigo antes de que nos detecte él. Esto puede resultar pesado pues obliga a parar cada diez pasos para hacer esta comprobación y así evitar que nos acribillen inesperadamente.

Es también muy recomendable mantenerse alejado y abusar del rifle francotirador para ir eliminando contrarios.

Comparado con…

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Half Life: De guión similar a Codename Outbreak. Sin embargo, no hay color y eso que hablamos de un motor 3D, el de Half Life, ya antiguo. Half Life tiene una profundidad en su historia que no llega a alcanzar Codename Outbreak, el cual tras introducir la misión deja la historia a un lado y nos invita a matar. En Half Life, a medida que avanzamos, nos vamos encontrando numerosas pequeñas historias y situaciones que contribuyen a crear una atmósfera muy realista. Esa interacción con otros personajes del juego no aparece en Codename Outbreak o tiene una presencia mínima.

Operation Flashpoint: Si queremos un buen juego bélico este es sin duda Operation Flashpoint. La complejidad de las misiones y las posibilidades de coordinación de nuestro equipo de soldados le convierten en el mejor juego de acción táctica del momento.

Lo que está bien

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Lo que no está tan bien

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Enlaces

Manual

Claro y bien explicado. Los textos son acompañados de gráficos explicativos. Totalmente en español.

Requerimientos del sistema

Mínimos:

Windows 95/98/ME, Pentium III a 500 Mhz, 128MB de RAM, tarjeta aceleradora 3D Riva TNT2 con 32 MB o similar compatible con Direct X(TM) 8.0, unidad de CD-ROM 8x (o superior), tarjeta de sonido compatible con Direct X(TM) 8.0, ratón y teclado.

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