‘Maravilla’ Alonso, boxeador y asesor de imagen de famosos
Jonathan Alonso se enfrentará a Zoravor Petrosian por el AMB Continental Europa en el WiZink. Además, es el dueño de ‘Crush’, el centro de belleza por el que pasan Alcaraz, Lola Índigo...
Jonathan Maravilla Alonso (22-2-0, 7 KO) será otro de los grandes protagonistas de la velada organizada por Kerman Lejarraga (34-3-0, 26 KO) el 29 de abril (abrirán las puertas a las 17:00 horas) en el WiZink Center de Madrid. Se medirá ante el ucraniano Zoravor Petrosian (13-2-0, 5 KO) por el AMB Continental Europa del peso superligero, un título que puede abrirle puertas a nivel internacional. Pero no solo brilla en el boxeo, también es actor, es uno de los rostros de la serie de Netflix Bienvenidos a Edén, y el dueño de Crush, el centro estético de moda en Madrid al que acuden todas las celebrities del panorama nacional.
Jonathan Alonso y Kerman Lejarraga son viejos amigos y antiguos rivales. “Compartimos más que deporte, ya que su familia y la mía están muy unidas”, explica Maravilla. Y sus inicios en el boxeo fueron gracias al cuñado del púgil vasco, Alejandro Suárez. “Con 16 años me convenció para que fuera al gimnasio a practicar boxeo, que a mí no me gustaba, yo prefería Muay Thai, Full contact o algo así. Como en ese momento no estaba practicando ningún deporte, pues dije: ‘Venga, voy a apuntarme a otra cosa, pero te acompaño al gimnasio’”, relata. Como el gimnasio era muy nuevo, no había ninguna clase de las otras disciplinas, por lo que empezó a entrenar boxeo. “Se me dio muy bien, fue como una adicción. Pensaba todo el tiempo en mejorar todos los días. Y gracias a ese pequeño sueño de conseguir un poco todos esos imposibles, seguimos aquí 17 años después”, comenta. A los 19 años, lo fichó la Selección Española de Boxeo y, en 2014, debutó como profesional en Nueva York, con victoria por TKO en el tercer asalto ante José Gómez (3-9-0, 0 KO).
Como no podía ser de otra forma, Maravilla Alonso es una de las grandes estrellas del boxeo español que se subirá al ring en la velada del WiZink Center de Madrid. Se medirá ante el ucraniano Zoravor Petrosian por el AMB Continental Europa del peso superligero. “Tanto yo como el equipo intentamos buscar la mejor manera de llegar a la mejor forma posible y es lo que estamos haciendo, entrenando cada día con muchísima ilusión y mucha motivación”, comenta Jonathan.
Pero el boxeo no es lo único que ocupa la mente de Maravilla. Ha abierto en Madrid Crush, junto con su socio Alberto Isausti, un centro de estética al que acuden todos los famosos del panorama actual. Sus servicios van desde barbería, peluquería y manicuras, a los tatuajes, masajes o micropigmentación. Algo revolucionario en la ciudad. “Crush surge de la idea de que no había ningún local de belleza en todo Madrid que tuviera todos los servicios en un mismo sitio. La mayoría de las chicas, sobre todo, pierden muchísimo tiempo. Un día en el pelo, otro en las uñas, en el masaje...”, explica Jonathan.
El proyecto, que se presentaba ambicioso, ha sido todo un éxito. Lo más demandado son la peluquería femenina y la manicura. “La idea es seguir avanzando con las salas que tenemos y seguir metiendo servicios para ser los número uno”, asegura. Y se ha convertido en el centro estético de las celebrities por excelencia. Su exclusiva clientela va desde los influencers, como Lolalolita y su parjea Ibelky, Mar Lucas u Oriana Marzoli, a los cantantes, como Omar Montes o Lola Índigo, o deportistas de élite, como el peleador Ilia Topuria o el tenista Carlos Alcaraz. “A todo el mundo se le trata por igual, y lo bonito es que mucha gente de a pie entra a Crush y cualquier día se puede cruzar con Abraham Mateo, con Lola Índigo...”, declara. Una gran experiencia tanto para los clientes como para los trabajadores.
Una de las visitas más recordadas por Jonathan fue la de Carlos Alcaraz, que fue a cortarse el pelo un día antes de recibir al Rey. “Me trajo su raqueta, con la que con la que ganó el US Open y se convirtió en número uno del mundo, para mi sorpresa. Yo llevaba hablando con él ya poquito menos de un año y resulta que en su familia eran bastantes fans del boxeo y míos. Le intercambié su raqueta por unos guantes con los que hice el Campeonato del Mundo”, expresa.
Y por si todo eso fuese poco, Maravilla Alonso también se dedica a la interpretación. Empezó en el instituto con el cuñado de Kerman. “Me metí en teatro con Álex porque me sacaba de matemáticas, no porque me gustara. Luego, me encantó”, explica. Pero cuando fichó por la Selección, su vida cambió y se enfocó plenamente en el boxeo. Unos años más tarde, participó por primera vez en una película de Bollywood en la que solo decía una frase. Le gustó mucho la experiencia, pero siguió centrado en el boxeo, ya que su objetivo eran los Juegos Olímpicos.
“Luego me surgió la posibilidad de Palmeras en la nieve, la peli de Mario Casas, que también hicimos un casting, pero ahí estaba en Estados Unidos y preferí boxear”, relata Jonathan. Su siguiente película fue El Rey de La Habana, donde hizo el papel del hermano de la protagonista. “Verme en el cine, en la gran pantalla, en una peli de Agustí Villaronga... Ganamos la Concha de Plata, nos nominaron a los Goya y fue como: ‘Guau, quiero dedicarme a esto. Se me da muy bien, me gusta mucho, voy a involucrarme más’”, declara. Desde ahí, empezó a implicarse más en la actuación y participó en dos temporadas de Gigantes con José Coronado. En 2022, se unió al elenco de Bienvenidos a Edén, que estrenó su segunda temporada el 21 de abril. “La primera temporada fue un éxito, número uno en de más de 80 países. Y a seguir. Mi idea es, al mismo tiempo que el boxeo, seguir en Netflix, en Prime, en Disney y llegar a Hollywood algún día. Ojalá algún Black Panther o un Creed. Esa es la meta”, explica.