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NATACIÓN | FUKUOKA 2023

Sjöström eterna: oro y récord mundial a los 30 años en 18 minutos

La nadadora sueca acumula ya 21 medallas mundiales en una tarde mágica: ganó primero los 50 mariposa y después batió el récord mundial en los 50 libre en Fukuoka.

Sarah Sjöström.
KIYOSHI OTAEFE

Sarah Sjöstrom sigue agrandando su palmarés, inigualable cuando se trata de hablar de la velocidad femenina. La sueca, que llegó a los pasados Juegos de Tokio recuperada de forma milagrosa de una lesión y logró subir al podio con una plata en los 50 libre, sigue mostrándose infalible en las pruebas rápidas, incluso más dominadora que en sus años dorados. Reservada ya solo al 50, donde no se requiere tanto volumen de entrenamiento, la campeona olímpica y ganadora de 21 medallas mundiales, sumó un nuevo oro en la final de los 50 mariposa y, apenas 18 minutos después, batía el récord mundial de los 50 libre. Así, en una tarde cualquiera y a sus 30 años (los cumple en tres semanas). Sjöstrom no tiene fecha de caducidad.

Primero se lanzó la sueca a la final de los 50 mariposa. Por la calle 4, intratable en las eliminatorias en las semifinales, Sjöstrom paró el cronómetro en 24.77. El dominio de la sueca es aplastante, al poseer las 24 mejores marcas de la historia en esta prueba y a ganarla en cinco Mundiales de forma consecutiva. Nadie ha conseguido desequilibrar su hegemonía en ocho años. La plata se la colgó la china Zhang Yufei, con 25.05, y el bronce fue para la estadounidense Gretchen Walsh, con 25.46. Del oro al bronce hubo siete décimas en una prueba de apenas 50 metros. Universo Sjöstrom.

Apenas 18 minutos después, salió de nuevo a por la final de los 50 libre. No se reservó, consciente de que debía darlo todo después del 50 anterior y de que tendría una jornada de descanso para ponerle el colofón a otros Mundiales en la última jornada. Y fue tan veloz que batió el récord mundial (23.61), que estaba en su poder desde los Mundiales de Budapest, de 2017, con 23.67. Y mañana le aguarda la final, donde puede incluso darle otro mordisco.

Entre la natación estadounidense o australiana, la siempre competitiva prueba de 50 libre, Sjöstrom se ha convertido en una de las mejores nadadoras de la historia de Europa no solo por sus medallas (21 en un país que no es top en relevos) sino por su longevidad: sus primeros éxitos datan de 2009, cuando apenas tenía 16 años y ya se proclamó campeona del mundo en Roma 2009. Sjöstrom es una de las pocas nadadoras que sobreviven a la época del poliuretano. Parece que ella nade con él, su piel son escamas en la velocidad femenina.

Kaylee McKeown.
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Kaylee McKeown.YUICHI YAMAZAKIAFP

Triplete de Mckeown, que iguala a Qin en Fukuoka

Si el viernes fue el chino Haiyang Qin quien se convirtió en el primer nadador masculino en ganar las tres pruebas de un estilo que no es el libre, en su casa la siempre complicada y técnica braza (50, 100 y 200), este sábado fue la australiana Kaylee McKeown quien se convirtió en la reina absoluta de la especialidad y reflejó de nuevo el extraordinario momento acuático de Australia, ganadora sin paliativos de estos Mundiales. McKeown ya había ganado los 50 y los 100 y también fue la más rápida en los 200, su prueba favorita, con una marca de mérito (2:03.85), muy por delante de la estadounidense Regan Smith, entrenada por Bob Bowman (2:04.94). El bronce se lo colgó la china Xuwei Peng (2:06.74).

En las otras tres finales de la jornada, en los siempre emocionantes 50 libre masculino, el campeón fue el australiano Cameron McEvoy (21.06), que voló y no quedó demasiado lejos de bajar de 21 segundos, una barrera que muy pocos han cruzado. La plata fue para el estadounidense Jack Alexy (USA) (21.57) y el bronce para el británico Ben Proud (21.58). Francia puede soñar en sus Juegos con otro campeón que no sea Léon Marchand, con el permiso de Caeleb Dressel o de Kristof Milak. Maxime Grousset (FRA) se impuso en los 100 mariposa con 50.14, por delante del canadiente Josh Liendo (50.34) y la estadounidense Dare Rose (50.46).

También Australia, con récord mundial de la mano (3:18.83), se impuso en el relevo 4x100 libre mixto. En él, Mollie O’Callaghan sumó su quinto oro. La plata fue para Estados Unidos, con un tiempo de 3:20.82 y el bronce se lo colgó Gran Bretaña con 3:21.68, récord de Europa. Pero para récord, el del mundo que logró en las semifinales de los 50 braza la lituana y campeona de los 100 Ruta Meilutyte, que va camino del doblete (29.30).