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VELA | MUNDIAL 470

Xammar y Brugman se aseguran la medalla y tienen a tocar el oro

La dupla española afrontará, este domingo, la Medal Race con 11 puntos de ventaja respecto a los segundos clasificados: los británicos Heathcote y Grube.

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Xammar y Brugman se aseguran la medalla y tienen a tocar el oro

A la tercera puede ser la vencida, de verdad. Jordi Xammar y Nora Brugman iniciarán la Medal Race de este domingo desde la primera posición. La dupla española depende de sí misma para dar un salto definitivo y, tras dos años seguidos como subcampeones del mundo, erigirse en campeones. Sería, sin duda, un golpe sobre la mesa teniendo en cuenta que se está a solo pocos meses de los Juegos Olímpicos de París 2024. Lo que es seguro es que Xammar y Brugman se colgarán una medalla. El deseo es el oro y la oportunidad, inmejorable porque tienen una ventaja de 11 puntos respecto a los segundos clasificados: los británicos Heathcote y Grube. La Medal Race, en la que competirán los diez mejores, es a una manga que puntúa doble.

La quinta y penúltima jornada de competición del Campeonato del Mundo de 470 se disputó en una bahía de Palma espectacular, con un viento mantenido en el entorno de los 18-20 nudos. Y esto propulsó a Xammar y Brugman, que salieron al agua desde la cuarta posición y acabaron líderes. Todo se cimentó a la victoria, repleta de autoridad, en la primera manga de este sábado. Esto ya les permitió ascender tres puestos en la provisional y asaltar la primera posición por primera vez en la semana. Después, un sexto en la segunda prueba tras una magnífica remontada les bastó para completar las Series Finales con un sólido liderato de 11 puntos sobre los británicos Vita HeathcoteChris Grube (que afianzaron su también excelente progresión con unos parciales 9+2) y 16 sobre los defensores del título, los japoneses Keiju Okada y Miho Yoshioka (que se desinflaron con 16+12).

Xammar se mostró encantado de regreso al Club Nàutic S’Arenal y es que “fue un día espectacular para navegar y estamos muy felices con los resultados. Por fin hemos tenido viento de fuera, ola, 18-20 nudos… son más nuestras condiciones”. El liderato de los españoles es el premio a una combinación de paciencia, tranquilidad y consistencia porque arrancaron el Mundial en la cuarta posición, bajaron a la séptima el segundo día, alcanzaron la tercera el siguiente y salieron este sábado como cuartos. Y ahora arrancarán el domingo como líderes: “Son muchos días de regata, muchas pruebas, pasan muchas cosas, se trata de tener la mente fría y salir cada día a intentar hacer lo mejor. La consistencia de esta semana es lo que nos permitió subir mucho en la clasificación”, explicó Brugman.

Ahora ya es el no va más y completadas las cinco primeras jornadas de competición, el Mundial se resolverá mañana, domingo, en la Medal Race entre los diez mejores equipos. Todo será a una manga que puntúa doble. Xammar y Brugman afrontan este asalto final desde la primera plaza para lograr un título que acariciaron en 2022 y 2023, con sendos subcampeonatos. Calculadora en mano, tienen asegurado el bronce, pero quieren el oro. Xammar tiene clara la estrategia: “El plan para mañana es salir a disfrutar. No hay muchas oportunidades como esta, así que hoy intentaremos descansar bien y mañana darlo todo”.

Por otro lado, además de la corona mundial, en este campeonato se reparten las cuatro últimas plazas para París 2024. Stuart McNay-Lara Dallman-Weiss ya la tenían asegurada para Estados Unidos; Vita Heathcote-Chris Grube la consiguieron para Gran Bretaña; Henrique Haddad-Isabel Swan para Brasil (aunque están pendientes de la decisión final de su federación); y Matias Montinho-Manuela Paulo para Angola tras un igualado duelo contra los representantes de Mozambique. “Estoy muy emocionada por ir a los Juegos Olímpicos, pero no sé qué esperar”, reconoció ya en tierra Manuela Paulo, quien saltó de la natación a la vela hace sólo dos años. Los angoleños ni siquiera tienen barco propio, pero demostraron en Mallorca una actitud magnífica. “Venimos de una realidad muy diferente. Nunca habíamos navegado con tantos barcos ni con tanto viento”.

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