Moto Racer 3 (PC)

Saboreo una buena taza de café. Desde el otro lado de la ventana, me llega el frescor húmedo del agua que cae. La primera tormenta del cercano otoño o quizás del final del verano. Entre el sonido de los truenos, mis ojos se posan en cada una de las imágenes que me han llegado del nuevo juego que los galos de Delphine Software están preparando. Parece de película, pero en el mismo instante en que amplío una de las imágenes, un relámpago cegador intenta captar mi atención para que no mire al monitor. Misión fallida. Aparece nítida una imagen del Estadio de Francia, y un primer plano de un piloto en el aire me dejan con el sorbo intenso a medio camino, asombrado. Todos sabemos que en cualquier serie de juegos, hay una característica predominante: la mejora de nivel con respecto al anterior. Pero es que caramba, esta es mucho mayor de lo habitual.

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Resulta curioso el desarrollo de algunas compañías. El caso de Delphine Software es de esos que llaman la atención. Desde su aparición en 1988, formando parte de un grupo financiero mayor en el que coexisten empresas de diversa índole: creación y grabación de música, agencias de casting y modelos... ha sido una de esas compañías que apenas suelen producir noticias rimbombantes, cuya página web incluso es más bien discreta y poco densa, y que sin embargo, sin hacer ruido producen algunos de esos títulos que no faltan en la estantería de todo buen aficionado a los videojuegos, o que al menos ha probado en alguna ocasión.

La lista de títulos empieza con juegos como Darkstone, Fade to Black, Flashback, Operation Stealth, Moto Racer 1 y 2. Aparte, no sé si lo recordarás, fundaron una empresa dependiente, Adeline Software, cuya producción fue breve pero intensa, con tres juegos que en su momento dieron mucho que hablar y que jugar: Little Big Adventure 1 y 2, y Time Commando. ¿Recuerdas cómo nos impresionaban entonces? Y como digo, todo esto sin hacer ningún alarde, simplemente haciendo su trabajo, y eso sí, consiguiendo una reputación más que buena. Amigo, esta gente es del estilo hormiga. No los ves, pero están siempre ahí, y no paran de trabajar.

El hecho es que Delphine nos prepara para la llegada de la  nueva versión de su Moto Racer, y creo, a tenor de lo visto, que la pueden montar gorda. Todas las impresiones generales sobre el juego, del cual ya se ha podido contemplar algo en el reciente ECTS, hablan de un salto de nivel impresionante. Todos sabemos lo que fue MR2: un arcade rapidísimo, con un más que buen nivel de gráficos para la época, enormes posibilidades de diversión aumentadas por la conexión en red (esos cursillos de Internet ganaban mucho con las partidas de MR2 ;o), y a pesar de la falta de realismo, una sensación muy agradable de poderío.

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Pues quieren más, y ahora sí se han lanzado tras la caza de Superbikes, la otra saga sobre dos ruedas, intentando sobrepasarla en plena recta, a saco (hablando siempre de gráficos, claro está). La comparación por ahora no es posible, pero evidentemente MR3 es más completo en sí, porque podrás disputar carreras hasta en seis modalidades diferentes: Velocidad, Supercross, Motocross, Estilo Libre, Trial Indoor (¡novedad!) y Conducción Urbana. Has leído bien, ahora también disponemos del Trial para divertirnos. El que esto escribe, se frota las manos...

Todos los datos técnicos que nos ofrecen después, no hacen sino aumentar las ganas de abrir la caja, porque no tienen desperdicio. Comenzando por una recreación foto-realista de los circuitos de cada categoría (Sachsernring, Suzuka, Montmeló, Reygades, etc), o incluso de las orillas del Sena (parte del recorrido urbano de París, en el modo Conducción Urbana). O podemos seguir con que la reproducción de pilotos y sobre todo de motos es soberbia, reproduciendo el comportamiento físico de ambos gracias al apoyo de los mejores pilotos y marcas, algo ya prácticamente habitual en cualquier juego que se precie de detallista.

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Gracias a ello, ahora sí el comportamiento de las 24 motos disponibles será mucho más realista, tanto el control como la animación de las máquinas se verá mejorado (suspensión trasera y delantera independientes, interacción completa entre piloto y moto, derrapajes, control total de la moto durante los saltos, cinemática inversa para los movimientos de animación...), pero sobre todo, su apariencia está tan lograda, que MR 2 parece más lejano de lo normal:  puedes cambiar su aspecto según tus gustos y colores, detalles, etc; crear nombres y equipos, intercambiarlos con otros jugadores, crear ligas, comparar puntuaciones... El abanico de posibilidades resulta amplio, y se nota la experiencia en este tipo de juegos. Pero es que la lista es larga:

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¿Eh?... ¿qué?... espera... Ya, disculpa, que estaba probando el casco nuevo que me he comprado para... Bueno, dejémoslo... Bromas aparte ;o) yo soy de los que se ilusionan con estas cosas. El tiempo luego me da la razón o simplemente me pide una nueva dosis de fe. MR 3 transmite buenas vibraciones a primera vista. Parece que va a llegar sin hacer mucho ruido. Por si acaso, aguza la vista, porque puede merecer la pena.

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Requerimientos. Pues los habituales últimamente, sobre todo si el nivel gráfico es alto: un PIII 500, 64 de RAM, y tarjeta aceleradora compatible DirectX 8. De todos modos, después de ver el "caso Max Payne", no arrojes la toalla antes de tiempo.

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