Catela remonta ante Osasuna para meter al Barça en semifinales de Copa

“Xota, Xota, Xota”, se escuchaba en las gradas del Palacio de los Deportes de Cartagena, cántico que culminaba en un atronador golpe de bombo. De los ánimos de la afición navarra también se contagió la del Manzanares y otros equipos, conscientes de que el sorpresón de la Copa de España podía llegar a las primeras de cambio. Sin embargo, el Barça se alzó sobre ese territorio hostil gracias a la figura de Catela. Con un golazo que incluyó una ‘croqueta’ que habría firmado el mismísimo Andrés Iniesta, el gaditano certificó su particular doblete para darle la vuelta a un tanto inicial de Dani Saldise que mantuvo a Osasuna Magna con ventaja en el marcador durante la mayor parte del encuentro (2-1). Vuelta a casa con la cabeza bien alta, pero derrota igualmente dolorosa para el conjunto navarro.

En los primeros compases de la primera mitad, el Barça marcó el ritmo. El Osasuna puso la contundencia, tanto en su área como en la contraria. Adolfo tuvo en sus botas la posibilidad de abrir la lata, pero Asier le rebañó el cuero con el pie saliendo de su área. Máximo riesgo, plena efectividad. Tres minutos después, en el 7′, quien se adelantaba en el marcador era el conjunto navarro. Dani Saldise recibió en el costado izquierdo, se deshizo de Coelho y cruzó el cuero con precisión milimétrica ante Dídac. Al favorito, líder de la Liga, subcampeón de la Copa del Rey y clasificado para la Final Four de Champions, le tocaba remar desde bien temprano.

El guion se mantuvo en los siguientes minutos, con un Barça espeso en la finalización. Ahí se notaron los pocos minutos de Pito en pista, que llegó a Cartagena entre algodones por sus recientes lesiones. Dyego y Catela fueron los más inspirados en esa faceta, pero cuando no era Asier, aparecía Saldise para tirarse con el alma a taponar cualquier lanzamiento. El nueve navarro, omnipresente. Cuatro décimas quedaban para el descanso cuando el choque estuvo a punto de dar un giro inesperado, por lo visto hasta entonces. Dyego ejecutó un saque de esquina que Pito mandó para adentro con un gran testarazo. Ante la duda, los colegiados revisaron la acción en el VAR y determinaron que el gol no entró en el tiempo reglamentario. Con la ventaja de Osasuna, por la mínima, los jugadores enfilaron vestuarios.

Catela de mi vida

A Osasuna le ocurrió lo peor posible tras la reanudación, que Catela reciba un balón completamente orientado a portería para fusilar con su zurda. Y eso hizo el gaditano, que puso la pelota en la escuadra para devolver las tablas al luminoso. Los últimos minutos fueron frenéticos, un auténtico correcalles. No podían faltar los tintes broncos. Esencia copera. Saldise pudo restaurar la ventaja para Osasuna, pero Feixas evitó el que podía haber sido el gol de la Copa en caso de que su taconazo hubiese entrado. Entre medias, los colegiados volvieron a acudir al VAR para revisar un posible penalti sobre Toni Escribano que no concedieron.

La tensión se había disparado en los últimos momentos. Con el Barça abusando del uno contra uno, los de Miguel Hernández se sentían relativamente cómodos. Eso sí, hasta que apareció Catela. A falta de dos minutos para la conclusión, el gaditano se sacó de la chistera una croqueta para sentar a su par, y un disparo cruzado inapelable. Genio. En los últimos instantes, el nerviosismo se apoderó de los culés. Pito vio la roja directa por protestar desde el banquillo (podrá jugar las semifinales) y Jesús Velasco se vio obligado a atacar con portero-jugador para suplir la inferioridad numérica. Finalmente, con más sufrimiento que brillantez, el Barça sobrevive en la Copa.

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