El Betis sorprende al Barça para salir del descenso en la vuelta de Ferrao

Miles de personas abarrotando las gradas del Palau Blaugrana. Máxima expectación. Nadie se lo quería perder. Balón al círculo central, brazalete de capitán en el brazo y… la Pantera de Chapecó volvía a tocar balón en partido oficial. Ferrao, Balón de Oro en las tres últimas ediciones, regresaba ocho meses después a las pistas tras superar su lesión en el tendón de Aquiles, y lo hizo con un sabor agridulce: gol y derrota. En un partido de alternativas en el que ambos equipos tuvieron ventaja en el marcador, el Real Betis fue más efectivo en los momentos decisivos para doblegar al Barça (2-4) en su visita a la Ciudad Condal. Los verdiblancos salen momentáneamente del descenso y permiten a ElPozo la posibilidad de igualar al Barça en lo más alto de la tabla en caso de derrotar al Palma Futsal el próximo domingo.

Pese al emotivo ambiente, el Betis saltó al 40x20 del Palau sin complejos, conscientes de la enorme necesidad de sumar de tres en tres para salir del descenso. Así las cosas, fruto de un tramo inicial en el que encadenaron varias ocasiones, los verdiblancos abrieron la lata con un golazo de Lin. De espaldas a portería, una de las leyendas de nuestro fútbol sala ejecutó un taconazo soberbio que sorprendió a Feixas. El Betis siguió haciendo mucho daño en cada contragolpe, pero los azulgranas se sacudieron el agobio visitante con la mejor fórmula posible: el gol. Erick hizo el empate con una bonita vaselina, aprovechando un gran envío de Catela, minutos antes de que las gradas culés se vinieran abajo. Ocho meses después, Ferrao volvía a marcar, además, como mejor sabe, al primer toque tras recibir un cambio de orientación de Matheus.

Antes de enfilar el camino de los vestuarios (mención especial para Roger García, que se convirtió en el debutante más joven de la historia de la sección con 16 años y 38 días), el encuentro entró en una fase de frenesí. Rafa López hizo el 2-2 al rematar sin querer un centro-chut que llegó desde la banda. Con fortuna o sin ella, lo cierto es que los béticos merecían el empate, máxime cuando el Barça se libró de una nueva desventaja en el marcador gracias al poste que evitó el tanto de Pablo Muñoz. Al filo del intermedio, más agitación. Primero, los colegiados anularon un gol del Barça por mano de Adolfo en el remate. El colomense reclamó que impactó el balón con la cara, pero fuera como fuere, lo cierto es que el tanto no subió al luminoso. Lamentablemente, tampoco un disparo de Antonio que habría significado uno de los goles de la temporada. El cierre culé disparó con violencia desde su campo con el tiempo casi cumplido, pero el larguero repelió el cuero.

Tal como dictaban las estadísticas, el promedio de 2,5 goles a favor en la presente liga no eran un buen presagio para el Betis. Pero nada más lejos de la realidad… Los verdiblancos recuperaron la ventaja en los primeros compases del segundo tiempo con un tanto de Carrasco, que persiguió su propio rechace tras una parada de Feixas en primera instancia. Pero fue en el 31′ cuando llegó la jugada que decidió el choque. Coelho vio la roja directa tras propinarle una patada a Gustavao sin el balón de por medio, tras haber derribado al jugador bético. En ese lapso de dos minutos con un jugador más en pista, el Betis hizo valer su superioridad numérica para anotar el 2-4, obra de Rafa López. La férrea defensa andaluza para contrarrestar el portero-jugador del Barça, y el poste que evitó el posible 3-4 de Catela, hicieron el resto. El codiciado título honorífico de campeón de liga regular, que otorga ventaja de campo en todas las eliminatorias del playoff, está más vivo que nunca.

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