El retorno de Aleksandre Topuria

El apellido Topuria es sinónimo de éxito. Ilia tendrá su primera pelea estelar en la UFC el 24 de junio en Las Vegas, y su hermano, Aleksandre, regresará a los octágonos el 20 de mayo en Madrid, con la mirada puesta en la compañía más grande de las MMA en todo el mundo. El Conquistador volverá después de un año de su última victoria para brillar en este deporte. “Pienso que, si Dios quiere, después de esta pelea quizás estoy dentro de la UFC. Tengo varias ofertas de otros eventos grandes como Bellator, pero mi objetivo es llegar a la UFC”, explica el hispanogeorgiano.

La pasión por los deportes de contacto en la familia Topuria viene desde que ambos hermanos eran pequeños, cuando aún vivían en Georgia. “Todo comenzó un día en el instituto, haciendo el loco, peleándome con alguien. De repente, me interrumpe el entrenador de educación física, que en ese momento era el entrenador de lucha”, relata Aleksandre. El entrenador supo ver el potencial que ya tenía desde tan temprana edad. “Me miró, me separó y me dijo: ‘Tranquilízate. En ti veo que tienes un futuro tremendo en el deporte de contacto, de la lucha. Me gustaría ser tu entrenador, me gustaría llevarte a las Olimpiadas y que un día seas campeón olímpico’”, le cuenta el hispanogeorgiano a AS. Fue a un club de lucha con su hermano Ilia y empezaron a entrenar.

Cuando llegaron a España, buscaron un gimnasio para seguir entrenando en lucha libre olímpica, pero no tuvieron suerte, en este país no es un deporte tan seguido. Los hermanos decidieron hacer judo. “Un día, por casualidad, mi madre se encuentra con un chico que tenía las orejas de coliflor y le preguntó. El chico era cinturón negro de Climent Club”, comenta. El deportista le recomendó que fuesen al gimnasio de MMA a probar, ya que, al venir de practicar lucha, tendrían un buen “background”. “Fuimos mi hermano y yo a Climent Club y nunca salimos”, asegura Alex. Los hispanogeorgianos empezaron a practicar este deporte en Climent Club, de la mano de Jorge Climent, en Alicante, y siguen entrenando ahí a día de hoy. Su primera competición en MMA fue en 2014 en Barcelona, y tanto él como Ilia ganaron en el primer round.

Aleksandre sumó dos victorias y, en mayo de 2015 firmó su primera derrota por KO en el tercer asalto contra Ivo Ivanov. Después de perder esta pelea, se mantuvo alejado de la competición por seis años. “Me senté y dije: ‘Bueno, chico, ¿Cuál fue el fallo? ¿Por qué perdiste la pelea?’. Porque yo sabía que era mucho mejor que él. Yo me sentía muy superior a él, así que me di cuenta de que lo que me faltaba que era parte del striking, parte del ritmo. Entonces, tomé la decisión de empezar a entrenar boxeo, de mejorar mi striking y todo esto”, relata. Incluso llegó a hacer un combate de boxeo. También empezó a entrenar a su hermano Ilia, mientras buscaba peleas. “Durante todos estos años podía haber peleado en MMA, pero tuve como una lucha interior. Exterior también, tenía una presión de fuera, pero también una presión por dentro”, cuenta Aleksandre. Pero las ganas de competir seguían ahí. “Es como que se me vino todo muy encima, se me hizo todo muy grande. Me costó volver. Pero bueno, después de todo esto, superé mi lucha interior, luché contra mis diablos, les superé y aquí estoy”, celebra el hispanogeorgiano.

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El Conquistador tuvo dificultades para encontrar rivales a los que enfrentarse. “Los promotores saben que aquí en España me cuesta un poco buscar las peleas. Tengo un 4-1, pero la gente me toma como un 15-0″, explica Aleksandre. Regresó a los octágonos en 2021 con victoria por KO en el primer asalto ante Luca Tenório, y en 2022 se impuso con el mismo resultado a Alberto Ibáñez. Y ha llegado el momento de volver al ring de nuevo. “Las sensaciones son enormes, son muy grandes. Tengo muchísima motivación, estoy supermotivado. Siento responsabilidad y eso me motiva”, asegura. El 20 de mayo se enfrentará a Johan Segas en Madrid. Conocido como El Silenciador, tiene un récord de 3 victorias y una derrota. “Tengo la plena confianza de que voy a acabar con él, es lo que yo siento”, dice el hispanogeorgiano. La preparación está siendo muy dura, a la altura de los objetivos. “Tengo un trabajo que cumplir y estoy trabajando para ello día y noche. 24 horas. Para mí no existe combate fácil, no existen para mí los entrenos de la misma manera. Estoy al 100% en cada entrenamiento, pensando como si fuera mi último combate”, asegura.

El objetivo es claro: la UFC. “No quiero anticiparme, no quiero decir cosas que quizás no pasen, pero yo pienso que, si Dios quiere, después de esta pelea quizás estoy dentro de la UFC”, nos cuenta Aleksandre. Le han llegado ofertas de grandes empresas como Bellator, pero tiene claro su objetivo y luchará por él. “Hay conversaciones y hubo conversaciones”, asegura. El Conquistador retó en dos ocasiones a Nathaniel Wood, e incluso, cuando Ilia peleó con Jai Herbert en Londres, le ofrecieron pelear con él, ya que cayó su rival. “Era en 61 kilos y dije: ‘Ok, yo acepto la pelea. Dadme la pelea’, independientemente de que tenía que bajar 11 kilos. Pero yo dije que, si me aceptan entregaré mi vida para bajar el peso y pelear”, relata el hispanogeorgiano. Pero no pudo ser. También le ofrecieron pelear en Francia, pero la pelea cayó. “Sé que ellos ahora mismo tienen muchísimo más las de perder conmigo que yo. Porque un chico que es de buen calibre, bueno yo sé de qué calibre soy, no sé lo que ellos piensan, pero un chico peligroso, que me ven y dicen: ‘Probablemente me va a ganar, no lo voy a arriesgar’. Y yo les entiendo”, comenta, “Lo digo con toda mi humildad del mundo, un tío listo no acepta la pelea”. Y, una vez dentro de la UFC, tiene claro a quién se quiere enfrentar: Sean O’Malley. “Yo en cada pelea, lo retaré. Sé que cada vez me acercaré más y algún día le tocará aceptar. Y definitivamente sé que voy a acabar con él antes del tiempo”, asegura.

Aleksandre estará con Ilia en su gran momento, su primera pelea estelar contra Josh Emmett en Las Vegas el 24 de junio, como ha estado con él toda su vida. “No es que yo entrene con él, es que nos criamos juntos. Y tengo la suerte de que compartimos el mismo deporte, el mismo estilo de vida... Es como una manzana cortada por el medio”, explica sobre su relación con su hermano. Tiene claro el resultado: KO en el primer asalto. “En El Matador, toda la confianza”, asegura Aleksandre que ya ve campeón a Ilia. “Definitivamente sé que algún día llegará el momento, cuando él se encierre en la jaula con el campeón y sé que le arrebatará lo que es suyo”, garantiza.