Fiebre por el ‘rucking’, el entrenamiento militar que pone a prueba cuerpo y mente
Este ejercicio se ha popularizado en los últimos años y funciona como sustituto al ‘running’.

Una mochila con peso y ganas de hacer deporte. Eso es todo lo que necesitas para empezar a practicar el ‘rucking’, un tipo de ejercicio basado en los entrenamientos militares. De hecho, es muy posible que muchos ya lo hayan practicado sin ser conscientes de que lo estaban haciendo.
¿Cómo se practica el rucking?
Este popular entrenamiento se basa, simplemente, en ponerse una mochila a la que previamente se le ha puesto un cierto peso y caminar con ella a la espalda. Para muchos, se trata de una rutina ideal si no te gusta salir a correr. Además, trae consigo beneficios tanto físicos como mentales.
Por una parte, el incorporar un peso determinado requiere un esfuerzo mayor que se traduce en un mayor número de calorías quemadas. Asimismo, este ejercicio mezcla el trabajo de fuerza con el de resistencia. Ello ayuda a mantener la forma física y a tonificar distintos grupos musculares, tanto del tren superior como del inferior.
Por otra parte, el ‘rucking’ también aporta todos los beneficios a nivel mental de cualquier otra actividad física: libera endorfinas (hormona de la felicidad), reduce el estrés, la ansiedad y ayuda a aumentar la autoestima. Sin embargo, hay algunas recomendaciones a tener en cuenta para practicar este tipo de entrenamiento de manera correcta.
Pese a ser un ejercicio de bajo impacto sobre las articulaciones, es importante evitar hacer distancias demasiado largas o poner un exceso de peso en la mochila. Del mismo modo, generalmente se recomienda no correr al hacer ‘rucking’, puesto que con andar es suficiente y, además, podría causar lesiones.
El peso que debes añadir en la mochila, clave del rucking
No hay un peso fijo o determinado para llevar a cabo este ejercicio. El número de kilos que añadas a la mochila siempre va a depender de la condición física y edad de cada uno. No obstante, la marca de equipamiento deportivo Decathlon aconseja que “las primeras veces que salgas a practicar rucking no cargues tu mochila con más del 10% de tu peso corporal”.
Así, recomiendan ir paulatinamente añadiendo un 10 o un 15% cada semana o cada dos semanas si todo va bien. Y también resulta importante entrenar hasta llevar un máximo del 25% de tu peso corporal.
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En definitiva, el ‘rucking’ es un buen ejercicio que puede ayudar a perder peso y sentirse mejor. En cambio, como en muchas otras actividades físicas, hay que tomar ciertas precauciones para no tener imprevistos o lesiones físicas.
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