NATACIÓN ARTÍSTICA | DENNIS GONZÁLEZ
“Me veo en Los Ángeles 2028”
Sufrió ‘bullying’, se las tiene con su autoexigencia y se ha dado un hartón de competir en Doha. Dennis González, mejor nadador artístico del mundo, lo tiene claro: “El deporte me ha salvado”.
“El deporte me ha salvado, no tengo ninguna duda”, proclama Dennis González, el chico que encontró en la natación artística la felicidad que le arrebataba el ‘bullying’. El mismo que colecciona medallas, como las dos platas en el solo libre masculino y en el dúo libre mixto de estos Mundiales, y que se adentra en la piscina como quien sale a dar un paseo: ocho veces ha competido en el Aspire Dome de Doha en los nueve días de concurso, todos los solos y dúos mixtos tras la retirada, en septiembre, de Fernando Díaz del Río. Y, con todo ello, el mejor nadador artístico masculino del mundo en 2023, tal como lo condecoró este mismo viernes World Aquatics.
Se ha erigido Dennis en un icono dentro de una especialidad históricamente reservada a las mujeres, pero que se abre al hombre paradójicamente al tiempo que la mayoría de deportes trazan el camino inverso. “Yo mismo me di cuenta, después de Fukuoka (cuando fue campeón en el solo libre), que no sólo había cumplido mi sueño, sino que haber sido el primer chico en ganar el oro en un Mundial en categoría masculina queda marcado para toda la vida”, reflexiona en AS el heredero del precursor de este camino en España.
“Yo no estaría aquí si no fuera por Pau (Ribes)”, reconoce Dennis. “Comencé en la sincro porque vi que él podía hacerlo y me di cuenta de que yo también. He luchado siempre para ser como él, y él a su vez siempre me ha dicho que debo ser su relevo. Me siento muy orgulloso”, certifica, a su vez que confiesa haber tenido “como referente desde pequeño” al italiano Giorgio Minisini, y ya ni digamos al legendario Bill May, que a sus 45 años ha vuelto a competir al máximo nivel: “Es una persona increíble. Es brutal cómo nada. Me autoimpongo que si he de competir con él tengo que hacerlo mejor, y mira que lo hace bien. Es un objetivo”.
El primer hombre en unos Juegos
Precisamente tanto Minisini como May han participado en estos Mundiales de Doha en la rutina acrobática por equipos, una de las pruebas que han llevado tanto a Estados Unidos (que, de hecho, se colgó el bronce) como a Italia hasta París 2024, y que allí se volverá a desplegar. Ambos, sobre todo el norteamericano, pueden convertirse en los primeros hombres en participar en la natación artística de unos Juegos Olímpicos, algo impensable hasta que el Comité Olímpico Internacional decidió permitirlo, en diciembre de 2022.
Algo más lejos le queda esa posibilidad al nadador español, quien sin embargo surca una carrera de fondo. “Desde que comencé en el club (Kallípolis) me incluyeron en los equipos. Es algo que me aporta mucho y uno de mis sueños”, certifica. Y remacha: “Si el dúo mixto no es olímpico en 2028, espero y deseo estar compitiendo en el equipo. Me veo en esos Juegos de Los Ángeles”.
El acoso escolar
Antes, debe Dennis seguir regulando su autoexigencia, tan alta que se había llegado a plantear dejar el deporte de elite. “Es complicado, porque a veces te pones la presión de que porque has sido campeón del mundo estás obligado a volver a serlo sí o sí, tienes momentos de bajón, te ves en los entrenamientos y crees que no lo conseguirás… Pero psicológicamente he mejorado mucho”, asegura.
Igual que ayuda a mejorar su experiencia a quienes, como le sucedió a él, sufren acoso escolar. “Sé que hay gente que ahora mismo lo está sufriendo, por lo que ver a alguien que lo ha superado, que sigue cumpliendo sus sueños y que está triunfando ha de motivarles”, afirma. Y culmina: “Incluso de esas situaciones se puede sacar algo, como canalizar la rabia para meterse en el agua y hacerlo lo mejor posible”. Y acabar siendo el mejor del mundo en tu deporte.