Madrid recoge el testigo
El programa ‘Relevo Paralímpico’ llega a la capital para eliminar barreras. “Alimentamos la base de deportistas que pueden llegar a los Juegos”, dice Iván Vivaracho, coordinador.
En las Comunidades Autónomas en las que ya se ha implantado, el número de licencias para deportistas con discapacidad ha aumentado, anualmente, entre un 20 o 30%. Ahora, Madrid recoge el testigo. “A nivel nacional, alrededor de un 7,5% de las personas sin discapacidad tienen una licencia; cuando hablamos de personas con discapacidad, la cifra se reduce a un 0,35%. El objetivo es lograr la máxima igualdad posible”, explica Iván Vivaracho, coordinador nacional de ‘Relevo Paralímpico’, en conversación con este periódico. El programa, con la colaboración de la Comunidad de Madrid y el Comité Paralímpico Español (CPE), aterriza en la capital con el objetivo de “romper barreras” y “alimentar la base de deportistas que luego, en el futuro, puedan llegar a los Juegos Paralímpicos”. El talento existe, pero hay que impulsarlo.
“Quedan 545 días exactos para que el equipo nacional desfile en París. Vuelven los Juegos, pero habrá más después y algunos de nuestros deportistas saldrán de aquí. Hay que garantizar el futuro”, anunciaba con entusiasmo el presidente del CPE, Miguel Carballeda, durante la presentación del programa, que se sostiene sobre tres pilares: la accesibilidad, los recursos y la formación. “Primero, hacemos una búsqueda de entidades en las que pueda haber personas con discapacidad, como hospitales, colegios, fundaciones o centros de rehabilitación. Luego, les presentamos las actividades deportivas que pueden practicar. Les ofrecemos las distintas opciones y, una vez sepan en qué deporte quieren iniciarse, tratamos de eliminar todas las barreras que se lo impiden”, desgrana Vivaracho.
El punto de partida de un proceso cuidado. Entre las acciones concretas de ‘Relevo Paralímpico’, se encuentran la formación de técnicos en áreas como la tecnificación deportiva de atletas con discapacidad, la prestación de material a entidades deportivas, la organización de jornadas para la promoción deportiva y la detección de talento, la creación de una estructura de clubes inclusivos, la firma de convenios con instituciones de interés y la asistencia en competiciones, entrenamientos o concentraciones. “Tenemos muchas personas con discapacidad que quieren hacer deporte, pero el material deportivo es mucho más caro. La bicicleta para practicar handbike, por ejemplo, es diez veces más cara. La formación que tienen los técnicos, normalmente, tampoco es específica y se sienten indefensos cuando tienen que entrenar a una persona con discapacidad. Nosotros les ayudamos. Aunque no sea a propósito, la sociedad pone barreras”, añade el coordinador nacional del proyecto. Nadie se puede quedar atrás.
Ilusión olímpica y paralímpica, “sin distinciones”
Madrid, tampoco. “La Comunidad no se puede quedar al margen de este proyecto, que es una forma de ilusionar a la familia paralímpica y olímpica, sin hacer distinciones. Como el tiempo pasa muy rápido, los Juegos están a la vuelta de la esquina. Convertir las ayudas en medallas es muy bonito, pero lo importante es la participación, que ningún joven con discapacidad que quiera ser deportista se quede sin poder serlo”, defendía la Consejera de Cultura, Turismo y Deporte de la Comunidad de Madrid, Marta Rivera de la Cruz, durante el acto de presentación. De momento, el programa ya se ha implantado en la Comunidad Valenciana, Castilla y León, Murcia y País Vasco. Entre los próximos destinos, se encuentran La Rioja y Cataluña. “Hay que detectar el talento oculto, potenciarlo y llevarlo lo más lejos posible”, añadía Rivera de la Cruz. Madrid echa a correr hacia ello.