Movistar Inter deja fuera al Barça en penaltis para volver a una final de Copa
En un partido de máxima igualdad, el conjunto madrileño sella su triunfo en la tanda de penaltis para volver a una final de Copa de España dos años después.
Quizás no fuera el partido más memorable de una semifinal de Copa de España, pero sí uno de los más abiertos en su desenlace. Después de 40 minutos de tiempo reglamentario de máxima igualdad, el Movistar Inter selló su pase a la final de Copa de España a costa del Barça, que dice adiós a otra competición en la que defendía título tras quedar fuera de la Final Four de la Champions. Raúl Gómez devolvió a los suyos a una final de Copa dos años después con el gol definitivo en la tanda de penaltis, después de que Matheus y Pito errasen sus lanzamientos. Para los culés, hora de resetear de nuevo tras caer desde el punto fatídico, cosa que no experimentaban desde la final del playoff de Liga ante el Levante en 2021.
La primera parte fue digna de lo que cabía esperar en un partido de semejante envergadura. El ritmo fue frenético a ambos lados del 40x20, con un altísimo nivel en la creación de juego y en el rigor defensivo. La igualdad fue máxima, lo que unido al elevado acierto de los porteros evitó que hubiese un aluvión de goles pese a los numerosos disparos entre los tres palos. Tras la lesión de Lazarevic, que se retiró a vestuarios sin poder apoyar la pierna izquierda por su encontronazo con Adolfo en un balón dividido, el Movistar Inter curó sus penas mediado el primer tiempo. Cecilio robó, Drahovsky habilitó y Raúl Gómez batió por bajo a Dídac.
El Barça, con su clásico juego de posesión, consiguió el empate por insistencia y como más duele, al filo del descanso. En una sucesión de contraataques, Marcenio logró combinar con Pito, que a su vez asistió con precisión milimétrica a Sergio González para que este hiciese el 1-1 ante la salida de Jesús Herrero. Restaban 38″ para el descanso. Pudo ser un gol psicológico...
El segundo acto mantuvo elevadas cotas de intensidad, pero no de ocasiones de gol. Las defensas se impusieron a los ataques hasta el final, aunque los últimos minutos fueron de muchos nervios. A 4′ de la conclusión, el Barça esquivó una bala: córner del Movistar Inter y penalti para los madrileños por mano de Catela. La tenía pegada al cuerpo, pero evitó un posible remate a gol. Tras ratificar la decisión con el VAR, los colegiados señalaron la pena máxima. Nada cambió. Dídac apareció en el momento clave, adivinó totalmente la intención de Drahovsky y detuvo el lanzamiento. Ni Pato ni Velasco quisieron arriesgar con portero-jugador y la tanda de penaltis dictó sentencia. Lo que detuvo Dídac en el tiempo reglamentario no pudo replicarlo para compensar los errores de Matheus y Pito, una losa demasiado grande que Raúl Gómez se encargó de rematar.