Friendware desmiente el cierre de Rebel Act y Area 66

Los atentados del 11 de septiembre han afectado al grupo de empresas formadas por Friendware, distribuidora de videojuegos en España, Rebel Act, padres de Blade, y Krypton Networks, propietaria del servidor de juegos Area66.com. Igual que otros proyectos de riesgo, Rebel Act y Krypton Networks, necesitan de capital por parte de un inversor externo. Con el ataque terrorista al World Trade Center de Nueva York los ríos monetarios han quedado congelados, dejando en una complicada situación a ambas compañías, que deben encontrar financiación antes de febrero de 2002 bajo riesgo de tener que cesar su actividad.

Esta es la situación tal y como nos la cuenta Juan Diaz-Bustamante de Friendware. "Es cierto que buscamos un inversor internacional que apoye el crecimiento y la continuidad de ambas empresas, pero ni Area 66 ni Rebel Act han cesado su actividad ni está premeditado que así sea", afirma Juan. Friendware por su parte sigue con su habitual cuenta de resultados arrojando números negros, hecho que afianza su continuidad en el mercado distribuyendo y localizando videojuegos en el mercado Español.

Estas declaraciones desmienten de forma oficial los rumores que excolaboradores externos de Area66.com y exempleados de Rebel Act han esparcido por distintos foros, entre ellos el de Meristation, asegurando que ambas empresas están bajo mínimos y prácticamente a punto de cerrar. Un hecho cierto es que las noticias de Area66.com no se actualizan desde finales de octubre. En el momento de redactar esta noticia no fue posible contactar con responsables de Area66.com. Al parecer, Codemasters, que entró en la compañía poco antes de ser lanzado Blade, sigue trabajando para lanzar Ultimate Blade para Xbox y en el posible Blade 2.

Recordemos que hace unos meses dejaron Rebel Act por motivos personales Xavier Carrillo y Ángel Cuñado. Posteriormente, los padres de Blade, fundaron Digital Legends para producir sus propios videojuegos desde Barcelona. Juan Diaz-Bustamante desvincula esta decisión con la actual situación de Rebel Act que tiene únicamente que ver con la desaceleración económica agravada por los hechos del 11 de septiembre de 2001.