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BOXEO

Gervonta Davis habla desde la cárcel: “La jueza está loca”

El entorno de Tank compartió una llamada telefónica del boxeador desde prisión en un directo en su cuenta de Instagram. Cumple condena por saltarse la condicional.

Gervonta Davis durante un entrenamiento.
CANDICE WARDAFP

Gervonta Davis (29-0-0, 27 KO) no lo está pasando bien en prisión. El estadounidense fue detenido el jueves por incumplir la condena de tres meses de arresto domiciliario por un caso de atropello y fuga en 2020. Se saltó un semáforo, chocando con un coche y dejando a cuatro personas heridas, incluida una mujer embarazada. Se declaró culpable para evitar la prisión, pero desacató el arresto domiciliario y fue arrestado y obligado a cumplir el resto de la condena en la cárcel. Su entorno ha compartido una llamada telefónica del púgil desde prisión en la que asegura que “la jueza está loca” en su cuenta de Instagram. “Me ha encerrado por comprar una propiedad. Quería que estuviese en un apartamento de una cama y que nadie me visitase”, explica Tank.

Los problemas con la ley de Gervonta Davis cada vez van a más. Ya tuvo problemas en febrero de 2020, por dos cargos de agresión de su exnovia, que finalmente quedaron archivados. También fue detenido a finales de diciembre del año pasado por una presunta violencia doméstica, con agresión y daños corporales, a la madre de su hija. Fue puesto en libertad bajo fianza, y compartió una imagen, que borró posteriormente, en la que se defendía de la acusación, asegurando que algunos medios habían hecho una campaña para desprestigiarle.

El caso que le ha llevado a prisión fue por atropello y fuga, también en 2020. Tank celebraba su cumpleaños, y cogió el coche con el permiso de conducir caducado. Se saltó un semáforo y chocó con otro vehículo, que quedó destrozado y con sus cuatro integrantes heridos (entre ellos una mujer embarazada). Se fugó de la escena del accidente y no avisó a nadie. Davis se declaró culpable de cuatro delitos de tráfico para evitar la prisión, y fue condenado a 90 días de arresto domiciliario, 200 horas de servicios a la comunidad y un periodo de tres años de libertad condicional.

Pero no ha conseguido mantenerse alejado de la cárcel. Gervonta fue detenido el jueves en Baltimore por saltarse el arresto domiciliario y la jueza le hizo ingresar en prisión a cumplir el resto de la condena ahí. Y parece ser que no está llevando bien su estancia encerrado. Su entorno ha compartido una llamada de Tank desde la cárcel en un directo de Instagram desde su propia cuenta. “Tío, solo quiero que la gente sepa que esta jueza está loca. Me ha encerrado básicamente porque compré una propiedad. Hice todo lo que estaba en mis manos para escuchar a mis abogados. Escuché a todo el mundo. Está molesta porque compré una propiedad. Por eso estoy en la cárcel”, se quejaba el estadounidense, “Ella quería que me quedase en un apartamento con una cama y que ni mis hijos ni nadie me viniesen a ver, y cosas así. Solo quiero dejar ver la situación porque se está aprovechando de mí. No sé si será una buena o una mala jueza, pero esto no está bien. Tengo que compartir esta situación con todo el mundo”. Su sentencia inició el 5 de mayo, por lo que todavía le quedan dos meses en prisión.