Arturo Montes, primer patrón con discapacidad en la Copa del Rey MAPFRE

Para Arturo Montes (09-10-1972, Sevilla) no hay límites. Solo retos, desafíos. Ya superó algunos cuando fue a bordo del Estrella Damm y levantó dos títulos de Copa del Rey MAPFRE (1998 y 2018) y ahora, en esta 41° edición ha querido ir un paso más allá: es el primer patrón con discapacidad en la Copa. Suyo es el proyecto del Ybarra-Befesa, que compite en la clase ORC4, y va a bordo son seis tripulantes más entre los que se incluyen uno de sus hijos (Alfonso), mujer ( y hermano (Paco). “Me dio pena separarme del proyecto matriz, que es Estrella Damm, pero hemos logrado tirar adelante este proyecto con empresas de Sevilla de referencia. Estoy muy motivado y doy gracias porque sea una realidad. He participado como regatista, pero siempre tenía la espina clavada de ser el primer protagonista. Con esto quiero demostrar que se puede competir de tú a tú con personas sin discapacidad. Además, tengo una relación especial con Palma y es que es un sitio al que me encanta volver. Se ha trabajado mucho para estar en primera línea y ser protagonista directo de la competición. Estoy con muchas ganas y quiero acabar con todas las dudas”, comenta a AS en los pantalanes del Real Club Náutico de Palma.

Arturo Montes siempre ha estado vinculado al deporte náutico, gracias a sus padres María Luisa e Ignacio. Empezó en la clase optimist y luego pasó a snipe y windsurf. Eso sí, la vela nunca fue su prioridad ya que su deporte favorito de adolescente fue el rugby. Con 14 años ingresó en El Monte Ciencias y en este conjunto permaneció durante 14 temporadas. Logró ver ascensos a División de Honor y cómo se levantaron títulos de Liga, Copa del Rey y Copa Ibérica. Eso sí, no dejó de lado el mundo de la vela porque cuando su padre se hizo con el Fast39 Apache IX estuvo involucrado en varias competiciones como la Semana Nàutica de Puerto Sherry (Cádiz), Trofeo Princesa Sofía, Trofeo Príncipe de Asturias y la Copa del Rey. Precisamente, patrocinados por Estrella Damm, se hicieron con la edición de 1998. Y se da la casualidad que en la presente edición, la 41ª, se cumple el 25 aniversario de ese primer título copero de Montes. “Me lo recordó mi padre, que fue quien inició todo esto. Ya somos tres generaciones que venimos y con algún que otro éxito”, sonríe.

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Pero, sin duda, lo que marcó un antes y un después en la vida de este sevillano fue el grave accidente que sufrió en agosto de 2011. Estando con su mujer y dos hijos navegando en su catamarán, el Apache XII, por las aguas de la isla de Culatra, en Olhão (Portugal), decidió bañarse cerca del embarcadero y una lancha le pasó por encima. Las hélices le produjeron graves heridas en todo el cuerpo, sobre todo en piernas y estómago. Fue trasladado de inmediato en helicóptero a un hospital de Lisboa donde estuvo un mes en coma inducido y se le amputó la pierna izquierda. Su fortaleza mental y capacidad de superación le hicieron seguir adelante y, en 2014, cambió su trabajo en la automoción por la fundación de la Asociación IN para el Fomento del Deporte Adaptado. Pasó a practicar, con silla de ruedas, deportes como pádel y tenis. Aunque siguió tirando también hacia el mar y se introdujo en la vela adaptada. Sus conocimientos y pasión le llevaron a hacer historia y es que acabó novenos los Juegos Paralímpicos de Río 2016 en la clase 2.4mR, división monoplaza de vela adaptada. “Ser patrón es un aliciente más poder mostrar que con adaptación y mucho trabajo podemos estar en los sitios de alto nivel que nos gusten”, explica.

Su deporte principal actualmente es el de tenis en silla de ruedas, este 2023 ganó el abierto nacional de Zaragoza, pero siempre tiene la vela en su punto de mira. Y este proyecto del Ybarra-Befesa es el gran ejemplo. Arturo Montes no se cansa de superar límites. Por ello, su barco debe ser considerado, sin duda, uno de los favoritos a hacerse con el título de la Copa del Rey MAPFRE en ORC4. De momento, tras la primera jornada, comparte el liderato con el británico Just the Job al firmar dos segundos y un primero. “El objetivo real es hacer podio, dependemos de las condiciones metereológicas porque nuestro barco es un poco pesado. Necesitamos buen viento, si lo hay, haremos podio y dentro del podio queremos estar en lo más alto, claro”, finaliza.