Max Whitlock, leyenda de la gimnasia, regresa tras su retirada
El británico, ganador de tres oros olímpicos, anunció su regreso a la competición a sus 32 años con el objetivo de sacarse en Los Ángeles la espina de París.
El mundo de la gimnasia recibió este lunes una de las grandes noticias del año: el regreso a la competición de Max Whitlock, triple campeón olímpico, a sus 32 años, con el objetivo de afrontar un último baile en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028.
Whitlock, oro en caballo con arcos y en suelo en los Juegos de Río 2016 y en caballo con arcos en los Juegos de Tokio 2020 anunció su regreso con la ilusión de clasificarse para la cita olímpico y sacarse la espina de los Juegos Olímpicos de París, donde se quedó a las puertas del podio en su especialidad estrella.
Whitlock anunció su regreso en una entrevista en el programa The One Show. “Estoy de vuelta. Es algo increíble. Estoy oficialmente de vuelta, soy gimnasta de nuevo y es una locura. Algo me picaba constantemente durante el último año porque sentía que no había terminado bien, que mi carrera estaba sin terminar, incompleta. Siento que tengo una oportunidad por delante y que nunca más la volveré a tener. Así que estoy de vuelta en este periodo de tres años para poder competir en mis quintos Juegos Olímpicos”.
El gimnasta británico también asume los riesgos que tiene su regreso a la competición. “Sé que es un juego peligroso para jugar, pero quiero terminar en lo alto, quiero reescribir el final de mi carrera. Prefiero correr el riesgo y aprovechar esta oportunidad en vez de no arriesgar, porque creo que es algo que miraré atrás dentro de 10 o 15 años y me arrepentiría de no haberlo hecho. Quiero ir más lejos de lo que lo he hecho jamás”.
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Sin embargo Whitlock afronta este regreso con paso firme aunque con algún que otro susto con el que lidiar. “He estado fuera un año entero, así que volveré lentamente. La semana pasada me lesioné. No estaba haciendo nada en el caballo con arcos, estaba sentado cerca de él mirando el teléfono, levante la vista y me hice daño en el cuello. Quién sabe lo que puede venir”, relató un Whitlock que quiere reescribir con un final feliz una de las grandes historias del mundo de la gimnasia.
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