Kostomarov, de “crítico” a un posible milagro tras diversas amputaciones
Según la agencia de comunicación TASS, el campeón olímpico, en estado grave tras múltiples intervenciones, tiene “posibilidades de sobrevivir”.
El patinador ruso Roman Kostomarov, de 46 años, campeón olímpico en los Juegos de 2006 (Turín), tiene “grandes posibilidades de sobrevivir” tras atravesar una situación “crítica”, con una neumonía como origen y múltiples operaciones que le han supuesto, entre otras dificultades, la amputación de sus dos pies. “La situación era crítica”, ha reconocido el director del Centro Nacional de Investigación Médica del Ministerio de Salud de Rusia, Sergey Tsarenko, en declaraciones para la agencia de comunicación TASS. Kostomarov, una estrella nacional, fue ingresado en el hospital en enero a causa de una “neumonía grave”. Posteriormente, sería inducido al coma debido a su situación. El inicio de un drama que, en el mejor de los casos, supondrá un cambio drástico en su vida.
Tras abandonar la competición, Kostomarov participaba en espectáculos y exhibiciones. Sin ir más lejos, en Navidad, formó parte de una docena de actuaciones. “Y este es el precio que hay que pagar en la lucha por la vida del paciente. Al resolver un problema, creamos uno nuevo. Como regla general, los trastornos de la microcirculación ocurren en las puntas de los dedos de las manos y los pies y, a veces, en las orejas”, explica Tsarenko en relación a las múltiples amputaciones a las que se ha visto sometido el patinador ruso. De forma explícita, se hace referencia a sus pies, aunque también se mencionan “operaciones” en sus manos. “La bacteria provocada por una infección viral, que se detectó al ingreso, dio señales de que el curso de la enfermedad sería muy difícil, que procedería con necrosis y daño necrótico del tejido subcutáneo y de los músculos. El daño al tejido pulmonar fue total, incluso la ventilación mecánica no nos permitió mantener el oxígeno en un nivel suficiente. Entendimos que los métodos que utilizamos para salvar vidas tienen ciertas posibles complicaciones que pueden requerir corrección quirúrgica en el futuro”, añade el doctor.
Según su esposa, la también patinadora Oksana Domnina, bronce en Vancouver 2010, Kostomarov “sólo” tuvo tos “leve” durante los primeros días de enfermedad. “No se sentía mal, sólo tuvo una tos leve que apareció a principios de enero. No creo que esto sea algo anormal, los deportistas siempre trabajamos, aunque tengamos fiebre, mientras tengamos fuerzas. El 30 de diciembre estaba acostado con una temperatura de 39, y un día después ya estaba actuando. Para los patinadores esta es una situación normal”, detalla. Roman estuvo más de una semana conectado a un aparato de oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO). Luego, las complicaciones empezaron a ser sanguíneas y pulmonares.
Una pareja que seguía
Kostomarov se proclamó campeón olímpico junto a Tatiana Navka, con la que danzó en diferentes etapas. Sin ir más lejos, Navka era la actual pareja de exhibiciones y espectáculos del patinador ruso. En su trayectoria conjunta, entrenados primero por Natalia Linichuk y luego por Alexander Zhulin, consiguieron, además del oro en Turín, tres títulos europeos (de 2004 a 2006) y dos Mundiales (2004 y 2005). Tres años brillantes tras una ruptura temprana. Navka y Kostomarov empezaron a competir conjuntamente en 1998. Un año después, sin embargo, se separarían para volver en el 2000 e iniciar su impresionante ascenso. Hasta el actual drama de Roman, nada les había podido separar de nuevo.