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Es increíble, pero por fin parece ser que Microsoft hace un juego bien (sin contar con Close Combat, otra joya). Desde que aparecieron los venerables Civilization II, la saga de Warcraft, Red Alert, etc. los juegos de estrategia han estado de moda y más si son en tiempo real. Age of Empires es precisamente eso, frenética estrategia a tiempo real en tiempos de Fenicios y Babilonios. Combate, diplomacia, administración de nuestros bienes y construcción de ciudades (incluyendo defensas con murallas y torres, mejoras de instalaciones y un largo etcétera.) es en lo que nos tendremos que aventurar para vencer al enemigo. Hay tantas opciones (incluyendo más de una treintena de unidades militares diferentes) a tener en cuenta que a veces es difícil seguirlas todas: mantener tus soldados a la última en tecnología de guerra, construir y defender tu ciudad, investigar, recolectar oro, piedra, madera y comida, mejorar tu flota. Y además, según la civilización que escojas tendrás opciones diferentes de desarrollo. En este juego, a diferencia de otros parecidos, la toma de decisiones adquiere un papel importante. ¿Debo crear un mercado o mejorar los escudos de mi infantería? Más de una decisión equivocada al principio ha acabado en gritos de frustración a mitad de partida. Los gráficos son fantásticos, el interfaz intuitivo, el sonido envolvente y la acción llega a raudales. Lo cual no quiere decir que no tenga sus defectos: los hay y a más de uno le puede echar para atrás. Los aspirantes a conquistadores tienen dos opciones; partidas solitarias (con campañas o mapas aleatorios) o partidas multijugador. Las campañas son difíciles pero muy variadas, con lo que la experiencia varía mucho de una misión a otra. Los mapas aleatorios están muy bien equilibrados y proporcionan muchas horas de juego. Y bueno, qué decir de la experiencia de machacar a un amigo a través del módem. Audio/Vídeo: En el aspecto visual llegamos a uno de los puntos fuertes del juego. Las animaciones te dejarán boquiabierto: tus aldeanos recogen comida y luego vuelven a los graneros balanceando cestas o doblados bajo pesadas cargas de carne, tus arqueros sueltan flechas con suavidad y tus caballos patean el suelo. Los edificios, árboles, animales y demás elementos también están a la altura. Los mapas de juego van desde pequeño hasta muy grande. El sonido no está mal. Cuando seleccionas una de tus unidades, te responde. Las batallas tienen sonidos realistas, el choque de espadas y el lanzamiento de las catapultas, pero alguna que otra vez me he encontrado desconectando los altavoces del PC y colocando un CD en la cadena de música.
Guión A diferencia de muchos juegos de ETR del momento que se esfuerzan en ofrecer las armas de tecnología más avanzada, éste se ambienta en la época de Babilonios, Asirios e Hititas. Y de ahí no se pasa. Tendrás elefantes, arqueros y catapultas, pero de tanques y láseres nada. Construye tu ciudad, avanza en los tiempos (de la Edad de Piedra a la de la Herramienta, a la del Bronce, etc.), defiéndete de los ataques y destruye al enemigo. Algunas misiones de Campaña, tienen objetivos variados, como llegar con una pequeña banda de valientes soldados a un punto determinado del mapa.
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Estrategia y trucos: - Avanza tu civilización cuanto antes. Podrás crear unidades mucho más poderosas. - Los monjes son un arma formidable. Agrupa dos o tres y utilízalos para convertir al enemigo. - Antes de construir una Maravilla, asegúrate de estar bien defendido. Tus enemigos se lanzarán contra ti.
Estos trucos o consejos son los que había disponibles el 05/12/98 Si no encuentras lo que buscas, pasa por la sección de TRUCOS.
Jugabilidad: Aquí llegamos a uno de los puntos flacos del juego, y por tres razones: - El módulo de Inteligencia Artificial (IA) se comporta frecuentemente como un retrasado mental. Tus unidades se atascan detrás de árboles, ¡en medio de una pradera! O no saben seguir una ruta, por otro lado obvia, para llegar a esa batalla que estás perdiendo. Por otro lado, al enemigo a veces se le engaña con una facilidad pasmosa. Ataca a su infantería con tus arqueros a distancia y su caballería no los defiende; envía unidades para atraer poco a poco a sus unidades y poder machacarla a gusto (un jugador Humano respondería con una ataque masivo); bombardea una instalación suya y el ordenador enviará a sus campesinos a repararla, dejándote vía libre para diezmarlos (¡con lo importantes que son!). - Desde un principio es un juego tremendamente difícil. En el segundo episodio, te enfrentas con un pobre monje a todo un poblado. Tienes la posibilidad de convertir unidades enemigas a tu bando, pero yo tuve que comenzar la partida una docena de veces hasta poder cogerle el truco. Incluso, en los niveles más sencillos. - Hay un límite de unidades de 50. A más de uno esto no les ha gustado y se han producido debates sangrientos en los foros de noticias. A mi, personalmente, me parece una buena opción pues te obliga a planificar mejor tu estrategia desde un principio. También existe la posibilidad de borrar unidades, de enviarlas a morir por la patria y algún que otro truquillo para rebasar este límite. Con todo el juego acabado arrancando las típicas frases de bueno, sólo un poco más y ya acabo'. Más de una vez me he encontrado a las tres de la mañana, destrozando (por supuesto) al enemigo vil. No tengo la menor duda en recomendar este juego, sobre todo a los estrategas que quieran unidades históricas y tiempos pasados
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Comparándolo con...: Es comparable con cualquier juego de estrategia a tiempo real de los buenos: Warcraft II, Red Alert, etc. El sistema de juego es similar, si se te daba bien manejar Warcraft II, hacerte con el Age of Empires te sera más fácil, pero aún así tendrás que esforzarte.
Soporte multijugador: 2 personas a través de módem o cable serie, 8 con LAN, conexión TCP/IP a través del Microsoft Internet Gaming Zone. Con un único CD pueden jugar hasta tres jugadores. Manual: El manual es muy completo, incluyendo desplegables con el árbol de tecnología. De todas formas, el interfaz es tan sencillo (sólo se requiere el uso del ratón), que yo ni me lo miré. Equipo necesario: En un Pentium 100 sin tarjeta aceleradora 3D funciona perfectamente (aunque en las batallas más grandes, a veces se atasca un poco). Además necesita, CD-ROM 4X, ratón, Sound-Blaster (opcional) y DirectX 5.0