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Offroad

Offroad

  • PlataformaPC6.7
  • GéneroConducción
  • DesarrolladorRage
  • Lanzamiento19/04/2001
  • TextoEspañol
  • VocesInglés

La sencillez por bandera

El desarrollador británico Rage Software trae a nuestros ordenadores un pedazo del mundo de las competiciones offroad en forma de juego, y lo hace como él suele, con una explosión gráfica llena de luz y color, tratando de impresionar al primer contacto y estimularte a través de los sentidos.

A pesar de que en España las competiciones Offroad no tienen la misma popularidad que otras modalidades de competición a motor, en otros países como Estados Unidos, Inglaterra, Austria, Hungría, Australia e incluso la gélida Islandia, gozan de gran aceptación y se organizan a menudo competiciones de todo tipo de vehículos todo terreno, sobre dos o cuatro ruedas. Algunos de los equipos más famosos de este mundillo, incluso son invitados a los colegios, como sucede en el país de las barras y las estrellas. En ocasiones se insertan en competiciones oficiales y diversos tipos de campeonatos, pero otras veces tienen como último fin la mera exhibición.

El desarrollador británico Rage Software trae a nuestros ordenadores un pedazo de ese mundo en forma de juego, y lo hace como él suele, con una explosión gráfica llena de luz y color, tratando de impresionar al primer contacto y estimularte a través de los sentidos.

Carreras entre barro, rocas y arena a bordo de vehículos todo terreno es lo que nos vamos a encontrar en Offroad. Para ello hay a nuestra disposición 16 coches y 6 escenarios que recogen un total de 24 circuitos, 4 por cada uno de ellos. Esto no significa que cada circuito dentro de un mismo escenario sea completamente diferente de otro, sino que, dentro de un mismo emplazamiento se han hecho trazados diferentes. Es algo así como si colocas un enorme y retorcido Scalextric en una sola habitación y decides tapar ciertos tramos para una carrera, otros para otra, o mezclar unos con otros, es decir, estarás corriendo en el mismo sitio, pero no por el mismo sitio.

En todos los trazados existen algunas rutas alternativas que, en ocasiones, servirán para atajar unos pocos metros, pero que en otras no te reportarán ninguna ventaja, más bien al contrario. Pueden encontrarse a la vista o bien algo camufladas con el resto de elementos decorativos del circuito. Así pues, es perfectamente posible que pases al lado de una a toda pastilla y ni siquiera te percates de su existencia, o bien creas que es un paso cerrado, porque suelen estar disimuladas con vallas de seguridad o pobladas de vegetación. Estos casos de subterfugio a veces son delatados por los otros pilotos, que los cruzan para tu sorpresa, cuando tú pensabas que por ahí no se podía ir o ni siquiera lo habías pensado.

Descripción general:
Los seis escenarios que arrasar a nuestro paso son un bosque en Canadá llamado Evergreen Forest, otra zona boscosa en la República Checa con el nombre de Czarny Jezioro, una zona industrial en obras en Inglaterra, bautizada como Vilner's Forge, Red Rock Canyon en el estado norteamericano de Nevada, Dagoda Coast en Hawai y los rocosos caminos de un enclave de montaña suizo conocido como Mount Dubon.

Los vehículos a pilotar pueden ser los lentos pero estables todo terreno convencionales, camionetas 4x4 o los rápidos y peculiares buggies. Ni todos los circuitos de cada escenario ni todos los coches están disponibles al principio. Unos y otros se irán haciendo accesibles a medida que alcances divisiones superiores. Ahora vemos esto.

Hay tres tipos de competiciones en las que participar, a saber: Campeonato, Desafío y Contrarreloj. Resulta obvio decir que el campeonato es la más completa. Está dividido en cuatro divisiones, de forma que para alcanzar la superior tienes que ganar la actual, no hay premio para el segundo. Por supuesto, empiezas corriendo en la cuarta división. Al principio de la temporada tendrás que elegir equipo y coche. Atendiendo a la posición que ocupes al cruzar la línea de meta en cada carrera, se te otorgará un montante de puntos diferente. A lo largo de la temporada tu equipo mejorará el coche añadiendo nuevas piezas, como un nuevo turbo o un tubo de escape. También cabe la posibilidad de que otra escudería se haya fijado en ti, momento en que te hará una oferta de cara al próximo año, para lo cual establecerá unas condiciones que deberás cumplir si quieres firmar por ellos. Aunque hayas aceptado su oferta en el momento de su realización, al finalizar la temporada puedes optar por continuar con tu equipo. Cada temporada consta de seis pruebas, una por cada escenario. Son una carrera estándar a dos vueltas, una carrera de sprint a una sola vuelta, una de resistencia a cuatro vueltas, una nocturna y otra de doble puntuación, ambas a dos pasos por meta, y la última, denominada de punto a punto, pues no se trata de un circuito cerrado. Las carreras pueden discurrir durante el día, el atardecer o por la noche, y bajo un cielo despejado, con lluvia e incluso nieve. Si logras ocupar la primera posición del ranking al acabar la temporada pasarás a la siguiente división, y tendrás que elegir nuevamente equipo y coche. Con ello habrás despejado nuevos coches y circuitos para correrlos en los modos Desafío y Contrarreloj.

En el modo desafío debes elegir entre jugar tú sólo o hacerlo contra un amigo a pantalla partida en el mismo ordenador. Si optas por la opción solitaria deberás decidir cuántos vehículos serán pilotados por el ordenador, y cuál su pericia al volante. Hecho esto sólo te resta seleccionar el lugar en el que correr, sobre cuál de sus distintos trazados, a cuántas vueltas, si será durante el día, el atardecer o la noche, y si hará sol, lluvia, o nevará. Existen algunas restricciones, de modo que, por ejemplo, no puedes elegir que nieve en Hawai.

La contrarreloj es tan simple como parece. Píllate el 4x4 que te guste, vete a donde te apetezca, y hártate a pegar vueltas a ver si consigues bajar tiempos, sin rivales que te entorpezcan el paso.

Al finalizar una carrera podremos ver la repetición completa de la misma. Lo malo es que siempre se hará un seguimiento de nuestro vehículo, sin posibilidad de cambiar a otros, sin control alguno sobre el ángulo de la cámara, y sin poder guardar la repetición para enseñarle a tus amigos tus mejores trompos y vueltas de campana.

En cuanto a las opciones de configuración, podemos retocar el detalle gráfico, la resolución, la calidad y el número de elementos que se muestran en pantalla o la distancia a la que se va dibujando el escenario, todo ello en menús sencillos con las casillas justas para hacer que el usuario iniciado no se sienta abrumado, pero dotándole a su vez de suficientes elementos de control para que decida y ajuste qué quiere ver y cómo. Lo mismo con el audio, donde también podremos seleccionar el driver de sonido que nos convenga (Dolby Surround, Aureal 3D, etc). Los controles, para ambos jugadores, también son totalmente configurables.

Todo ello conforma un juego sencillo, puede que incluso simple, que viene listo para servir, accesible desde el primer momento y para todo el mundo, sin tener que pasar por un tutorial o una lectura pausada del manual.
 
Audio/Vídeo:
El apartado sonoro no es lo mejor de Offroad, pero cumple perfectamente con su función. El ruido de los motores es algo simple, limitándose a un rugido poco espectacular que aumenta y disminuye en función de las revoluciones. Más característico es el sonido que se produce cuando usamos el nitro, realmente parece que llevemos un reactor pegado al trasero. El sonido posicional tampoco es de lo más depurado que he oído, pero sí lo suficiente como para discernir cuando un coche se nos acerca por detrás y por que lado lo está haciendo. También contamos con sonidos ambientales, como los aplausos de los espectadores, el canto de los pájaros o los campanazos de una iglesia. En todo el juego no hay una sola voz, salvo en los circuitos de la República Checa, donde al principio, algo así como un comentarista lanza unas pocas palabras por un altavoz. No existe música durante las carreras, pero sí en los menús, no está muy elaborada, pero tampoco resulta molesta en modo alguno.

De los gráficos, bueno, es Rage, así es que no hay mucho que decir, pero de todas formas lo diré. Son espectaculares, maravillosos, preciosos. El motor gráfico de Offroad no tiene nada que envidiar a los que usan los mejores del género, como Need for Speed, al contrario, se alza a una altura similar. Los efectos de luz y las condiciones meteorológicas están muy conseguidos, tanto que en ocasiones superan en belleza a lo mejor que puede ofrecer la realidad. Así, el atardecer está realizado de manera preciosista, con una luz anaranjada, propia de los últimos rayos de sol del día que lo inunda todo y que en ocasiones ciega. Si Bill Clinton echa de menos las puestas de sol en Granada, Offroad puede ser el remedio que cure sus penas. La lluvia no es perfecta, pero en pocos juegos de conducción lo es, por no decir en ninguno, pero en este título va un poco más allá, y resulta un poco más convincente. La nieve, mucho mejor, con unos copos de nieve algo exagerados, pero por ello muy vistosos. Además, las diferentes condiciones atmosféricas que haya en carrera tienen su repercusión en la luminosidad y en la representación del cielo, con nubes más o menos oscuras que se mueven. Cuando haya lluvia, incluso podrás ver rayos que caen apenas a dos palmos de tu todo terreno.

El diseño de los circuitos tampoco se queda atrás. Están llenos de baches, algunos de ellos son auténticas depresiones, montículos, inclinaciones a un lado y otro del camino, charcos, y muchos objetos. En Suiza existen descensos tan pronunciados, que más que bajarlos, más bien parece que te despeñas por ellos. Hay vallas publicitarias, vallas de seguridad, conos de señalización, balas de paja, pilas de neumáticos, cajas, etc. Si chocas contra cualquiera de ellos, verás como salen despedidos o son arrastrados con un comportamiento físico incluso creíble. Hay otros muchos objetos, edificios y detalles propios de cada pista, como camiones o plantas industriales en Inglaterra, explotaciones petrolíferas en Nevada, un volcán y una cascada en Hawai, una presa en Canadá, los postes, cables y cabinas del teleférico en Suiza o un árbol caído en la República Checa. Sobre todos ellos vuela constantemente un helicóptero que sigue la carrera y que en ocasiones se hace visible, e incluso se pone a ras del terreno. El modelado de todos estos objetos es realmente bueno. Las texturas de los circuitos no desmerecen del resto de elementos gráficos. Están extraordinariamente resueltas, recreando perfectamente el terreno que simulan, salvo quizá, la que corresponde a la arena de playa, que no me acaba de convencer completamente.

Los vehículos también presentan un modelado excelente, no tanto en las camionetas como en los buggies, de los cuales se puede apreciar hasta el movimientos de los amortiguadores. En todos los coches se ve el humo que sale de su tubo de escape, las luces de frenada y marcha atrás, e incluso los volantazos y cambios de marcha del piloto. El comportamiento de los mismos sobre el terreno resulta ejemplar, así, si la rueda derecha delantera pasa por un bache, el amortiguador derecho delantero se contrae, el coche se inclina sobre ese lado, y el amortiguador delantero izquierdo se estira. Con esto quiero decir que el coche no es un ladrillo, sino que responde perfectamente al terreno sobre el que rueda, y a su vez el terreno da la réplica a su paso, de modo que levantaremos una cortina de agua si nos metemos en un charco, una buena polvareda si la tierra está seca o montoncitos de arena si vamos por la playa. Para acabar, la carrocería se ensucia y se va tapizando de manchurrones de barro a medida que pasan las vueltas. Excelente la factura gráfica del programa.
 
Guión:
¡Corre, maldito cacharro, corre! Este es el guión, en resumidas cuentas. En el modo Campeonato tendrás que completar diversas pruebas para alcanzar divisiones superiores, conseguir coches más potentes, vértelas con rivales más competitivos y fichar o no por nuevos equipos. En el modo Desafío te creas algo así como una carrera personalizada, en la que puedes elegir todas las variables posibles para competir, tales como el número de vueltas, oponentes, trazado, etc. Y para finalizar, en la Contrarreloj podrás arrastrar tu cuatro latas por donde te plazca y durante tantos giros como desees, con el fin de reducir tus tiempos. 
 
Jugabilidad:
Muy sencillo de jugar es este Offroad. Yo he optado por usar el teclado y dejar de lado el volante, que lo prefiero para juegos más cercanos a la simulación que al arcade, categoría a la que se adscribe este título. Para jugar disponemos de las teclas habituales de dirección, freno, acelerador, freno de mano, cambio de marchas (para el que quiera complicarse con el cambio manual), retrovisor (tecla que ni he tocado) y el potenciador nitro, típico de este tipo de vehículos y competición. Las vistas nos permiten seguir la acción desde detrás del coche que conducimos, ya sea desde un ángulo elevado o a su misma altura, cosa que no recomiendo, pues la visibilidad es mínima, aunque la perspectiva pueda parecer más espectacular. También existe una vista desde el morro, que es justo todo lo contrario a la anterior, pues aquí el campo de visión es máximo. Se echa de menos una perspectiva desde el interior, pero teniendo en cuenta que estamos ante un arcade, y que este tipo de cámara se ajusta mejor a los simuladores, tampoco es una perdida demasiado cuantiosa.

En cuanto a la forma de conducir, ésta varía dependiendo de la superficie sobre la que rodemos, aunque la diferencia tampoco es cualitativa. Sobre pistas mojadas o heladas el coche tiende a derrapar un poco más y ser más inestable, lo que se acentúa mucho más si da la casualidad que la superficie es arena. Este tipo de firme (arena más lluvia o nieve) es sin duda el que más problemas causa, pues es bastante fácil perder el control. En el resto basta con un poco de cuidado en los giros y algún ligero contravolante si el coche se nos empieza a ir, aparte de cuidarnos de chocar contra los muros, pues supondría un trompo seguro. En realidad, para Offroad se ha pensado en una dinámica aplasta el acelerador y olvídate del freno para ofrecer una jugabilidad sencilla, sin complicaciones. Tan sólo nos veremos obligados a tirar del freno de mano para negociar una curva de horquilla o una que presente un ángulo algo más cerrado de lo habitual.

La presentación de los indicadores en pantalla no puede ser más típica. En la esquina superior derecha se muestran los tiempos de vuelta y los tiempos totales. En la esquina inferior está el tacómetro, enorme, como casi siempre en estos juegos, que mide las revoluciones por minuto. También están el indicador de la velocidad medida en millas por hora, el número de nitros disponibles y la marcha actual. En la esquina superior izquierda se muestran el numero de vueltas y la posición que ocupamos en carrera. En la esquina inferior del mismo lado aparece un esquema del circuito. Como ves, parece que los de Rage han cogido un manual de estilo de arcades de carreras y lo han seguido punto por punto.

La IA de los enemigos presenta algunos patrones interesantes, aunque lo habitual es que sigan una ruta y una trazada predefinida. Así, en ocasiones se les puede ver tomando una ruta alternativa que les sirva de atajo si notan que te mantienes pegado a ellos durante varias vueltas. Cuando les coges unos metros de ventaja no tienen ningún problema en usar el nitro para ganar el terreno perdido y pasarte. Tampoco cometen fallos de bulto, si bien, puedes ver de vez en cuando cómo se meten contra un árbol, o se tragan una bala de paja. Pero lo normal, como digo, es que mantengan un ritmo muy estable. Su pericia al volante aumenta conforme vas subiendo de división, claro, que también sus mecánicas son más potentes. En las divisiones segunda y primera tendrás que correr muy bien y usar los tres nitros de que dispones en cada prueba si quieres terminar el primero. Además, en estas divisiones las mejoras que introduce tu equipo en el coche se suceden de forma más lenta. En realidad esto está pensado para hacerte ganar competitividad de forma pausada, de manera que no te resulte fácil ganar a las primeras de cambio, para así dotar de mayor longevidad al programa. Esto se traduce en que deberás correr varias temporadas en una misma división antes de poder ganarla y pasar a la siguiente.

Las opciones multijugador son: dos jugadores a pantalla dividida en un mismo equipo y juego en red local. En éste último caso el número máximo de jugadores es de seis. Como siempre suele pasar, mucho más divertido jugar junto a tus amigos que contra el ordenador. La pena es que, como pasa en el modo para un jugador, la diversión se agota pronto, a pesar de que en multijugador es posible estirarla un poco más. Si te compras Offroad desde luego no creo que vaya a ser para hacer quedadas maratonianas con tus colegas. Pero entre deathmatch y deathmatch, una carrerita a este juego puede poner unos granitos de variedad que quizá necesitéis, claro, que de todo esto el que más se alegraría sería vuestro maltratado ratón.

Como ya he dicho en varios puntos a lo largo del análisis, Offroad es un título muy sencillo, alejándose de la profundidad y complejidad que ofrecen los simuladores. Pero este es, justamente, su mayor inconveniente. Su sencillez y simplicidad de planteamientos castran buena parte de sus posibilidades y recortan el ángulo de sus miras. Queda convertido pues en un juego recomendable para aquellos jugadores noveles o no habituales, que pasan poco tiempo jugando y que sólo buscan un rato corto de diversión fácil. A los amantes de los simuladores o jugadores habituales les sabrá a poco, este juego no será capaz de satisfacer sus necesidades. Si entras en el marco de este último tipo de jugador, te divertirás corriendo tres o cuatro carreras, pero dudo mucho que después sigas con ganas de empezar una quinta. En cualquier caso, es posible que vuelvas regularmente a él, bien sea como paréntesis durante la partida a otro juego más profundo, bien sea para poder pegarte el gustazo de contemplar de nuevo los bellos parajes y sobrecogedores atardeceres que Offroad luce.
   
Estrategia y trucos:
Sobre superficies mojadas es bastante fácil sobrevirar, derrapar o perder el control si nos tocamos contra un oponente o un lateral del circuito. Para lograr mantener la estabilidad del coche lo mejor es tocar de forma intermitente las teclas de giro. Si las dejamos apretadas durante demasiado tiempo, el coche se empezará a ir de atrás, tendremos que empezar a contravolantear. En caso de llegar a este punto lo mejor es soltar el acelerados y tratar de estabilizar el coche mientras no hay fuerza de tracción.

La última carrera de un campeonato siempre se disputa en Suiza, y es un terreno realmente difícil para conseguir una buena posición, no digamos ya para ganar. Por ello la clave para lograr un campeonato y ascender de división es ganar la carrera de doble puntuación y hacer un buen papel en el resto, tratando al menos de ganar otra carrera. Si llegas a la última prueba siendo segundo, despídete. Pero imagina que llegas primero, pero con una corta ventaja de puntos. Pues juega sucio, y hazlo del siguiente modo. En cuanto empiece la carrera, bloquea el camino del oponente que vaya en segunda posición del campeonato, de manera que lo retengas el tiempo suficiente como para impedir que llegue en un buen lugar y sume demasiados puntos. Ambos quedaréis en los últimos puestos, pero no conseguirá recortarte lo suficiente como para alzarse con el campeonato. No dejes en manos de la suerte o el azar la posible mala clasificación de tu rival, porque en Offroad, el primero casi siempre queda primero, y el segundo casi siempre queda segundo, sólo tú puedes alterar la clasificación, de manos que no lo dejes en manos del ordenador, pues ya te digo que todos los pilotos suelen ocupar una misma posición a los largo de todas las pruebas, dependiendo de lo que tú hagas. Yo he puesto en práctica esta jugada un par de veces, y me ha ido bien.

Estos trucos o consejos son los que había disponibles el 15/05/01 Si no encuentras lo que buscas, pasa por la sección de TRUCOS.
 
Comparándolo con...:
Las referencias más cercanas a Offroad son Screamer 4x4 e Insane. Pero las diferencias con ambos son más que palpables. Screamer 4x4 está mucho más cerca de ser un simulador que de un arcade como el título que nos ocupa. Su planteamiento de carrera también es distinto, pues consiste en ir pasando por una serie de postes señalizados a lo largo de un escenario abierto, donde tú eres quien decide cual es la ruta a seguir de un poste a otro. En Offroad el camino está marcado, no te puedes salir, pero cuentas, eso sí, con la posibilidad de tomar unas rutas alternativas, en forma de atajo algunas veces. Insane, por su parte, es otro arcade, pero radicalmente distinto de Offroad. En él también nos hallamos en un campo abierto, sin trazados delimitados. Pero la gran diferencia está en sus modos de juego, algunos de los cuales parecen transplantados de un shooter, y en su clara orientación multijugador.

Lo más cercano a Offroad que se me ocurre en estos momentos, es el prehistórico Ironman's Off-Road, pero por su distancia en el tiempo las diferencias gráficas entre uno y otro son abismales. A este viejo juego le ocurría lo mismo que al actual, es decir, divertido durante un rato, pero no recomendable para sesiones prolongadas. También en él estaban presentes los nitros y las mejoras, sólo que no te las daba ningún equipo, las tenías que comprar con el dinero que ganabas en la competición. Era un juego en 2D (faltaría más), con una perspectiva cenital, en el que los todo terreno se veían muy pequeños, lo cual le otorgaba un aspecto gracioso. A diferencia del actual, las carreras se disputaban en circuitos indoor, también llenos de baches y pequeños montículos que te hacían despegar del suelo. También existían pequeños atajos en algunas pistas. Era lo más parecido a los arcades de carreras de máquina recreativa de la época.
  

Gráficos asombrosos, con unos efectos luminosos magníficos y unos atardeceres de postal, no me cansaré de repetirlo.
La existencia de rutas aparte de la principal, que en ocasiones atajan y en otras no, aporta un plus a la jugabilidad.

El diseño de los circuitos, repletos de desniveles, baches, charcos, objetos varios, maquinaria y construcciones diversas.

Ideal para los jugadores sin experiencia en el género, o aquellos que simplemente deseen un rato de entretenimiento fácil.
  

Enlaces o Links:
Rage software

Website del juego

Friendware  
 
Manual:
La copia del juego que he probado era una versión review del mismo, por lo que no venía acompañada de manual. Huelga pues decir que no tengo ninguna valoración que hacer al respecto. Si tenéis el juego, los reanálisis son una buena oportunidad para hablar de ello.  
 
Equipo necesario:
Los mínimos establecidos por el fabricante son Pentium II 266, Windows 9x, CD-ROM 4x, 64 Mb RAM, tarjeta de sonido ISA compatible con DirectX 7.0 y aceleradora 3DFX Voodoo 2.
Los recomendados son Pentium II 450, Windows 9x, CD-ROM 24x, 128 Mb RAM, tarjeta de sonido PCI compatible con DirectX 7.0 y tarjeta gráfica de video AGP con 16 Mb.

El juego ha sido probado en dos equipos. En un AMD K6-2 400, 128 Mb RAM y GeForce 2 MX, a una resolución de 800x600, 32 bits de color y toda la carga gráfica al máximo, el juego sufría tirones cuando había seis coches en pista. Si los presentes eran uno o dos, o sólo el jugador, el rendimiento era muy bueno. En un Celeron 566, 256 Mb RAM, GeForce 256, a 1024x768, 32 bits y todo al máximo, seguía sin ir del todo fluido con todos los coches corriendo.
 

6.7

Correcto

No es lo último ni lo más original, tampoco cuenta con la mejor ejecución, pero puede divertir si te gusta el género. Bien, pero mejorable. Cómpralo si te gusta el género y te gusta tenerlos todos.