MMA | ENTREVISTAS
Arkaitz ‘Gudari’, una vida en las MMA: “A mi primer combate profesional fui directo desde el trabajo”
El vizcaíno pelea este sábado en la isla de La Palma en el que será su duodécimo combate profesional. Profesional desde 2012, ha vivido la evolución de las MMA españolas desde dentro.
Arkaitz ‘Gudari’ Ramos es, a sus 35 años, una de los grandes veteranos de las MMA en España, ya más que por su edad, por su bagaje y su dilatada experiencia en este mundo. El peleador vasco, quién afirma que ya está entrando en la recta final de su carrera, volverá a subirse a la jaula este mismo sábado en el evento que organiza WTE en la isla de La Palma.
El sestaoarra ha atendido a AS justo antes de su combate para hablar de su vida dentro de este deporte, de sus experiencias en el extranjero, de la vida después del profesionalismo y de su lucha cosntante por evolucionar en un territorio donde no existe demasiado apoyo en un deporte que aún sigue siendo de nicho.
¿Cómo descubre las MMA?
Yo empecé en el Kwoon Shaolin, en Sestao. En ese gimnasio he estado 10 años. Allí hacíamos Kyokushinkai (un estilo de karate). Un día vino un brasileño a dar una clase de Jiu Jitsu. Yo en ese momento ya había visto algún vídeo de Fedor Emelianenko y eso me gustaba. Empecé a hacer suelo y luego ya me vino a la cabeza pelear en MMA. Fui a ver alguna velada que se hacía aquí en Euskadi y ahí me empezó el gusanillo.
Más allá, ¿Por qué toma el camino de las artes marciales?
Primero hice karate desde pequeñito, hasta los 12 años. Luego, lo dejé por el fútbol como hacemos casi todos para jugar con nuestros amigos. Con 18 volví a retomar los deportes de contacto y bueno, hasta hoy.
¿Su camino al profesionalismo ha sido más bien gracias al talento o al trabajo?
Yo siempre he sido una persona de tirar para adelante. También soy una persona a la que le cuesta mucho aprender, necesito repetir mucho las cosas y a base de entrenar, entrenar y entrenar cada vez fui sacando las cosas hacia delante y demostrando qué podía tener nivel. Lo que nadie puede negar es que le he invertido muchas horas.
¿Su salto a profesional en un momento donde las MMA eran aún muy desconocidas conllevó mucho trabajo a la hora de tomar la decisión?
Para nada. Yo...mi primera pelea la hice porque me enteré que había una velada aquí en Bilbao. Fui donde el promotor y le dije que quería pelear y que si había hueco para mí. Eran todas peleas profesionales y yo no tenía conciencia de lo que eso podía significar o lo que no. Me consiguieron un rival que a priori tenía más nivel y mucho bagaje baje que yo, pero conseguí ganar por KO en el primer asalto. El récord antes no importaba, no sabíamos ni lo que era eso (risas).
De hecho, para esa primera pelea yo ya estaba trabajando y ese día salía de ‘currar’ a las 8 y el evento empezaba a las 9. Fui derecho del trabajo a pelear.
¿El corte de peso existía por aquel entonces?
Nada, nada. Yo en aquella época hacía la bajada a 77 kilos y al día siguiente del pesaje seguía en 77. Bajabas de peso las últimas semanas y nada más.
¿Los estilos de pelea también eran muy diferentes a lo que son ahora?
Antes entrenabamos striking y suelo, yo por lo menos. No teníamos parte de lucha ni nada. Otros a lo mejor tenían otras armas, pero no era como ahora que se entrena todo aplicado a las normas de MMA. Aún así, a día de hoy aquí (Euskadi) sigue sin haber demasiados gimnasios donde se pueda entrenar MMA como tal.
¿Le impacta mucho la evolución de las MMA en España?
Ahora es la hostia. Todo el mundo habla de MMA en todos lados. Antes la gente tenía un desconocimiento enorme cuando hablabas del deporte que practicabas y surgía mucha más curiosidad que ahora, que ya existe un conocimiento básico mucho más extendido. También la gente lo veía como una salvajada y ahora se puede ver casi en cualquier canal de la tele.
¿Guarda un buen recuerdo de esas épocas pasadas?
Desde luego. Por ejemplo, la vez que competí en Brave y enfrentando a Benoit Saint-Denis (actual UFC) fue increíble. Me avisaron con 15 días y ni me lo pensaba. Antes que yo solo había peleado Ilia Topuria en esa promotora, como iba a decir que no a eso. En el calentamiento por ejemplo, yo entonces flipaba con el nivel de lucha que tenían la mayoría. Había algunos daguestaníes. Estaba también Acoidan Duque y joder, eso es otro nivel.
¿Dentro del ámbito español nota que se empiece a alcanzar el nivel de organización de empresas como Brave?
Yo te voy a ser sincero. Como aquel evento de Brave no he vivido nada igual. No sé cuanto se va a evolucionar en los próximos años, pero aquello sigue siendo de otro nivel bajo mi experiencia .
Regresa este mismo sábado a un octógono, ¿Qué nos puede contar acerca de eso?
Peleo este 5 de ocutbre en WTE en la isla de La Palma. Enfrento a Guillermo Ogalla, aunque no te puedo decir gran cosa sobre él. Creo que es un tío que se siente más cómodo en el suelo, pero tire para donde tire yo estoy preparado para lo que haga falta. He mejorado mis puntos débiles y vamos a demostrarlo.
Siendo un tipo con una carrera larga y ya con mucha madurez como peleador, ¿Es posible seguir evolucionando?
Yo sí noto mejoría en ciertas cosas a pesar de ser ya mayor. He mejorado ciertas cosillas para esta pelea y es algo que siempre va a estar en tu mano, pasen los años que pasen.
¿Tiene que salir de Euskadi para buscar el nivel que le proporcione esas mejoras?
Si hace falta. Me suelo ir a entrenar de vez en cuando por ahí. Esta última vez me he tenido que ir a Santander y siempre intento buscar opciones por el norte pero te tienes que mover. Si me quedo aquí solo tengo a mis chavales.
Realmente donde más necesito ayuda es en el apartado de grappling. En todo el tema de K1 y Muay Thai, aquí tengo gente y nivel de sobra para pulir detalles.
¿Esas salidas las ve cómo una inversión o es simplemente un gasto sin retorno?
Lo hago por amor al arte básicamente. Porque me gusta lo que hago, me gusta pelea y porque esto me da la vida. La gente a veces me dice que no tengo vida, pero es que mi vida es esto. Soy feliz y no necesito más. Yo trabajo como taxista, con un horario flexible y de hecho amoldo la jornada a los entrenos. Trabajo con el horario que yo quiero para poder entrenar.
A propósito de su trabajo, donde los taxistas soy personas muy expuestas a la delincuencia, ¿Sus conocimientos podrían llegar a ser útiles en un conflicto?
Llevo un poco más de un año con esto y la verdad que he tenido poca cosa, un par de problemillas pero sin llegar a nada físico digamos. A mí no me gusta decir a que me dedico fuera del taxi y realmente ahí dentro da igual porque vas vendido. Otra cosa es que no estén atrás o te pillen bajado del coche, ahí sería otra cosa (risas).
Aparte de su carrera como profesional, lleva una vida normal como cualquier otro, ¿Le afecta lo que ocurre en tu vida a la hora de entrar a la jaula?
Aunque no queramos o creamos, todo afecta. La última pelea que hice en K1 fue en un momento muy complicado a nivel trabajo y tras sufrir un accidente de moto. Además estaba organizando la velada y al final así es imposible tener la cabeza en el sitio.
Es la única vez que mi entrenador me ha visto y me ha dicho: “No estás para pelear”. Al final salí, metí un par de buenas manos y por la confianza y el momento fui a rematar con demasiadas ganas y me lleve una mano de contra y caí noqueado por primera vez en mi carrera.
Yo nunca pensé que afectase tu vida, pero afecta. Yo tengo una cabeza muy fuerte pero en esa ocasión es verdad que no pude con todo.
¿Fuera de un combate oficial tampoco le habían llegado a noquear?
En sparring si me han llegado a dejar fuera, digamos. Una vez con Kerman Lejarraga (ex campeón de boxeo) y al hígado por ejemplo Joel Álvarez (actual UFC) también me ha llegado a pillar.
Ha hablado en ocasiones de que está en la recta final de su carrera, ¿Se ha puesto ya fecha límite?
No, no. Hablo en general. Mientras mi cuerpo aguante yo quiero seguir peleando. El día que yo me retire en el momento que no me vea el nivel y que note que no merezca la pena.
¿Cómo será el día que se retire?
No quiero ni pensarlo (risas). No va a ser un buen día la verdad. Sí es verdad que me gustaría hacer mi última pelea en Euskal Herria, para hacer la última en casa pero poco mas. Una vez ya retirado, seguiré ligado a esto casi seguro. Seguiré dando clase, ayudando a mis compañeros y haciendo sparring, porque al final esto me da la vida. Lo que no haré es tanta dieta sin este grado de disciplina y me permitiré probar otros deportes, que me gustan casi todos.
¿Qué es lo mejor que le han dado hasta día de hoy las MMA?
Confianza, habilidad física…no sé pero es que me lo da todo. Realmente si me paro a pensar es muy difícil, porque esto me da todo lo que soy yo hoy en día. Soy más disciplinado y más sacrificado gracias a este deporte y esto es fundamental.
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