NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

POLIDEPORTIVO

El lío de la nueva Ley del Deporte con las selecciones vascas

Fuentes especializadas en el tema consultadas por este periódico aseguran que la normativa internacional impedirá su participación en competiciones.

El lío de la nueva Ley del Deporte con las selecciones vascas
Diario AS

La nueva Ley del Deporte ya trajo cola en la parte que tocaba al fútbol y, una vez más calmadas esas aguas, empiezan a bajar revueltas de nuevo por la enmienda introducida en ella para reconocer la posibilidad de que las selecciones vascas de deportes con “arraigo histórico y social” participen en competiciones internacionales.

Esta fue acordada a última hora por el PSOE y el grupo parlamentario vasco, que componen PNV y EH Bildu, y anunciada este martes. La promesa del reconocimiento había quedado sellada previamente en el pacto de investidura entre los socialistas y los nacionalistas vascos.

Las reacciones no se han hecho esperar y son heterogéneas. Desde el PP vasco, por boca de su presidente, Carlos Iturgaiz, califican la enmienda de “error histórico”. “Esta ley abre un camino que es fundamental con esta transaccional, porque es el mundo del deporte el que así lo que exige”, apuntó por su parte este martes el portavoz del PNV, Andoni Aguirretxea. Mertxe Aizpurua, la de EH Bildu, aseguró que “se ha dado un paso con lo de arraigo, aunque es un camino muy estrecho”.

AS ha intentado contactar con los presidentes de las federaciones de pelota vasca y surf, dos deportes en los que ese citado arraigo histórico y social puede ser más evidente. Julián García, el de pelota, ha rehusado valorar este asunto por el momento, mientras que Carlos García, el de surf, no ha podido atender el requerimiento por asuntos personales.

Sin embargo, fuentes del mundo federativo aseguran a este diario que la enmienda se trata de “un gesto de cara a la opinión pública”. Según las mismas, los estatutos de las federaciones internacionales impiden que dos federaciones distintas representen a deportistas del mismo país en una competición internacional, así como que lo haga una federación de un territorio no reconocido como nación por la ONU.

Pero también existiría la posibilidad de que las federaciones internacionales, mediante votación de sus organismos rectores, aceptaran hacer una excepción a esa normativa. En ese caso, y siempre con el visto bueno del Consejo Superior de Deportes, podría darse el caso de ver a deportistas competir bajo bandera vasca.

Esto ya ocurre en el surf, un deporte en el que la Federación Vasca, fundada en 1989, precede a la española, constituida 1997. La World Surfing League presenta a los surfistas vascos con su insignia, igual que a los de las Islas Canarias o a los de Hawái, que es uno de los 50 estados estadounidenses.

Así aparecen los surfistas vascos en la web de la World Surfing League.
Ampliar
Así aparecen los surfistas vascos en la web de la World Surfing League.WSL

En cambio, la Federación Vasca de Pelota nunca ha conseguido que se admita su adhesión a su homóloga internacional. La última solicitud rechazada fue con motivo de los Mundiales que se disputan estos días en Biarritz (Francia). Como se relataba anteriormente, la FIPV recoge en sus estatutos que sus integrantes deberán corresponderse con estados independientes.

De producirse una participación por separado de deportistas españoles y vascos en alguna competición internacional, en ningún caso sería la primera vez que ocurre algo así. Hay que recordar que Escocia, Gales o Irlanda del Norte no juegan bajo bandera británica en el fútbol (en este caso, las respectivas federaciones son más antiguas que la FIFA) o el rugby, aunque sí que se aglutinen todos sus atletas en un solo equipo de cara a los Juegos Olímpicos. Lo mismo ocurre con el golf, que tiene a Escocia como miembro de la Federación Internacional, o en el lacrosse, en el que la Confederación Iroquesa, un grupo de tribus nativas de norteamérica, tiene su propia representación pese a no conformar un país como tal.