El Senado aprueba nuevas enmiendas a la Ley del Deporte
El texto volverá al Congreso para que pueda entrar en vigor. “No debe haber discrepancias en la necesidad de renovar esa ley”, dice Iceta.
El pleno del Senado aprobó este martes el proyecto de Ley del Deporte con la incorporación de más de una veintena de enmiendas, que se remitirán de nuevo al Congreso para que se pronuncie y que el texto pueda entrar en vigor. Antes de la votación final, que respaldó la iniciativa con 133 votos a favor, 109 en contra y 20 abstenciones, la cámara Alta rechazó la propuesta de veto a la Ley presentada por Vox (3 votos a favor, 153 en contra y 106 abstenciones) y votó a continuación a favor de incorporar parte de las 252 enmiendas remitidas por los grupos. Esto obliga a que el texto regrese al Congreso, donde fue aprobado en el pleno el pasado 3 de noviembre.
“En puntos concretos puede haber diferencias, pero no debe haber discrepancias en la necesidad de renovar esa ley y dar al deporte español mejores instrumentos para avanzar”, dijo el ministro de Cultura y Deportes, Miquel Iceta, antes de la votación, a la que asistió también el presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), José Manuel Franco. El ministro destacó la necesidad de renovar una norma que rige desde hace 30 años y se mostró convencido de “hacer un buen servicio al deporte”, con una ley que el Gobierno debe aprobar antes de fin de año por estar supeditada a los fondos de recuperación de la UE.
“Me parecería injusto que de este proyecto lo que quedara es una discusión sobre la presencia internacional de selecciones autonómicas. He visto intervenciones a las que se les queda corto y otras apocalípticas. Entiendo que el punto de equilibrio que se ha encontrado responde a la necesidad del deporte en nuestro país”, añadió. En este punto destacó que “la ley contempla dinámicas potentes como las del deporte femenino, el deporte inclusivo o la no discriminación de las personas LGTBI”, que “son temas suficientemente importantes que justificarían su aprobación”. “Entiendo que el punto de equilibrio que se ha encontrado responde a la necesidad del deporte en nuestro país”, añadió.
Entre las enmiendas incorporadas figuran las del cinco del grupo socialista, como la que introduce la creación de un programa para ayudar a entidades deportivas a obtener financiación privada para eventos y medidas de especial protección en materia de conciliación. Igual que en el Congreso el debate de hoy giró en gran parte sobre la opción que la ley da para que las selecciones autonómicas de deportes con arraigo histórico y social puedan competir internacionalmente, con el parecer en contra de senadores como los del grupo Populares, Ciudadanos, Vox y Esquerra.
Antonio Román (PP) lamentó que el consenso logrado inicialmente se haya roto porque el Gobierno ha “rebasado algunas líneas rojas” con la medida sobre las selecciones autonómicas, cuando esa representación “corresponde a la selección española”, y su compañera de formación Mercedes Cantalapiedra denunció que solo han tenido 24 horas para estudiar 252 enmiendas porque “si la ley no está publicada el 31 de diciembre nos quedamos sin fondos”.
”Habríamos apoyado la ley pero el Gobierno en el último minuto decidió convertirla en una moneda de cambio para conformar a sus socios, aunque yo creo que no los han conformado, que los han engañado”, señaló portavoz de Ciudadanos, Miguel Sánchez, mientras Yolanda Merelo, de Vox se opuso a una ley “pactada con los enemigos de la nación” al defender su propuesta de veto. “El artículo 48 sobre las selecciones autonómicas es un disparate jurídico, solo les interesa lo que exista en sus delirios independentistas y romper España”, insistió esta, que también cuestionó el cambio de competencias del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD), en perjuicio de deportistas y clubes y la participación de personas trans en competiciones femeninas.
Como réplica del grupo socialista la senadora Julia María Liberal se mostró sorprendida de que el veto de Vox “lo haya hecho una mujer” y aseguró que “la ley no incluye consignas ideológicas tóxicas y reconoce el derecho al deporte como actividad esencial”. ”Dejen de meter miedo con la participación de las personas trans en competición, en esta ley no se va a meter en eso que se regulará en las federaciones internacionales que son las que tienen la competencia”, añadió Liberal.
Entre otras voces críticas también se escuchó la de Esquerra, a través de la senadora Idurre Bideguren, por un texto que “abre la puerta en casos de deportes de arraigo histórico, pero “da portazo a una reclamación histórica de nuestro país”, y la de Pablo Gómez, de Más Madrid, quien, pese a dar su apoyo, consideró “decepcionante” que la ley no acabe con “el mensaje perverso de que el deporte está en venta” tras aludir a la celebración de competiciones en terceros países como la Supercopa de fútbol y proyectos como la Superliga.