Bomberman Tournament (Nintendo GameBoy)
El zagalo pirómano vuelve a la escena consolera gracias a Game Boy Advance.
Los amantes de la figura más emblemática de Hudson Soft, Bomberman, está de enhorabuena. El zagalo pirómano vuelve a la escena consolera gracias a Game Boy Advance y su que ni pintada capacidad para recrear entornos en 2D, y, especialmente, a Activision, que se ha aventurado a exportarlo fuera de las fronteras niponas, y que con un poco de suerte, veremos en nuestro país antes de que termine el verano.
La trayectoria que ha efectuado esta criatura comenzó a mediados de los 80 con sendas versiones tanto en NES como en Turbografx de sus peripecias soltando bombas y dejando tras de sí enormes huellas de pólvora. Desde entonces, ninguna consola se ha resistido a los encantos de un rollizo muchacho que ha firmado contrato con Neo Geo, Game Boy, Mega Drive, PS One, Saturn, Dreamcast, PC, Super NES y más recientemente en N64, perpetrando, posiblemente, las peores de todas sus batallas.
Claro que si Game Boy Advance es la consola de las viejas glorias y de los mejores recuerdos, Dynablaster, nombre que recibe en su país natal, se ha dejado de extrañas incursiones al mundo de las plataformas y retorna a su planteamiento más clásico, solo que con una pincelada a mano alzada de RPG. El resultado te lo narramos a continuación...
El grotesco argumento cuenta como el planeta Phantarion, pérdido en el lugar más recóndito del universo, envía una señal de socorro a través del hiper espacio con la esperanza de que alguien lo reciba. Por fortuna, la Bomb Base, oficina donde están citados todos los de la especie de Bomberman, recibe la señal y deciden enviar a su hombre más valeroso hasta esa conflictiva zona. Ya sabes, tu encarnas a Super Bomberman, una versión muy-ultra-mejorada del Bomberman de antaño, solo que sin su experiencia, por lo que con un poco de suerte y paciencia llegará en tu ayuda el amigo súper deformer de toda la vida. ¿Qué dónde reside el sabor de siempre? pues muy fácil. Te darás cuenta cuando, una vez comenzada la partida, debas buscar por todo el cuerpo celeste atravesando escarpadas montañas, áridos desiertos y frondosos bosques las instalaciones en las que supuestamente se encuentra Max, el amo y señor de los lugareños, y eliminar a todos los engendros del mal a base de explosión limpia. Una vez dentro de esta contienda se desplegará un punto de vista aéreo con la posición de todos tus rivales y las sempiternas barreras "naturales" formadas a base de piedras, muros construídos adrede o árboles, por poner unos cuantos ejemplos. Si has jugado anteriormente a cualquiera de los "Dynablaster" estarás completamente familiarizado con esta mecánica. De no ser así, te contamos como se suceden tan trepidantes combates, a la par que adictivos, y que han encandilado a millones de usuarios desde su creación: básicamente no debes seguir ninguna pauta, tan solo buscar la posición adecuada y colocar ahí tu "regalito", sabiendo siempre, que el estallido puede abarcar un mayor campo de alcance dependiendo de la potencia de la bomba. En este sentido deberás jugar con las distancias, puesto que los oponentes correrán sin dilaciones cuando te acerques a su posición o te golpearán si no hay otra salida. Sin embargo, lo que empieza como algo puramente estratega acaba convirtiéndose en un martilleo constante de los botones y que GBA ha sabido reproducir de una forma verdaderamente encomiable.
Sabidos todos estos consejos, te contamos que Bomberman Tournament, título que recibirá en Estados Unidos y presumiblemente en Europa, seguirá la línea que la serie Hero que la 64 Bits ha marcado, solo que prescindiendo, por supuesto, de las 3D, que, sin embargo, siempre es de agradacer. Porque ya se ha demostrado que una nueva dimensión no es siempre la mejor válvula de escape para las faltas de idea. Aparcando cual sea o no el mejor punto de vista, la aventura nos llevará a explorar un montón de localizaciones y a pulsar el botón del diálogo casi de forma continuada en busca de las pistas que nos lleven a los diferentes tipos de guaridas que hay esparcidas por todo el mundo. Todo ello, sin ocultar las referencias a la saga de Miyamoto The Legend of Zelda, y con algún toque de su Momotarou Festival (también de Hudson), otro RPG que oscila entre la cursilería propia de los juegos típicos del país del sol naciente y un guión como para troncharse de risa. Sin duda alguna, una buena forma de relajar los músculos antes de una próxima batalla dejándote la piel en la consola.
Pero un miembro de esta família sería expulsado de inmediato si no contara con un multiplayer digno... muy digno. Habrá tan solo dos opciones, la principal (Story), y otra totalmente adicional (Battle), que reflejará hasta a cuatro pantallas disintas un fenomenal combate a los que se lucharán dentro de todos los escenarios que se hayan abierto por parte de uno de los jugadores, y con el aliciente de que tan solo los más avezados contarán con los personajes que se van descubriendo según progresamos en el hilo argumental.
A nosotros solo nos queda rezar un poco y ver como se desenvuelve Bomberman en EEUU, para saber a ciencia cierta si Activision, que si nos traerá Tony Hawk 2 el 22 de Junio, vuelve a tener fe en la mascota de Hudson.
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