La incógnita de Fede Chingotto y Ale Galán
La dupla hispanoargentina, que viene de conquistar el Alemania P2, afronta el tramo final de temporada con opciones de alcanzar el número uno.
La competición no perdona y los resultados mandan. Sin duda, son dos de los mantras que más se repiten en el deporte de élite y que se aplican al pádel profesional, gobernado por los continuos cambios de parejas que, en muchas ocasiones, ni los propios protagonistas saben explicar. Y ni siquiera Galán y Chingotto, que llevan rozando el sobresaliente desde su unión en marzo 2024, se salvan de ellos.
Sobre la dupla hispanoargentina, única capaz de seguir el ritmo de Agustín Tapia y Arturo Coello, la gran incógnita es si les dará para alcanzar el número uno mundial. Especialmente teniendo en cuenta que, de no lograrlo, sería su segundo año consecutivo ocupando el escalón inferior del ranking, lo que podría agotar su paciencia y llevarles a buscar otros compañeros con los que derrocar a los Golden Boys.
Lo que hace dos semanas parecía una lucha perdida después de caer en la final del París Major, se tornó en esperanza para Chingalán el pasado domingo al conquistar el Alemania P2 ante sus bestias negras.
Tras la victoria en Düsseldorf, ambos jugadores reafirmaron su confianza en un proyecto que comenzaba a generar dudas por un parcial que reflejaba un 6-1 en su contra en duelos directos este año (16-6 global). De hecho, cabe recordar que el propio Galán tuvo que salir hace poco a defender a su compañero en una entrevista con Veinte Diez Pádel en la que afirmó que “no veía un mejor drive” que Chingotto y finiquitó los rumores sobre una posible vuelta con Lebrón al declarar que su relación con el Lobo era “inexistente”.
“Tapia y Coello son un equipazo. Nos llevan al límite mental, físico y también en términos de juego. Nos hacen mejores. Agradezco a todo el equipo que tenemos detrás que cree en nosotros, al igual que Ale y yo lo hacemos. Esta victoria solo es un pasito”, declaró Chingotto en tierras alemanas. Por su parte, el Alien fue más allá: “Ganarles es prácticamente imposible, llevan tres años jugando a un nivel impresionante. Para nosotros, esta victoria es un respiro. Vamos a seguir trabajando, los próximos torneos serán más importantes porque habrán más puntos en juego. Tenemos que pelearles la Race esta temporada”.
Actualmente, justo antes de comenzar a competir en el Róterdam P1, la distancia en el ranking entre ambas duplas es de 10.860 puntos, bastante considerable aunque todavía no definitiva a falta de siete torneos entre los que se encuentran tres de gran calado que reparten un total de 5.500 puntos: México Major (2.000), Mundial de Parejas (2.000) y Premier Padel Finals (1.500).
Por el momento, tal y como declaró Galán, su objetivo pasa por superarles en la Race, que premia el rendimiento de la pareja a lo largo de la temporada sin contar la defensa de los puntos del curso anterior que sí refleja el ranking FIP. En este caso, la diferencia entre ambos dúos es de solo 2.080 puntos ya que Tapia y Coello acumulan 12.500 en la clasificación tras conquistar nueve títulos y Chingalán 10.420 al morder chapa en cinco ocasiones.
El resultado en Alemania no indica, ni mucho menos, un cambio de tendencia. Más aún teniendo en cuenta que los Golden Boys han levantado seis de los últimos nueve torneos en juego. Sin embargo, la sensación de dominio sobre el 20x10 en la última final podría indicar el camino a seguir a Chingalán, que vio refrendada la visión que su propio entrenador, Jorge Martínez, desveló a AS: “la distancia entre ambas parejas es mínima”.
Los próximos tres meses del año podrían representan un último tren por el número uno para Chingotto y Galán. De ellos dependerá cómo se resuelva la incógnita que les sobrevuela.
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