Mech Commander 2
- PlataformaPC8
- GéneroEstrategia
- DesarrolladorMicrosoft
- Lanzamiento31/08/2001
- TextoInglés
- VocesInglés
Mech Commander 2
Mechcommander combinaba el rico Universo de Battletech con un gran juego de táctica en tiempo real. Esta segunda entrega nos ofrece gráficos en 3D y un editor de misiones. ¿Ha mejorado el producto con estas modificaciones?
Mechcommander combinaba el rico Universo de Battletech con un gran juego de táctica en tiempo real, con gráficos en perspectiva isométrica y un alto nivel de dificultad. Esta segunda entrega nos ofrece gráficos en 3D, mucho más espectaculares, un nivel de dificultad que podemos escoger (incluso diferente para cada misión), mayor sencillez para equipar a nuestros Mechs e incluso un editor de misiones. ¿Ha mejorado el producto con estas modificaciones? Indudablemente, la respuesta es sí. Nos encontramos con un producto que no se limita a cambiar los gráficos de la primera parte, sino que se han tenido en cuenta las opiniones de los jugadores para dar lugar a un producto muy mejorado, que hará pasar al jugador horas de diversión. Pero estudiemos el juego con más detalle...
Al igual que la primera entrega, en Mechcommander 2 podemos elegir entre jugar una campaña, una misión suelta (que serán misiones de la campaña ya realizadas) o jugar en modo multijugador. En el caso de la campaña, ésta se desarrolla de manera lineal, a lo largo de una serie de misiones que tienen como objetivo conquistar el planeta en el que nos encontramos. Nuestro papel es el de comandante de una unidad mercenaria y deberemos dirigir a nuestros Battlemechs (unos humanoides blindados y armados hasta los dientes pilotados por Mechwarriors) además de administrar los fondos de la unidad. Este dinero, en Billetes-C, servirá para adquirir nuevos Mechs y armamento, además de crear variantes de estas máquinas para que cumplan su cometido más satisfactoriamente. El modificar un Mech se hace ahora de manera más sencilla, sin tener que preocuparnos de dónde ponemos cada arma: basta intercambiar la que está puesta por la que queramos, siempre que tengamos en cuenta el espacio que ocupa el arma y lo que se calienta el Mech, porque puede que necesitemos poner más radiadores en nuestra variante.
Por supuesto, también deberemos asignar un Mechwarrior a cada Battlemech y éstos tienen su experiencia y sus habilidades de pilotaje y disparo, como en la primera parte. Pero se ha añadido un elemento más: las habilidades secundarias. Cada vez que un Mechwarrior sube de categoría (hay verde, regular, veterano y elite), puede escoger una de estas habilidades: especialista en lásers o sensores, expero en manejo de Mechs ligeros, especialmente resistente,...Cuanto más nivel tenga el Mechwarrior, más destrezas tendrá a su alcance. En este Mechcommander, se acentúa más la importancia de una adecuada compenetración entre piloto y máquina, debido a estas habilidades especiales. Teniendo en cuenta que hay 20 tipos de Mechs, todos adaptables a nuestras necesidades, es seguro que pasaremos tanto tiempo adecuando nuestras máquinas en el hangar como jugando la misión.
En cuanto al campo de batalla, y dejando el aspecto gráfico para más adelante, hay que decir que se ha mejorado bastante en cuanto a ambientación: hay más tipos de unidades, los paisajes son mucho más detallados y ,sobre todo, ahora podemos pedir ayuda gastando puntos de recursos. Estos puntos se nos asignan al principio de la misión, pero pueden incrementarse si capturamos ciertos edificios. Nos permitirán pedir refuerzos en forma de ataques de aviación, piezas de artillería, vehículos que ponen minas, sondas de sensores, camiones de reparación, helicópteros de reconocimiento, y lo más importante: la puesta en marcha de un Mech que haya sido derribado y no destruido. Esto permite que a diferencia de la primera parte, se puedan incorporar nuevos Mechs a la misión, sin más que derribar una máquina enemiga y pedir que lo pongan en marcha y traigan un piloto. Evidentemente, el Battlemech estará bastante dañado, pero eso se arregla avisando a un camión de reparaciones.
El lado malo es que el coste de estas dos operaciones es muy alto y conviene reservar los Puntos de Recursos para cuando encontremos un Battlemech que merezca la pena, porque además cuesta lo mismo llevarnos uno ligero que uno pesado, mucho más armado y blindado. Estos Puntos no se conservan de misión a misión, por lo que conviene gastarlos todos antes de llegar al punto de extracción, donde se dará por finalizada la misión en curso. Esta novedad es realmente atractiva y hace que el jugador intente destruir los Mechs más interesantes del menor número de disparos posibles para luego tenerlo en su inventario.
Por supuesto, y como en la entrega anterior, tras la misión se podrán recoger todos los Mechs enemigos que no hayan sido totalmente destruidos, pero en este caso, el coste de su reparación correrá a cargo de la unidad mercenaria, gastando esos preciosos Billetes-C y no los Puntos de Recursos de nuestro patrón. También se puede comprar y vender Mechs de nuestro almacén, para sanear nuestra economía...
Pero aparte de las novedades que incorpora el juego, lo no ha cambiado desde la primera parte es la acción de todas las misiones y lo interactivo que es todo el escenario: todo se puede destruir. El sencillo manejo de los Mechs (no hay más que aprenderse unos atajos de teclado) y lo emocionante del desarrollo de las misiones, convierten a este juego en mucho más que una leve mejora de su antecesor.
¡Ah! Por si fuera poco, el juego lleva su propio editor de misiones. Es sencillo de manejar, aunque necesita mucha máquina para funcionar con mapas grandes. Con él podemos crear misiones sueltas o incluso toda una campaña, con los vídeos del juego que queramos y todo lo que se os ocurra. Con este añadido y un modo multijugador con muchas posibilidades, el tiempo de vida del juego se alarga considerablemente.
Audio/Vídeo
La banda sonora supera con creces a la de Mechcommander. Con estilo próximo a Hans Zimmer las diferentes pistas de sonido consiguen una ambientación perfecta, máxime si tenemos en cuenta que la música cambia de acuerdo a lo que acontece en pantalla. Incluso es posible escuchar esta música desde el directorio carpeta_del_juegodatasound ya que se encuentra en formato WAV. Por otro lado, los efectos de sonido también son mejores que en la anterior entrega, ya que se han particularizado más para los diferentes tipos de láser o de cañón. En especial, me ha gustado mucho el sonido de las explosiones: con un buen subwoofer vais a conseguir un peinado único. Por último, las voces de los pilotos también contribuyen a la perfecta sensación de inmersión en la batalla.
En cuanto a los gráficos, la verdad es que el motor 3D contribuye claramente a que sean muy superiores a los del juego anterior: tanto el terreno como las unidades están muy bien modelados y acercar el zoom a un Mech muestra perfectamente el cuidado que se ha tenido en el modelado de los objetos. Las texturas del terreno son ideales para un zoom medio-alejado, pero se quedan escasas de resolución cuando la vista se acerca al máximo. Como en Mechcommander, los disparos, pisadas y explosiones dejan su huella en el entorno e incluso los árboles caen o arden, con las armas adecuadas. Las animaciones de los Mechs son muy precisas y éstos andan, corren, saltan, levantan polvo al caminar, pierden miembros y fragmentos con los impactos,...Y las misiones nocturnas, con ese tratamiento de las luces, son magníficas. En definitiva: unos gráficos muy buenos, complementados con una cuidada animación.
Por último, los vídeos que aparecen para darnos los 'briefings' de las misiones, están bastante bien, aunque me hubieran gustado un poco más grandes, como la secuencia de introducción, que gracias a su estilo televisivo te mete rápidamente en el juego.
Guión
Nos encontramos en el año 3063. Las Estados Sucesores vuelven a estar en guerra tras la expulsión de los Clanes y uno de los frentes de esta guerra es el planeta Carver V. Las Casas de Davion y Steiner siguen aliadas y están decididas a expulsar a las otras tres de este mundo, así como destruir a los bandidos que campan por el planeta a sus anchas. Para ello han contratado a tu unidad mercenaria, dirigida por la teniente Diaz.
Estrategia y trucos
Lo primero que hay que hacer es elegir los Battlemechs que vamos a llevar en la siguiente misión. Lo ideal sería crear un equipo con un Mech rápido y con sensores de largo alcance, además de armamento como LRM que le permitan infligir daños sin verse expuesto al fuego enemigo. Luego hay que procurarle una escolta adecuada, con Mechs de velocidad punta muy próxima a la del explorador, pero con armamento de todos los alcances. Mi arma favorita de largo alcance es el PPC ER, pero hay gente que prefiere el rifle Gauss. Los láseres pesados de pulsos también son muy aconsejables, apoyados por LRM y láseres normales. La cuestión es equilibrar el armamento de manera que no dependamos en exceso de la munición y que podamos disparar a todas las distancias. También es recomendable no malgastar la munición con los edificios: la tecla A' permite disparar sólo con las armas de energía.
Lo segundo es elegir bien a los pilotos. Si un Mech tiene LRM mira a ver si tienes algún piloto especialista en ese arma. Una buena combinación de Mech y Mechwarrior es un arma devastadora.
Las posiciones elevadas te permiten una mejor visibilidad. Puedes mandar un explorador para que sirva de observador para tus unidades de artillería o para tus Mechs armados con LRM. Cuando ataques una base, lo primero que deberías hacer es controlar las torretas, para ello basta con coger un Mech que salte y meterlo en la base para conquistar el puesto de control, pero siempre que no haya ningún enemigo cerca. Así que para evitar esto, lo mejor es subirse a una loma cercana a la base, cargarse a los enemigos desde ahí con armas de largo alcance y luego conquistar la base con el método comentado.
Cuida bien a tus pilotos, son insustituibles. Puedes obligarles a eyectarse si ves que la cosa está muy mal: un Mech se compra, un piloto no.
Utiliza tus Puntos de Recursos: se pierden al acabar la misión. El mejor uso es hacerte con Mechs enemigos, pero camiones de reparaciones y helicópteros de exploración son buenos usos. Las piezas de artillería no me acaban de convencer, salvo en las misiones en las que haya que defender una base.
Lee el manual. Vienen muchos consejos útiles y la plantilla con las teclas más usadas al final.
Jugabilidad
La verdad es que depende fuertemente del nivel de dificultad elegido. Yo me acabé el Mechcommander (con grandes esfuerzos y muchas horas) y el nivel de dificultad más bajo (Green) me resulta demasiado sencillo. El Regular ya requiere un poco más de concentración, mientras que el Veteran es un verdadero desafío. El Elite ya es la repera, no porque haya más enemigos (siempre hay los mismos), sino porque los Mechwarriors enemigos son tremendamente buenos. Me enfrenté a un UrbanMech con 4 Mechs de 40-50 toneladas y me tumbó dos: uno de un disparo en la cabeza y otro por pérdida de una pierna. Así que me quedo con el nivel Regular, que parece más adecuado a mis posibilidades.
Una vez encontrado el nivel de dificultad adecuado para ti (no es problema porque se elige desde el menú principal y afecta a la misión en curso, no a toda la campaña), Mechcommander 2 es un vicio. Entre conseguir Mechs más grandes, pilotos más expertos y avanzar misión a misión para saber cómo acaba el argumento, te tiras las horas muertas jugando como un poseso. Es más divertido que el anterior y gracias a la dificultad variable, todo el mundo podrá jugar satisfactoriamente a este juego. Muchas horas de diversión, desde luego.
Además, tenemos el modo multijugador y el editor de misiones. El primero nos permite elegir entre Eliminación (el Deathmatch de toda la vida, donde cada Mech destruido otorga al equipo su precio en Billetes-C), el Rey de la Colina (gana el equipo que más tiempo controle la colina), capturar la base (gana el equipo que más bases capture), territorios (capturar el mayor número de bases posible en el tiempo dado), último hombre en pie (gana el equipo con más supervivientes), último hombre en la colina (gana el que controle la base al final del tiempo de misión) y misión compleja, donde podremos fijar los parámetros que queramos para que un equipo atacante y otro defensor se enfrenten hasta el final. Como veis, un amplio abanico de opciones, aunque se sigue echando de menos un modo multijugador cooperativo, que hubiese sido la guinda del pastel.
En cuanto al editor, es altamente probable que los fans de este juego inunden la red con misiones y campañas propias, y ya sabemos lo que pasa cuando un juego lleva un editor: su vida útil se alarga exponencialmente.
Comparándolo con
Si lo comparamos con Mechcommander, la verdad es que le ha superado. El nuevo motor gráfico junto con las nuevas opciones hacen que esta segunda parte sea superior a la primera. Otros juegos de táctica como Ground Control, no creo que se puedan comparar con este, ya que la manera de jugar es radicalmente diferente. Mechcommander 2 es imprescindible en el disco duro de cualquier aficionado al género.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.