Jorge Martínez: “Soy partidario del punto de oro y del super tie-break en Premier Padel”
El entrenador de Galán, Chingotto y Delfi Brea atendió a AS en M3 Padel Center. “Los aficionados se desconectan con tantos cambios de parejas”, afirmó.
Jorge Martínez (Madrid, 60 años) es una de las voces autorizadas del pádel profesional en España. Ha creado un método de entrenamiento que fabrica números uno, cofundó la M3 Padel Academy, dirige a estrellas como Ale Galán, Fede Chingotto o Delfi Brea y, por si fuera poco, también aporta su experiencia en los micrófonos de Premier Padel como comentarista.
Tras un primer tramo de la temporada exigente, el técnico madrileño atendió a AS en M3 Padel Center para valorar el número uno de Delfi, la situación actual de Galán y Chingotto y los cambios que haría en el circuito profesional.
Delfi Brea ha logrado recientemente el número uno junto a Gemma Triay. ¿Qué es lo que le ha permitido alcanzar ese escalón?
Su determinación, que sin duda es su mejor cualidad. Es una jugadora que, si quiere algo, va y lo hace. Cuando vino hace dos años a M3 Padel Academy y confió en nosotros, dio un cambio importante. Le comentamos que había que cambiar varias cosas relacionadas con la técnica y sus desplazamientos en la pista, y ella lo aceptó como un reto personal. Hay jugadoras más rápidas, más fuertes y técnicamente mejores que ella, pero Delfi ha confiado en el proceso y su voluntad de ser número uno le ha permitido mover montañas. Todo ello sin olvidar que está muy bien acompañada en la pista, ya que Gemma Triay es muy profesional.
De momento, Delfi y Gemma han conseguido el número uno, pero hay otras dos duplas igual de buenas. Claudia Fernández y Bea González me parecen un parejón y todavía no han llegado a su máximo nivel, y de Ari Sánchez y Paula Josemaría no hay mucho que decir porque lo han demostrado. Además, el relevo está asegurado porque viene una camada de jugadoras jóvenes muy buenas como Andrea Ustero, Alejandra Alonso, Martina Calvo, Claudia Jensen o Raquel Eugenio.
Ha comentado la temporada de Defi, a la que entrena individualmente. ¿Cómo valora la de otros jugadores a los que alecciona en su academia como Galán, Chingotto o Fran Guerrero?
Galán y Chingotto van a luchar por el número uno. Tenemos un reto muy difícil e importante que es batir a Tapia y Coello, que son muy buenos y nos dan muy pocas opciones. Sabemos bien hacia dónde vamos. Ambos son conscientes de que hay cosas que mejorar y tienen la mentalidad de querer ser los mejores sabiendo que no lo son.
Por otro lado, Fran Guerrero ha formado una gran pareja junto a Javi Leal. Tiene una gran determinación, pero en ocasiones su exigencia con el compañero es excesiva. Tolera muy poco el error. Es algo que tenemos que mejorar, porque exigir a tu compañero es algo muy bueno, pero hay que saber canalizarlo bien. Hay jugadores top que no ayudan y otros que sí. Un gran ejemplo es Coello, que es muy exigente pero siempre se muestra positivo en sus comentarios hacia Tapia.
Estamos cerca de Tapia y Coello, las distancias son mínimas
Jorge Martínez
Ya que lo ha mencionado, ¿qué les está faltando a Galán y Chingotto para estar más cerca del número uno?
Si ves los últimos enfrentamientos ante Tapia y Coello, el partido se termina decidiendo por un par de puntos. En mi opinión, ellos están compitiendo mejor y aprovechan las bolas de break que tienen. Creo que su sistema de juego está claro, así como la forma en la que encuentran la jugada clave en el momento decisivo y la terminan aprovechando. Ellos tienen un poco más de margen y nosotros tenemos que jugar muy bien durante más tiempo para poder ganarles.
Se trata de una cuestión mental. Debemos poner el foco en aprovechar el momento y cambiar la dinámica de los partidos. Ellos tienen ese poso de saber que, cuando llegue el punto importante, lo van a jugar bien. Si logramos darle la vuelta a esa situación, la confianza pasará a ser nuestra.
El año pasado, hubo un tramo en el que jugamos muy bien contra ellos. El duelo cruzado entre Coello y Chingotto nos daba más rédito y ahora es al contrario. Los números de Coello son los mejores de los cuatro jugadores que hay en la pista. Es el que más winners hace y el que menos errores no forzados comete. Eso te obliga a jugar un partido perfecto. Creo que estamos cerca y que las cosas pueden cambiar; la distancia es mínima.
Ha mencionado en otras entrevistas que Galán era un desastre en sus inicios como jugador. Usted fue su gran valedor, ¿cómo valora su evolución?
Sí, Galán era un desastre (risas). Creo que su mejoría tiene mucho que ver con la confianza que ha tenido en nosotros como entrenadores y también con su deseo de aspirar a grandes objetivos e ir a por ellos. Le doy mucho mérito a lo que ha conseguido.
Cuando era un niño, la bola le ‘andaba’, pero no metía dos seguidas dentro; no tenía consistencia y era muy disperso. De hecho, si algo tiene que mejorar hoy en día es su capacidad de no perder la atención. Tiene los tiros y la capacidad física, pero nuestro objetivo con él es enfocarlo al 100% durante el partido. Eso es lo que marca la diferencia entre ser un jugador excelente o el número uno.
Hay un problema de impaciencia y falta de compromiso en el pádel
Jorge Martínez
¿Qué opinión le merecen los constantes cambios de parejas en Premier Padel?
Hay mucha prisa y poca confianza en los proyectos, algo que para mí es inexplicable. El gran mal del pádel es querer cambiar de compañero para subir un par de puestos en el ranking. Hay un problema serio de impaciencia y falta de compromiso en un deporte que precisamente debería ser de equipo. Para mí, la única forma de arreglar esto es a nivel reglamentario, creando ventanas en las que se permitiesen los cambios de parejas. Por ejemplo, una en enero y otra en junio o julio.
¿Y si los jugadores no están de acuerdo?
No tienen por qué estarlo. Que haya una regla y punto. Para mí, los aficionados se desconectan con tantos cambios de parejas. A todos nos gusta ser de un equipo, como ocurre en el fútbol. A mí por ejemplo me gustaría ser del equipo de Chingotto y Galán porque me identifico con ellos por su forma de jugar y sus valores.
Por otro lado, este vaivén también afecta a los patrocinadores. Es muy difícil que una marca apueste por una pareja si luego se separa a las dos o tres semanas. No es bueno para ellas, porque los jugadores no logran fidelizarse con su imagen.
¿Qué otros cambios introduciría en el circuito profesional?
Soy partidario del punto de oro y, si me apuras, del super tie-break en el tercer set. Si fuera así, cada punto pasaría a ser un ‘penalti’. Creo que el pádel, como deporte, demanda algo más intenso y debería tender a que los partidos fuesen más cortos. Sería mejor para las televisiones y haría que los partidos fuesen pura adrenalina.
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