Crazy Taxi, el penúltimo éxito en los salones recreativos acuñado por SEGA, se presenta en Dreamcast con la carta de presentación que supone el haber conseguido varios top 1 en numerosas revistas del mundo de las máquinas de arcade.
Las seis menos diez de la tarde. He de llegar en poco menos de 5 minutos a la estación norte para no perder el tren. Un taxi se aproxima a mi, alzo mi brazo; el taxi se detiene; su matricula ONLY777 . Agacho la cabeza por la ventanilla y denotando algo de nerviosismo, le digo al conductor "¿puede llevarme a la estación norte en menos de 4 minutos?". Él sonríe sarcásticamente y me dice "nen....sube y agárrate.."
Crazy Taxi
Crazy Taxi, el penúltimo éxito en los salones recreativos acuñado por SEGA, se presenta en Dreamcast con la carta de presentación que supone el haber conseguido varios top 1 en numerosas revistas del mundo de las máquinas de arcade. Bajo este nombre encontramos un juego donde nos ponemos en la piel de uno de los 4 taxistas más locos de la ciudad -Axel, Gus, Gena y BD. Joe- en su lucha diaria por ganar un buen puñado de dólares. Y es que el objetivo del juego no es otro que divertir a los clientes que suben a nuestra máquina infernal con objeto que dejen una propina lo más sustanciosa posible, para ello podremos conducir nuestro taxi de la manera más loca posible; circular en sentido contrario, por en medio de los parques, por los raíles de los trenes e incluso por el cauce del río...todo un espectáculo. Eso si, por muy divertido que sea nuestro trayecto, debemos completarlo en menos de un tiempo establecido, de otro modo el cliente, ofendido por nuestra incompetencia, nos insultará y se bajará del taxi sin pagar ni un duro....y es que nadie dijo que fuese facil la vida del taxista....
Crazy Taxi
Crazy Taxi
Crazy Taxi
Crazy Taxi
9
Excelente
Un título referente en su género, que destaca por encima de sus competidores y que disfrutarás de principio a fin, seguramente varias veces. Un juego destinado a convertirse en clásico con el paso de los años. Cómpralo sin pestañear.