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RUGBY SEVEN | MUNDIAL

Las Leonas se despiden de las medallas ante Inglaterra

La Rosa no dio opción en los octavos de final en Ciudal del Cabo y la Selección femenina cae al cuadro secundario de la cita mundialista.

Actualizado a
Las Leonas se despiden de las medallas ante Inglaterra
NIC BOTHMAEFE

La Selección española femenina de seven no pudo iniciar de la mejor manera su caminar en el Mundial de Sudáfrica al caer derrotada por una intratable Inglaterra (29-5) que cerró, de ese modo, el camino de las Leonas7s por estar entre los ocho mejores combinados del planeta rugby. La victoria sin paliativos de las británicas obliga ahora a España a centrarse en la lucha por alcanzar la novena plaza del torneo que ha empezado a desarrollarse este viernes en Ciudad El Cabo. Su rival en los cuartos de final del Challenge será Madagascar, combinado al que se enfrentará en la mañana del sábado (9:53, hora peninsular).

El equipo que dirige Pedro de Matías no dio en ningún momento con la tecla para frenar el ímpetu y el empuje con el que saltaron al verde las jugadoras inglesas. La velocidad y la potencia que imprimieron a su juego desde el silbatazo inicial hicieron mella en unas Leonas7s que, de algún modo, se vieron sorprendidas por un rival mucho más poderoso y, sobre todo, contundente con respecto al que se midieron por última vez en las Series Mundiales de Toulouse.

El temprano 12-0 que arrojaba el marcador forzó al combinado nacional a nadar todo el tiempo contra corriente, y aunque Ingrid Algar aportó algo de luz en el camino de las hispanas pasado el ecuador del primer acto con su ensayo, tras un genial offload de Marta Cantabrana, el arreón sucesivo del 7s de la Rosa volvió a estirar las diferencias entre ambas escuadras antes del paso por vestuarios (19-5).

España puso toda la carne en el asador en una segunda mitad en la que, pese a intentar vulnerar la línea defensiva británica con patadas a seguir, la falta de frescura para superar a sus rivales en el uno contra uno y de contundencia en el placaje defensivo, permitió a Inglaterra remachar el partido en su tramo final con dos nuevos posados que refrendaron la superioridad del siete sajón a lo largo y ancho de los 14 minutos de contienda (29-5).