Sorpresón en Fukuoka: Italia elimina diez años después a EEUU

Una semana antes de viajar a los Mundiales de Fukuoka, Bea Ortiz, una de las referentes de la Selección española de waterpolo, comentaba que en sus cabezas estaba el ganar a Estados Unidos, que lo veían más cerca que nunca, que la clave era creérselo. Había señales. Esta temporada 2022-23, las de Adam Krikoriac, el mítico y laureado seleccionador, habían perdido ya dos encuentros ante España y las semifinales de la fase final de la Liga Mundial el pasado noviembre en Tenerife ante Hungría. Algo inusual. Pero lo que parecía un accidente se ha convertido ahora en una colisión. Italia ha dejado a las estadounidenses fuera de los Mundiales de Fukuoka en los cuartos de final (7-8).

La sorpresa es mayúscula por la racha que llevaban las americanas, que acumulan tres oros olímpicos seguidos y cuatro oros mundiales. De hecho, la última vez que perdieron una eliminatoria fue hace justo diez años en los Mundiales de Barcelona, cuando precisamente España las eliminó en la mágica noche de julio de las piscinas Picornell. Ahora ha sido en la fría (por el ambiente en las gradas) Fukuoka, en un encuentro igualado hasta el final que ha sacado lo mejor de las italianas y que libera el camino al oro para las aspirantes. España, que va por el otro lado del cuadro, se mide a Hungría a las 12:30 en busca de pelear esa medalla que ya logró precisamente en 2013.

Estados Unidos solo fue por delante al comienzo del encuentro con el tanto de Musselman, una de las mejores goleadoras del mundo que no tuvo el día y falló nueve de 11 lanzamientos. Después Italia le dio la vuelta al partido. “Este es el verdadero Setterosa -exclama Carlo Silipo, el seleccionador italiano- y estoy orgulloso de entrenarlo. Ponemos nuestro corazón, carácter y cabeza en ello. Estamos contentos, pero no acaba aquí, también porque los primeros pases olímpicos solo serán para los finalistas”, comentó nada más concluir el encuentro en la Gazzetta dello Sport.

Italia se lo empezó a creer y se puso 2-3 al final del primer cuarto, pero Estados Unidos, sujeta por Maggie Steffens, autora de cuatro goles, llegó con empate al último cuarto. Italia, que estuvo mejor en las superioridades y dio lo mejor de sí en defensa, se llevó un partido que sabe a oro por la victoria moral, por el subidón y porque rompió uno de los retos más himalayescos del deporte acuático. Estados Unidos ya es vulnerable.