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UFC

Yan frena el ascenso de Figueiredo en el peso gallo

El ruso vence por decisión unánime (triple 50-45) al brasileño en su tercera pelea en su nueva división en el UFC Macau.

Deiveson Figueiredo y Petr Yan durante el UFC Macau.
Instagram: @UFC

China fue la anfitriona del UFC Macau, un evento plagado de KOs espectaculares que pusieron en el punto de mira a peleadores, con madera de futuras estrellas. La pelea estelar robó todas las miradas, con un Petr Yan que vuelve a su mejor forma y se postula como el siguiente aspirante a pelear por el cinturón del peso gallo, actualmente en manos de Merab Dvalishvili. El ruso se impuso por decisión unánime (triple 50-45) a un duro Deiveson Figueiredo que lo intentó hasta el final. “Quiero decirle a Merab que soy el número uno en la división. Me merezco la oportunidad titular. ¿Qué dices, vamos a por la revancha?”, declaró Yan tras la victoria.

Empezaron midiéndose, y Figueiredo rápido conectó una patada para seguir con el derribo. El brasileño se puso encima, dentro de la guardia de Yan, que se defendía lanzando golpes a la cabeza. Cambió de guardia, buscando la guillotina y le buscó la espalda al ruso. El excampeón del peso mosca no consiguió atraparlo bien, aunque le hizo sufrir, evitando el control de espalda y clavando el codo en la pierna de Deiveson. El brasileño presionaba, pero Yan se levantó, quedando ahora él dentro de la guardia de Figueiredo que cometió un descuido y se abrazó. Una vez arriba, el ruso, que le había dado totalmente la vuelta al asalto, empezó a castigar al brasileño, que finalmente consiguió escapar y terminaron los últimos rounds de pie con las patadas de Petr. En el segundo asalto, el ruso salió con peligro, con un pateo abajo intenso. Clavó una derecha que sintió Figueiredo, pero respondió con otra, devolviéndole el golpe a Yan. El excampeón del peso gallo, más técnico y dominante, marcaba la distancia y el ritmo de la pelea, luciéndose. En los últimos segundos, lo mandó al suelo con el antebrazo con un violento derribo.

El brasileño se lanzaba en busca de hacer daño con sus golpes, pero el ruso se movía bien, quitándose las manos y manteniendo el control. Volvió a conseguir el derribo, pero Yan le dio la vuelta y se lo quitó de encima con el grappling. Respondió el ruso con patadas y le cazó con una mano que le mandó a la lona. Castigó en el suelo, metiéndose en su guardia. Figueiredo aguantó, con sufrimiento, y volvió a pie, cambiando la guardia. El excampeón del gallo seguía presionando y frenaba los intentos de derribo. Conectó una serie de manos que sintió Deiveson, cada vez más tocado. Intentó revertir la situación en el cuarto round el brasileño, presionando contra la reja. Siguió tirando con todo Yan, lanzándole por los aires el protector bucal, pero nunca hay que dar por muerto al brasileño, que conectó un derechazo que, a pesar de que le duró poco, dejó en un momento de debilidad al ruso.

El último asalto fue una lucha encarnizada. Intercambiaron manos, pero Yan seguía mostrando una clara superioridad. El poder de encaje del brasileño era asombroso, seguía sacando manos y buscaba la victoria. A pesar del cansancio, ambos peleadores seguían tirando con todo en cruces infernales. El último minuto fue el más intenso, tenían bombas en los guantes y Figueiredo lo intentó hasta el final, pero las cartulinas beneficiaban al ruso. “Todo puede pasar en la UFC, así que no se lo quería dejar a los jueces”, dijo Yan tras el triunfo, recordando peleas en las que las puntuaciones no terminaron de ser justas con sus actuaciones.

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