Tere Lima, mejor promesa del Mundo: “Ir a París sería una locura”

Le abruma a Teresa Lima, deportivamente Tere, que le recuerden cómo, en apenas una semana de margen, ha sido reconocida como la mejor jugadora de la Copa del Mundo Sub-21 de Chile, a pesar de que España terminó en una discreta octava plaza, y ‘FIH Rising Star of the year’. Es decir, la mejor promesa del hockey hierba mundial, según un consejo de expertos, las federaciones nacionales, los capitanes y entrenadores de las selecciones, los aficionados y los medios de comunicación. Casi nada.

“Es algo que nunca me hubiera esperado, ni se me había pasado por la cabeza. Flipé, fue una sorpresa total”, admite en conversación con AS la delantera, de 19 años. “Intento sacarme esa presión de encima. Le quito un poco de importancia para sobrellevarlo”, añade, sobre unas distinciones que han calado hondo en su entorno: “Mis amigos de la universidad –donde cursa segundo de Publicidad y Relaciones Públicas– alucinan, porque además no entienden mucho de deporte. Pero me apoyan muchísimo”. Lima compagina los estudios –gracias a la figura de ‘TutorEsport’ creada por la Pompeu Fabra para los deportistas de elite– con su militancia de toda la vida en el Junior de Sant Cugat y, ahora, también con la Absoluta.

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“Antes del Mundial ya me había estado entrenando en un grupo más grande, y al aterrizar de Chile nos llamaron a dos Sub-21 para volver”, explica la jugadora, quien asume que “sin el cambio de seleccionador –Carlos García Cuenca relevó a Adrian Lock en septiembre– muchas no hubiésemos entrado. Me ha pasado igual que con el premio, a principios de año ni me hubiera imaginado que me llamarían de la Selección”, expone.

Sueña Tere Lima con participar con las RedSticks en el Preolímpico que se disputará del 13 al 21 de enero en Valencia, que otorga las tres últimas plazas para los Juegos. Por ahora, forma parte de una selección de 23 jugadoras, que el próximo sábado día 30, a las puertas de Nochevieja, quedará reducida a 18. “Será difícil, pero ojalá. Sería brutal ir a un Preolímpico, y si no sucede, tengo la motivación para seguir entrenándome a tope todo el año, porque después se volverá a formar el grupo grande. Siempre que haya una posibilidad, lo intentaré. Ir a París sería una locura”, exclama.

Mariona Serrahima, de ídolo a ‘fan’

Todo este sueño, sin embargo, no habría sido posible si hubiera seguido su instinto. “Era una niña muy inquieta, me gustaba mucho el fútbol y era lo que quería jugar”, relata. Y abunda: “Pero mis padres, que no son muy futboleros, me animaron a probar en el hockey con seis años. Ellos son argentinos, donde la pasión por este deporte es incomparable, y mi madre jugó dos años. Encima, vivíamos al lado del Júnior. Me encantó”, sintetiza Lima, quien recalca entre risas que “antes iban con Argentina, ahora está claro que ya no”.

Y, las vueltas que da la vida, la fan ha acabado siendo referente. Es lo que le ha sucedido con Mariona Serrahima, su “ídolo total. De pequeña siempre me fijaba en ella, y de tanto acercarme me enseñaba trucos. Hasta que acabamos jugando juntas. Cuando me dieron el premio, me envió una foto en que salgo yo de muy pequeña junto a ella, y me dijo que ahora era ella quien quería una foto conmigo. Somos muy amigas, prácticamente familia”, concluye la mayor promesa mundial del hockey hierba.

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