Esta es la razón por la que Mike Tyson le dio un mordisco a Holyfield: “Lo volvería a hacer”
El 28 de junio de 1997, el boxeador estadounidense mordió y seccionó ocho centímetros de la oreja de su rival en pleno combate.
Mike Tyson nunca pasa de moda, y casi 40 años después de su debut como boxeador profesional, su nombre sigue acaparando las portadas de todo el mundo. A sus 58 años, ‘Iron Mike’ ha decidido volver al ring para pelear contra Jake Paul, y aunque el combate podría parecer una simple exhibición, Tyson ha dejado claro que se lo tomará en serio.
Una de las razones por las que todo lo que rodea a Mike Tyson genera tanta expectación es porque, con él, nunca se sabe qué puede ocurrir. Tigres como mascota, problemas con la justicia y unas cuantas polémicas más han acompañado siempre la carrera del estadounidense, que además de ser uno de los mejores boxeadores que se recuerdan, es una de las personas más excéntricas de las últimas décadas.
El mordisco en la oreja a Holyfield
Uno de los momentos más recordados de Mike Tyson tuvo lugar el 28 de junio de 1997. Ese día, el neoyorquino se enfrentaba a Evander Holyfield, quien le había destronado siete meses antes, y en juego estaba el Mundial WBA del peso pesado. La pelea paró el mundo y se convirtió en la mejor pagada del momento. Tyson se embolsó 30 millones de dólares y el campeón 35.
El combate llegó muy caliente, ya que Mike se sintió robado en el primer combate al considerar que Holyfield debía haber sido castigado por entrar con su cabeza. La tensión aumentó cuando en la revancha Holyfield siguió usando la misma estrategia para descentrar a su rival.
En el tercer asalto, y aprovechando un clinch, ‘Iron’ mordió al campeón, quien comenzó a saltar de dolor mientras su oreja comenzaba a sangrar. Y no fue un pequeño mordisco: Tyson le arrancó ocho centímetros de cartílago de la oreja en pleno combate. La confusión fue total, y nadie entendía qué había ocurrido hasta que las cámaras desvelaron qué había sucedido.
Por qué le mordió
Quizás una de las cosas más preocupantes sobre el incidente es que Tyson nunca se mostró arrepentido. Años después del combate, en una entrevista en Fox News, ‘Iron Mike’ aseguró que lo volvería a hacer en caso de que Holyfield “volviera a hacer lo que estaba haciendo para ser mordido”. En palabras del propio Tyson: “a veces pienso ‘no, nunca más lo haría, pero en realidad podría hacerlo de nuevo”.
Cuando le preguntaron por los motivos del mordisco, Mike Tyson explicó que le había mordido “porque quería matarle”. Añadió que en el momento del combate estaba muy enfadado por el juego de su rival con la cabeza. “Bueno o malo, no voy a dejar que nadie se lleve mi gloria”, concluyó el púgil.
Sanción a Mike Tyson
Más allá de la descalificación del combate, a Tyson se le retiró la licencia y fue sancionado con un año y medio sin poder boxear. Además, tuvo que pagar una multa de unos 3 millones de dólares. Sin duda, un momento que quedó para la historia y que incluso Jake Paul ha recordado en la previa del combate entre ambos.
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