Un trabajito fino, fino.

En el año 1969 se estreno la película The Italian Job. En ella Sir Michael Caine interpretaba as Charlie Croker, un criminal recién salido de la cárcel que planeaba su próximo gran golpe. Robar, nada más y nada menos, que 4 millones de dólares en lingotes de oro a la mafia y a la policía italiana. Pues bien, Michael Caine se ha quedado un poco viejo y ahora eres TÚ el que tiene que hacer el papel de Charlie Croker, y para ello solo necesitas una PSOne y una copia de este Italian's Job.

Es el momento de pasarte al bando de los malos, tal como ya hicimos en el Grand Theft Auto, y cumplir las misiones que se nos asignen por la Mafia italiana. Y para realizar correctamente los susodichos objetivos, tendrás a tu disposición una serie de vehículos (serán un total de 11) con características diferentes. Podrás conducir desde un Austin Mini Cooper o un autobús, pasando por varios modelos de todo terreno hasta un furgón blindado, que no habrá manera de pararlo. Y hablando de los vehículos, no podemos dejar de mencionar las variables que afectarán a su comportamiento, pues no será el mismo según la superfície por la que se desplacen, el uso que hagamos de los frenos o el tipo de tracción que tenga el bólido.

El juego se desarrollo como otros tantos títulos de conducción arcade. Bajo una perspectiva trasera, deberemos seguir las indicaciones de una flecha que nos guía de la forma más directa hacía nuestro siguiente objetivo, el que, una vez cumplido, nos añadirá un tiempo de bonificación en el marcador que nos permitirá proseguir con nuestras correrías.

Como en aquel largometraje, hay seis personajes principales que inciden directamente en la trama del juego. Ante todo destaca el ya mencionado Charlie Crocker, el líder de la banda. También aparecen Mr Bridge, un hombre que roba por causa justa y que ama a la reina de Inglaterra por encima de todas las cosas; el profesor Simon Pearch, un informático con especial debilidad por las mujeres; 'Camp' Freddie, que mantiene relaciones con Bridge; Lorna, la escultural novia de Crocker; y por último, Roger Beckerman, el cerebro de toda la operación.

Tanto el modelado de los 13 vehículos (todos tienen un sistema de colisión 'pixel perfect' y hasta pueden abollarse) como el de las ciudades es bastante correcto tirando a muy bueno, y no muestra un exceso de pixelación, pero a pesar de esto el juego es muy fluido y no sufre arrastres como a veces ocurría en Driver. El motor gráfico carece de niebla, lo que hace imposible la ocultación de aquellos gráficos que se generan al fondo (popping), pero aún así no es un efecto que se haga notar demasiado. El entorno esta bien detallado y como dijimos antes se pueden reconocer ciertos monumentos, aunque no sean fieles reproducciones de las auténticas ciudades, es el caso del célebre Picadilly Circus o el Big Ben.

Mención especial merecen de los escenarios, que nos han sorprendido por la inmensidad de superfície. De hecho son tan grandes que no caben en la memoria RAM de la Playstation, con lo que los chicos han implementado un nuevo sistema de carga en el juego denominado C.O.S.S (Continuous Ordered Scenery Streaming), que permite leer información desde el CD de una manera mucho más rápida y fluida mientras se desarrolla la acción.

  m  ú  s  i  c  a

Este es un apartado que destaca por lo bien que encaja con los escenarios y con las misiones que estemos realizando en cada momento. Composiciones que nos meterán más en el juego, recreando una atmósfera perfecta para nuestros crímenes.

Sin embargo, y a pesar de la calidad que hay en este apartado, mucho nos tememos que no será tanto como para que podamos ver la banda sonora a la venta en nuestra tienda de discos favorita.

Sonidos de todo tipo para que nos sintamos dentro de la propia película. Desde los disparos, hasta el chirrido de los neumáticos derrapando. Sirenas, choques, cláxones... y demás sonidos típicos de las pelis de los mafiosos funcionarán a pleno rendimiento para darle más realismo al juego.

No obstante, nos parecen los mismo que hay en cualquier otro juego similar o del tipo de Driver. ¿Es que ya no da para más la PSOne?. Esto ya lo hemos oído demasiadas veces.

El control de los coches es muy (pero que muy) bueno. Una jugabilidad soberbia que nos ayudará mucho a completar el juego. Tenemos el modo historia, con 16 misiones a realizar que son muy fieles a la película pero que se pueden hacer algo cortas. Estas misiones mantienen siempre una misma tónica: liberar a un cómplice de la cárcel o llevar a nuestros compañeros para que puedan cumplir sus objetivos, y sin duda partes mucho más excitantes, como robar un banco creando el pánico entre sus clientes.

Pero sin duda, lo que más destaca son los 5 modos de juego secundarios, que sobresalen por lo divertido que llega a se el modo de saltos con los Minis, el de destrucción en el que no debes dejar nada en pie (muy similar a Blast Corps para Nintendo 64) y el típico modo de conducción libre. También hay la interesante opción Party, que permite hasta 8 jugadores disfrutar por turnos, en cualquiera de los modos de juego secundarios.

El disco esta repleto de detalles que no nos permitirán pisar el acelerador al máximo por mucho que queramos. Es recomendable cumplir las normas de tráfico y usar el claxon cuando debamos para que la policía no sospeche de nosotros, ya que pueden tomarte la matrícula y la misión se daría por fallida. De este modo, se le inyecta al programa de SCI un alto componente de sigilo, pues gran parte de los decorados deberemos inmiscuirnos entre el tráfico sin ser descubiertos, hasta que en un momento dado vayamos directos a cumplir con cada una de las misiones asignadas.

Ya sabes, si en su momento disfrutaste como un enano de las dos partes de Driver, y si te sentiste muy a gusto cumpliendo las misiones del Grand Theft Auto, no puedes perderte este gran título que anda muy sobrado de modos de juego. Pero si no tienes ningún título de la grandiosa saga de Reflectios prueba primero con Driver 2. Aún así si te gusta el género, The Italian Job es una compra más que obligada. En serio que merece la pena, no os defraudará. Y de hecho, es posible que sea de los últimos productos que saquen el máximo rendimiento de la incombustible gris de SONY.