Leanna García, pionera a 140 km/h: “Sabía que en España creían en mí”

El monobob es uno de esos deportes minoritarios, poco seguido por los aficionados al deporte en España, una actividad más característica de la Europa septentrional pero tan espectacular como emocionante para el ojo humano. Este deporte de invierno es la versión individual del bobsleigh o bobsled, que junto al skeleton y luge, es una de las modalidades de descenso en trineo en el que los equipos compiten por realizar el deslizamiento en el menor tiempo posible, utilizando el tiempo agregado de varios recorridos.

Para conocer la idiosincrasia de este deporte debemos retroceder hasta el siglo XIX, cuando en sus orígenes, los adinerados turistas británicos construían a mano sus primeros trineos para descender por las estrechas calles de St. Moritz, Suiza. Aunque no fue hasta 1884, cuando Bradutt construyó la primera pista después de que las autoridades prohibieran estos descensos debido a las numerosas colisiones, pista que hoy en día sigue en uso, albergando incluso los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022. En la actualidad los trineos han evolucionado hasta los luges, bobsleighs y skeletons que conocemos.

En el monobob, es decir, la versión individual del bobsled, se utiliza un trineo de 200 kilos capaz de alcanzar los 140 kilómetros hora, un deporte minoritario y extremadamente caro, tan solo el luge, material indispensable, supera los 30.000 euros, a los que debes añadir los 6.000 de las cuchillas y el propio mantenimiento. Un deporte que ha empezado a abrirse al público femenino bien entrado el siglo XXI, no siendo hasta 2022 cuando comenzó a disputarse la primera prueba femenina. Ahora, Leanna García, se ha convertido en la primera española en participar en esta disciplina en la Copa América 2024, una de las más prestigiosas competiciones de descenso en trineo, en la que terminó en quinta posición, compitiendo contra Canadá y Estados Unidos, dos potencias en este ámbito. “Mi primera carrera no fue muy buena, pero la segunda creo que fue la mejor que he tenido. Ojalá hubiera empujado el trineo más rápido el viernes. Estoy muy contenta con mi quinto puesto, me sorprendió mucho”.

Leanna, quien está aprendiendo a desenvolverse en castellano, nació y creció en Canadá, aunque no ha sido hasta 2024 cuando empezó a competir para la Real Federación Española de Deportes Hielo de Invierno tras efectuar su cambio de nacionalidad, algo que consiguió gracias a la familia de su padre. “No estaba contenta con mi puesto en el equipo canadiense, sentía que merecía más oportunidades, pero nadie parecía creer en mí. Entonces decidí ir al país de mi familia, sabía que creían en mí”. Y aunque la decisión sorprendió al equipo, todos terminaron entendiendo su resolución, por lo que ahora disfruta de hacer historia junto a su nueva ciudadanía: “Me siento honrada y agradecida. Estoy muy feliz de poder hacer esto, amo el deporte y me encanta poder crear otras oportunidades para que más mujeres entren a este deporte desde España”.

García, quien se define como una persona “trabajadora, estudiosa y detallista”, explica el secreto del éxito de su quinto puesto en su debut en la categoría individual de la Copa América, pese a competir con el eje trasero doblado: “He estudiado todas las pistas de trineo, así sé cómo enfocar mi empuje y conducción”, deporte al que dedica entre seis y ocho horas en pista durante la temporada, practicando con el trineo y realizando trabajo mecánico, a lo que hay que sumar las horas de gimnasio. Leanna dejó su oficio para enfocarse plenamente al monobob, aunque también decidió volver a la escuela y complementar su formación con el amor por el deporte, aunque una de sus principales preocupaciones está en el factor económico. El bobsleigh es uno de los deportes más onerosos que existe, por lo que el nuevo ‘fichaje’ de la RFEDH sigue buscando patrocinadores en lo que va ganando galones en su nueva federación.

La musher o guía de trineo, se ve compitiendo en el campeonato del mundo gracias a su quinto puesto en la Copa América, aunque su gran sueño son los Juegos Olímpicos de Invierno de 2026: “Estoy tratando de concentrarme en mi temporada, no quiero presionarme demasiado porque cuando lo hago no rindo tan bien, por lo que voy paso a paso. Me estoy divirtiendo y estoy aprendiendo mucho, y si hago eso, entonces las posibilidades de que vaya a los juegos crecen”.

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