Noe Ponti, todo en una tarde

Será una novela de aventuras o una película al estilo del camarote de los hermanos Marx, pero el caso es que el paso de Noe Ponti por el Europeo de piscina corta de Otopeni da para un historión. Campeón ya en los 100 y 200 mariposa, este sábado por la tarde se imponía también en la final de los 50 de la especialidad, para sólo un par de minutos más tarde disputar la primera de las semifinales de los 100 estilos: acabó marcando el noveno tiempo, igualado con el germano Ramon Klenz, lo que le dejaba fuera de la final… Hasta la descalificación, la segunda en esta competición, de Thomas Ceccon. Desempate y dentro. En vista de que se le acumulaba tanto la faena, este domingo por la mañana se desapuntó de los 400 estilos, por lo que finalmente optará a un póquer y no un repóquer de oro.

Porque Ponti arrolló en una emocionantísima final de los 50 mariposa, con un espectacular tiempo de 21.79 –récord suizo y a cuatro centésimas del récord mundial del brasileño Nicholas Santos–, que consiguió después de un impresionante viraje en el que remontó al hasta entonces líder, el húngaro Szebasztian Szabo. Maxime Grousset se tuvo que conformar con el bronce y con arrebatarle el récord de Francia (22.06) a Florent Manaudou.

Nada más terminar, le tocó comparecer en la primera semifinal de los 100 estilos. Rodeado de nadadores en chándal y zapatillas deportivas, él se presentó lógicamente ya en bañador, chanclas, con agua hasta el tuétano y resoplando. Y pagó caro el sobreesfuerzo, con un tiempo de 53.31, el mismo que el germano Ramon Klenz, que no les daba para alcanzar la final. Pero algo sucede con el campeonísimo italiano Ceccon, que había logrado la mejor marca de todos los participantes pero que acabó siendo descalificado, como ya le había sucedido en los 200 estilos.

Esa decisión de los jueces dejaba a Ponti y Klenz igualados en la octava posición, lo que obligaba a un desempate. A que el suizo tuviera que volver a nadar al final de la jornada, después de la ceremonia de entrega de medallas del 50 mariposa. Y lo hizo una vez más, ya no le venía de aquí. Al cierre de la jornada, entró de nuevo a la piscina el helvético para superar por diez décimas al alemán, con un tiempo de 51.57. Directo a la final. Y a la cama, también.

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Hansson y tres aspirantes al triplete

Quien sí reúne cinco metales en este Europeo, a razón de una por día, es Louise Hansson, quien este sábado se impuso en los 100 mariposa, por delante de la alemana Angelina Kohler, que había marcado el mejor tiempo en las semifinales, y de la griega Anna Ntountounaki. La ganadora sueca acumula tres oros, con los relevos 4x50 libre y estilos, más una plata en los 50 espalda y el bronce en los 100 estilos. Es decir, cinco medallas. Y le queda aún, en categoría individual, el 50 mariposa, cuya final se disputa este domingo.

A un triplete en sus respectivas especialidades, igual que Ponti, todavía aspiran otros tres nadadores. La rusa nacionalizada francesa Anastasiia Kirpichnikova, ya campeona de los 800 y 1.500 libre, disputará este domingo (8:48, hora peninsular española) las series de los 400 libre. Algo similar aunque en distinto orden sucede con el irlandés Daniel Wiffen, que abordará la final de 800 libre (18:34) tras conquistar los 400 y 1.500. Y Mewen Tomac, oro en 50 y 100 espalda, afronta la final de los 200 (a partir de las 17:18), en cuyas semifinales este sábado se adjudicó el tercer mejor tiempo (1:50.46).

Doblete de Touissant para el CAR

Como ya había conseguido en los 50 espalda, Kira Toussaint (55.88) dominó de principio a fin la final de 100 espalda, sobre todo tras un último viraje en que no dio ninguna opción a sus rivales la neerlandesa que se entrena en el CAR de Sant Cugat. Casi un segundo le sacó a la británica Medi Harris (56.81). Tercera por un suspiro, fue la francesa de 18 años Mary-Ambre Moluh.

Igual de autoritarios resultaron los 200 estilos femeninos. Se fue de todas sus oponentes la británica Abbie Wood (2:05.58) desde el salto a la piscina, de forma que la pelea estuvo por la plata, que en un tremendo tramo de crol se adjudicó la francesa Charlotte Bonnet, por delante de la austríaca Lena Kreundl, que había sido muy regular durante toda la carrera.

Récord mixto del campeonato

También el favorito, en este caso el neerlandés Caspar Corbeau (2:02.41), se colgó el oro en los 200 braza masculino, por delante del islandés Anton McKee y del también nadador de los Países Bajos Arno Kamminga, quienes ya habían marcado los tres mejores registros en las semifinales.

Quiso el destino que la última final de la jornada de sábado sirviera también para deshacer el desempate en el medallero entre Gran Bretaña y Francia. Y a fe que lo hizo a favor de los británicos en los relevos 4x50 libre mixto, con un récord de la competición (1:27.75) por parte de Ben Proud, Lewis Burras, Anna Hopkin y Freya Anderson, seguidos de los equipos de Italia y Francia.

Pilato y Gastaldello, cara y cruz

Aroma de final, aunque fueran semifinales, tuvieron los 50 braza femeninos. Si en la primera la estonia Eneli Jefimova igualaba el récord de la competición, los 29.10 de la lituana Ruta Meilutyte en 2013, en la segunda Benedetta Pilato directamente lo batió con un tiempo de 29.98, en busca la italiana de su primer oro después de lograr dos platas. Apasionante el duelo que se espera para este domingo.

Además de Ceccon, quien se quedó con la miel en los labios este sábado, tras su conmovedora celebración y protagonismo el viernes del oro en 100 libre, fue la francesa Béryl Gastaldello, ya que en las eliminatorias matinales de los 50 mariposa fue descalificada por una salida en falso. Ya el mismo viernes, apenas un rato después de su título, había quedado fuera de la final de los 100 espalda por un solo puesto.

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