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NFL

Los Washington Commanders superan al Chelsea como la compra más cara del deporte

El empresario Josh Harris pagará 6.000 millones de dólares a Dan Snyder por el equipo de NFL en una operación en la que está Magic Johnson.

Actualizado a
Carson Wentz, de los Washington Commanders, habla con su entrenador Ron Rivera durante un partido.
Scott TaetschGetty

El mundo del deporte ha asistido en las últimas horaas a la mayor compra de la historia de un equipo en el mundo del deporte después de que se confirmase que Josh Harris, dueño entre otros equipos de los Philadelphia 76ers de la NBA y los New Jersey Devils de la NHL, haya llegado a un principio de acuerdo con Dan Snyder para comprarle los Washington Commanders de la NFL por 6.000 millones de dólares (5.420 millones de euros), a falta de confirmación oficial por parte del propio Harris, la NFL y los Washington Commanders. Una compra en la que, junto a Harris, también han participaro el multimillonario Mitchell Rales y la leyenda de Los Angeles Lakers Magic Johnson, y que ahora espera tener el visto bueno del comité financiero de la NFL y de tres cuartos de los 31 equipos restantes de la NFL.

Esta cifra supera con creces la compra realizada el pasado mes de junio por la familia Walton, fundadores de la cadena de tiendas Walmart, cuando compraron los Denver Broncos de la NFL por 4.650 millones de dólares (4.201 millones de euros) y también supera la mayor compra de la historia de un equipo en el mundo del deporte, cuando el empresario estadounidense Todd Boehly adquirió el Chelsea de Roman Abramovich por 4.250 millones de libras (4.700 millones de euros).

Harris compra los Washington Commanders, un equipo de la NFL que en los últimos meses ha sido noticia más por razones extradeportivas que por sus logros sobre el campo y en especial por los episodios protagonizados por Dan Snyder, señalado por acosar a una empleada del equipo en un hecho por el que la NFL le pidió que dejase el equipo, y la incapacidad de Snyder para construir un nuevo estadio para el equipo. Además, el equipo tuvo que cambiar su histórico nombre de ‘Redskins’ por connotaciones racistas para convertirse en los Washington Commanders y ahora, tras la compra, Harris y Magic Johnson esperan situar a su equipo en la élite de una de las mayores ligas del mundo.