España se pega un atracón de buena mañana a costa de Sudáfrica

La vida sigue igual. Y es capicúa. Concluía el Europeo de Croacia, el pasado 16 de enero, con un gol (golazo) de Álvaro Granados para colgarse el oro, y el mismo ‘killer’ abría este lunes a primerísima hora la cuenta anotadora en los Mundiales de Doha, donde el objetivo de España no es otro que terminar de nuevo, el próximo sábado 17, de nuevo en lo más alto del podio. El camino comenzó de la forma más cómoda posible, con un paseo ante Sudáfrica.

Encendió la Selección masculina de waterpolo los motores, que deben afinar progresivamente hasta ofrecer el mejor rendimiento en la segunda semana de competición, aunque viendo el resultado de este debut cualquiera diría que está ya entonadísima. La razón estriba en el bajo nivel de los africanos. Así, el primer cuarto finalizaba ya con un irreversible 1-6, con otro de Granados, dos de Miguel de Toro y más de Felipe Perrone y de Sergi Cabanas, además del penalti transformado por Jonathan Swanepoel ante Edu Lorrio, portero titular este lunes igual que en el último cuarto de la final europea, y celebrado por Farouk Mayman, a quien se lo hicieron, como si de un título se tratara.

De nuevo Granados, burlando a la zaga de Sudáfrica, abrió la lata del segundo cuarto, en el que ya se empezaba a barruntar si España sería capaz de emular el resultado entre ambos combinados en los pasados Mundiales, un contundente 27-6 entonces para los de David Martín. Las paradas continuas de Lorrio y el 1-8 de Marc Larumbe, de penalti, hacían imaginar algo así. También los siguientes goles de Perrone, De Toro, Bernat Sanahuja, el doblete de Unai Biel, y así, el 1-13 con el que se alcanzó la media parte, y un aplastante 87% de eficacia en los disparos.

Ampliar

Como si de un amistoso se tratara, cambiaron ambos porteros en el tercer periodo, con Unai Aguirre entrando en España y por Sudáfrica un Gareth May que inmediatamente se estrenó recibiendo el 1-14, obra de Unai Biel. Y continuaron cayendo las dianas en los siguientes minutos –un Fran Valera que no estuvo en el Europeo, Álex Bustos, Blai Mallarach…–, del mismo modo que la defensa se mostraba férrea, contundente, para secar a un rival temeroso.

Con el 1-17 se inició el cuarto final, que no tuvo mayor historia que la de un combinado estatal que jugó a disfrutar y que fue ampliando ese marcador, aun no llegando a igualar la cuenta anotadora (ni los goles recibidos) del choque en Fukuoka. Convirtió Sven van Zyl el primer tanto en jugada de Sudáfrica, secundado después por Swanepoel y de nuevo Van Zyl que de pronto se vio con un ‘hat-trick’, pero mantuvieron la distancia entre Bustos, Granados, Mallarach y Biel, éste con un póquer de dianas, para ese definitivo 5-21 con el que cerró el debut.

Croacia, otra vez, este miércoles

Y como la vida sigue igual, el subcampeón continental Croacia será el siguiente adversario de una Selección española que tendrá en ese enfrentamiento del miércoles a las 17:00 la clave que busca en primera instancia: ganar para quedar primera de grupo, y así saltar directamente a los cuartos de final de esta gran cita, en la que persigue superar el bronce de los pasados Mundiales de Fukuoka. O lo que es lo mismo, reeditar el oro de hace año y medio en Budapest. Ahí es nada. Pero este equipo es capaz de todo.

Los Mundiales Acuáticos, en as.com.