Reencuentro de oro y chispas
Tan sólo 22 días después de conquistar el primer Europeo de su historia, España se reencuentra con Croacia en los Mundiales. Granados contra Bijac. Y los cuartos de final en el horizonte.
En la retina todavía siguen los ecos de aquel golazo de Álvaro Granados, de revés, inverosímil, con el que la Selección masculina de waterpolo burlaba a Marko Bijac, a los 2.000 enfervorecidos espectadores del Bazeni Mladost, a Zagreb y a Croacia entera. Para establecer el 11-10 en la final del Europeo que daba a España el primer oro continental de su historia. ¿Lo recuerdan, verdad? Pues olvídenlo. Esa al menos es la táctica de David Martín, el seleccionador, y sus jugadores. Lo de hoy es otra historia.
Porque España y Croacia, que disputarán su tercer enfrentamiento en apenas un mes –el primero, el 4 de enero, abrió el Europeo con victoria balcánica en los penaltis (12-14)–, no se dirimen todavía un título, pero sí el camino más accesible para ganarlo; y en el caso croata, también para ir a los Juegos. Como lo más lógico es que ambos se impongan en sus otros partidos (ya comenzaron bien ante Sudáfrica y Australia, respectivamente), es casi seguro que el que gane este miércoles (17:00, hora peninsular española) acabe como primero de grupo y pase directamente a los cuartos de final, eludiendo los octavos y descansando más días.
“Va a ser un partido muy difícil, así que tenemos que dar el cien por cien”, advierte en declaraciones a la RFEN un Martin Famera que contra los sudafricanos (21-5) jugó sus primeros minutos tras la lesión que le apartó del Europeo. Con inteligencia, en ese debut repartió David Martín los tiempos de juego equitativamente, incluso entre los porteros Edu Lorrio y Unai Aguirre, para ir ganando en sensaciones en la piscina del Aspire Dome. Donde se producirá un reencuentro de oro, y de muchas chispas.