Diez de diez para un Palma Futsal imparable
El conjunto balear supera al Betis (4-2) con una segunda parte demoledora de cara a puerta. Cléber, con un doblete cuando el choque marchaba 1-1, fue decisivo.
David contra Goliat, o lo que es lo mismo, tercero contra penúltimo de la tabla. Era el duelo inaugural de la 13ª jornada de la Primera RFEF Futsal disputado en Son Moix entre Mallorca Palma Futsal y Real Betis FS, que en esta ocasión no cumplió la narrativa: el gigante salió victorioso (4-2). Así pues, el conjunto balear suma ya diez victorias en su feudo en otros tantos partidos (siete en Liga y tres en Champions) para mantenerse en la pugna con Barça y Jimbee Cartagena en la zona noble de la tabla. Su mayor pegada, talento individual y los goles de Eloy Rojas, Cléber (doblete) y Rivillos, resultaron determinantes.
Raro es que un equipo de la productividad ofensiva del Palma Futsal, máximo goleador del campeonato con 54 tantos, quedase sin ver puerta en la primera mitad, pero es que la actuación de Raúl Sánchez bajo palos fue descomunal. El guardameta bético fue, sin duda, el más destacado de un conjunto verdiblanco que plantó mucha cara al segundo de la tabla y, aunque no culminó tantas llegadas como su rival, obligó a Barrón a emplearse a fondo en varias ocasiones. Por parte de los baleares, Tayebi fue el hombre más incisivo, pero su primer aviso se marchó muy cerca del poste y en los dos siguientes fue Raúl Sánchez quien le ganó la partida en los mano a mano.
Todo quedó visto para sentencia en un segundo tiempo en el que jarreó toda la lluvia de goles que se hizo de rogar en los primeros 20 minutos. El Palma llevó la iniciativa y, como lleva haciendo toda la temporada en casa, impuso su mayor pegada. Abrió la lata Eloy Rojas en el 24′, con un derechazo lejano a media altura, y desencadenó la tormenta perfecta tras el empate de Raúl López en el 29′. Curiosamente el exbético Cléber dio el golpe de efecto al partido con dos acciones individuales que significaron dos golazos: un derechazo cerca de la escuadra y un zurdazo bien colocado abajo. Con portero-jugador en pista, Piqueras puso algo de picante a un desenlace que resolvió Rivillos a puerta vacía para el 4-2 final, cortesía de Eloy Rojas.