The King of Fighters 99 Evolution (Dreamcast)

King of Fighters es el abanderado de una generación de adictos empedernidos a los salones recreativos. Asiduos a todas las entregas de una saga que ha unido los mejores luchadores de los beat'em ups de SNK, y los enzarzaba en una batalla sin cuartel año tras año con la simple excusa de repartirse mamporros a las órdenes de martilleos constantes sobre castigados muebles en los arcade. Una tradición que después del abandono de la multinacional de Osaka a arriesgarse a seguir en la órbita de crear nuevas placas o plataformas, se ha parado por completo y a comenzado a imponer su ley en Saturn, PSX, y ahora, en Dreamcast.

De la misma manera, el pad de la blanca de SEGA la han blandido miles de seguidores de los combos y fatalities, así como de incondicionales de un buen arcade. Por poner algún ejemplo, Naomi, fue el primer campo de pruebas de Capcom y Power Stone, uno de los bombazos de la primera hornada de títulos de la 128 Bits. Desde aquella incursión, Namco, Samy, o la propia SNK, han visto como sus criaturas se lucían en todas las dimensiones por haber. Entonces, KOF '99, lo tiene todo a favor para convertirse en una de las últimas esperanzas para los más afines al género...

Respecto a su antecesor, Dream Match, apenas comporta innovación alguna. De hecho, gráficamente volveremos a presenciar escenarios seudo 3D, y personajes a base de sprites enormes inundando la pantalla de combos y movimientos especiales. Está claro que los amantes de la lucha con rotaciones y cambios constantes de perspectiva no verán colmadas sus esperanzas. Pero no hay que rendirse antes de saber que novedades trae bajo el brazo. Ante todo, porque dispondremos de cinco personajes nuevos que no aparecieron antaño: Maxima, K, Jhun Hoon, Bao y Whip, aunados en dos nuevos equipos que se sumarán a los célebres Fatal Fury o Art of Fighting, y sus emblemáticos Joe Higashi, Andy y Terry Bogard, Robert, Yuri, Chang o Billy Kane. Por consiguiente, cada uno de los representantes de tan aclamados títulos, tendrán su propia arena en la que combatir. Asi pues, y como siempre, derramaremos la sangre en aeropuertos, ferias rebosantes de gente, norias, atracciones, y hasta cerca de los alcázares típicos de oriente en su envoltorio privativo de estética manga.

Ya te habrás dado cuenta de que no hay demasiadas actualizaciones a remarcar, hasta las partituras y recreación de la BSO es calcada a las que salían de los 8 canales de sonido de Neo Geo con sus resonancias techno y de jazz. KoF, simplemente, está ahí en busca de los forofos de este tipo de juegos, sin otra pretensión que divertirles ofreciendo lo de siempre, sin cambiar una fórmula que ha funcionado perfectamente durante años. No iban a cambiarla ahora porque si...

La recién consabida mala situación de SNK no va afectar para nada la publicación de esta prometedora secuela de todo un clásico de la lucha. Lo mejor de todo es que DC necesita como agua de Mayo que este tipo de empresas la apoyen hasta el momento de su despedida, y por lo visto, están insuflando un poco de aire a lo que parece una consola con una parada respiratoria suficiente como para enterrarla con vida. Esperamos tener lo antes posible, de nuevo, otra de las genialidades del beat'em up al alcance de la mano...