corre corre que te pillo....

Después de más de 10 millones de copias vendidas de Rayman en todas la plataformas, y habiéndose convertido en algunos países europeos en una mascota con la misma popularidad que Mario, Ubi Soft no podía dejar de aprovechar las buenas ventas que siempre consigue su personaje. Es por ello que en esta ocasión Ubi Soft ha decidido convertirlo en un juego multijugador en el que pueden competir hasta 4 jugadores en PS2 (por medio del correspondiente multitap y pantalla partida). Por cierto, de ahí la M del título del juego.

Afortunadamente no nos encontramos ante otro clon de Mario Kart como suele ser habitual en este tipo de juegos, sino que Ubi Soft ha sabido dotar al juego de personalidad propia y de ciertos toques de originalidad. En esta ocasión tendremos 2 tipos de pruebas distintas, Carrera y Batalla. La primera es, evidentemente, una serie de carreras en las que competiremos con nuestros rivales (Cpu o humanos) y la segunda son una especie de DeathMatchs que transcurren en arenas cerradas y que consisten en hacer un máximo de puntos, bien recogiendo objetos bien eliminando a nuestros rivales.

El ambiente del universo Rayman se mantiene en todo momento y no nos libraremos de las habituales plataformas a las que siempre tiene que hacer frente este simpático personaje y que, en esta ocasión, seguirán interponiéndose en nuestro camino aunque con otra filosofía de juego.

Gráficos

Si jugamos en modo 1 jugador disfrutaremos de la pantalla completa. Si jugamos con un amigo la pantalla de dividirá en 2 partes y si jugamos 4 jugadores se dividirá, como es lógico, en 4 partes.

Los escenarios son espléndidos y se aprecian mejor en el modo 1 jugador. Tenemos distintos ambientes por los que competir como la playa, las ruinas de un templo fantasmagórico, la selva e incluso un barco pirata. Todo ello muy bien modelado. Se mantiene la estética exhibida en Rayman Revolution con unos buenos efectos de luz y unos escenarios muy coloreados y bonitos. Asimismo los efectos del agua están muy logrados.

La calidad visual es alta y a pantalla completa la fluidez del juego es muy buena. A medida que vayamos añadiendo jugadores y, por tanto, la pantalla se vaya dividiendo para darles cabida, la fluidez irá descendiendo, así como la calidad de los escenarios. Sin embargo, a pesar de la pérdida general de calidad con 4 jugadores (aunque el juego sigue exhibiendo una buena velocidad y muy bonitos escenarios) lo que si gana es la jugabilidad cuando se juega con varios amigos.

Música

Las melodías que podremos oír durante el juego son muy pegadizas y divertidas, lo cual resulta apropiado para el tipo de juego que es. Cada personaje tiene una melodía asociada, de modo que en función del que elijamos nos acompañará una melodía u otra durante el juego. Habrá veces que para un determinado escenario querremos cambiar de personaje solo por saber qué música tiene asociada. Debido a que empezamos con 5 personajes y vamos desbloqueando los demás, iremos descubriendo nuevas melodías a medida que avancemos.

Sonido FX

Los diferentes sonidos presentes en el juego están muy cuidados, así cada objeto con el que podemos interactuar tiene su sonido correspondiente. Cada personaje, además dispone de una serie de expresiones y gritos de los que hacen gala cuando ganan, pierden, les golpean… etc.

Es una delicia escuchar el ruido del agua cuando nos deslizamos por ella, el sonido de las cataratas presentes en algunos de los mapas o incluso el sonido ambiente que tiene cada uno de los niveles por los que vamos pasando. Así cuando estemos compitiendo en una carrera por la selva, oiremos ruido de animales exóticos típicos de estos sitios. Ubi Soft ha cuidado este aspecto al máximo.

Jugabilidad

El principio de Rayman M es competir contra otros jugadores en una serie de pruebas. Sin embargo Ubi Soft no ha olvidado el modo para 1 jugador y ha sabido integrarlo magistralmente en un juego como este que es eminentemente multijugador. Así cuando empecemos a jugar tendremos una serie de niveles y personajes disponibles, pero el resto se encontrará bloqueado. Solo podremos desbloquearlos jugando en el modo 1 jugador, y una vez desbloqueados ya podrán ser disfrutados por 2 o 4 jugadores. Hay que reconocer que la idea es buena y además alarga la vida del juego añadiendo así un aliciente para cuando juguemos solos.

En Rayman M tenemos 2 modos de juegos: carrera y batalla. En ambos modos los personajes disponen todos de las mismas habilidades, que en realidad son las de Rayman. Todos pueden saltar, planear, disparar o subir por paredes.

En el modo carrera el objetivo es llegar el primero a meta con una serie de vueltas a cumplir por un circuito. En total tenemos 17 circuitos disponibles, aunque de entrada tendremos solo 3, el resto habrá que ir desbloqueándolo ganando carreras. Todos los circuitos tienen la particularidad de tener múltiples caminos por los que correr y secretos varios que descubrir. En este punto es necesario indicar que antes de embarcarnos en cualquier carrera es recomendable entrenarse en el circuito (en modo entrenamiento) para aprenderse bien todos los trucos y caminos alternativos de cara a poder estar a la altura de nuestros rivales.

En este modo carrera tendremos disponibles 3 submodos, la carrera clásica (Race), uno de contra-reloj (Popolopoï) y otro de carrera con captura de Lums. En el primero el objetivo será ganar la carrera intentando entorpecer a nuestros rivales. En el modo Popolopoï deberemos correr contra-reloj pudiendo ganar tiempo capturando mariposas mientras corremos y en el tercer modo deberemos, además de ganar la carrera, recoger un mínimo de lums para ganar.

Por cierto, cuando juguemos en modo 1 jugador, el nivel de los rivales controlados por cpu será autoadaptativo… ¿Qué quiere decir esto? Pues que si somos unos negados absolutos en el juego, los rivales reducirán automáticamente su habilidad para darnos alguna oportunidad de competir contra ellos (aunque tendremos que currárnoslo mínimamente) y si somos unos ases veremos como el resto de personajes no nos da tiempo ni a respirar.

A pesar de este detalle no hay que pensar que es un juego facilito, ya que tiene su complicación sea cual sea el nivel de los rivales, de ahí la importancia de aprenderse bien cada circuito. De todos si perdemos nos darán pistas al finalizar la carrera para ayudarnos.

Cuando le cojamos el truco a cada circuito sabremos qué caminos seleccionar para ir más rápido y qué obstáculos podemos colocar a los rivales en cada momento para entorpecer su carrera. La interacción con los escenarios es alta, pues podremos disparar sobre determinados botones que activan o desactivan obstáculos, mueven partes del circuito, bajan o suben plataformas e incluso abren o cierran puertas.

No hay nada más desesperante que estar a punto de subir por una escalera y que de pronto una reja te cierre el camino porque un rival ha activado un determinado botón…¡malditos rivales! Esto os puede dar una idea de lo antológicos que pueden llegar a ser los piques cuando juegan 2 o 4 jugadores. Es cuando el juego resulta muy, pero que muy divertido. No en vano la idea del juego es que sea multijugador ¿no?

En el modo batalla dispondremos de 13 arenas en las que pelear contra nuestros rivales. En este modo nos encontramos 3 submodos de juegos. El primero es Lum Spring, en el que tendremos que recoger un máximo de 5 lums antes de que lo hagan nuestros rivales, pudiendo congelarlos momentáneamente disparando sobre ellos. El segundo en Lum Fight en el que haciendo de uso de diversas armas que irán apareciendo en la arena deberemos eliminar a nuestros rivales. Como suele ser habitual el primero que llega a un máximo de frags o enemigos eliminados gana.

El tercero es Capture the Fly… si, no es flag sino fly… En este curioso modo tendremos que aguantar el máximo tiempo posible en nuestro poder a un Lum. Cuanto más lo tengamos con nosotros más puntos acumularemos hasta llegar a un máximo. Nuestros rivales intentarán robárnoslo disparando sobre nosotros.

Este modo, el de batalla, tiene su lado divertido pero se ve empañado por una gestión de las cámaras un poco errática. Si nos acercamos demasiado al límite de la arena no podremos ver qué ocurre en el centro de la misma porque la cámara no nos dejará girar. La mayoría del tiempo nos lo pasaremos intentando darnos la vuelta para colocarnos en el ángulo correcto hacia nuestros rivales o para buscar lums, y por momentos resulta complicado.

Afortunadamente disponemos de un radar que nos indica la posición de los enemigos y de los lums, pero aún así este modo de juego resulta algo confuso, problema que se agudiza en el modo Lum Fight en el cual nos vienen tiros de todas partes y no nos da tiempo a saber de dónde.

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