Alexandre Pantoja, de repartidor a campeón de la UFC
El brasileño reveló que fue repartidor de Uber Eats antes de ceñirse el cinturón del peso pluma en su pelea con Brandon Moreno en el UFC 290. Lo alternó por ocho meses con el trabajo en la compañía.
La vida del deportista hasta que llega a ser campeón no es nada fácil. Un claro ejemplo de ello es Alexandre Pantoja, campeón de la UFC del peso mosca. El brasileño reveló a The MMA Hour que, durante ocho meses, trabajó como repartidor de Uber Eats en Florida, cuando ya era peleador de la compañía. “Íbamos justos de dinero. Esto no va solo de mí, es sobre mi familia y mis hijos”, justificó Pantoja. Se ciñó el cinturón la madrugada del pasado sábado al domingo en el UFC 290, al vencer por decisión dividida al monarca de la división, el mexicano Brandon Moreno.
Alexandre Pantoja se tiró al suelo y no pudo contener las lágrimas cuando escuchó el veredicto de la pelea coestelar del UFC 290. Victoria por decisión dividida: el brasileño se convertía en el nuevo campeón del peso mosca después de arrebatarle el cinturón al mexicano Brandon Moreno en un combate que fue una guerra de principio a final. A pesar de que estaba frente a uno de los mejores de la compañía, Pantoja supo llevar el ritmo del combate, haciendo llegar los mejores golpes y casi consiguiendo la sumisión en varias ocasiones. Ya había ganado en dos ocasiones al mexicano. La primera fue en el reality de la UFC, The Ultimate Fighter (TUF), en 2016 por sumisión, y dos años después lo haría en el UFC Chile a las cartulinas. Es su bestia negra.
El camino al éxito no ha sido nada fácil. “Íbamos justos de dinero, así que mi mujer empezó a limpiar casas y yo a repartir Uber Eats. Lo haría otra vez si fuera necesario. Esto no va solo de mí, es sobre mi familia y mis hijos”, explicó el brasileño. Durante ocho meses, en plena pandemia del COVID-19, alternó su trabajo como repartidor con la UFC. También compitió en torneos de jiu jitsu para ganarse un dinero extra. Su mujer y sus hijos volvieron durante una temporada a Brasil por los recursos limitados que tenían.
El brasileño firmó el contrato con la mayor compañía de MMA del mundo en 2017, y acumula un total de 13 peleas. Ha estado en el Top 5 desde 2019, por lo que ha sido una sorpresa para muchos las dificultades económicas por las que pasó el campeón. En 2021, consiguió una importante victoria ante Manel Kape por decisión unánime. “Eso es sacrificio para mí. Gané la pelea con Manel y usé el dinero como pago inicial para la casa, y traer de vuelta a mi familia. Fue lo más importante para mí”, relató Pantoja. Con sus seres queridos de vuelta, alternó su trabajo en la UFC con ser repartidor de comida a domicilio. Tenía en mente su próximo rival: Brandon Royval, a quien se enfrentaría en agosto, unos meses más tarde. “Una semana antes de la pelea estuve entregando Uber Eats lloviendo y estando enfermo. La semana de la pelea estaba muy enfermo, y tenía mucho miedo de volver a coger COVID. Solo rezaba para que no lo fuese, porque solo tenía un mes para pagar las facturas”, comentó.
Venció por sumisión en el segundo asalto y se llevó 50.000 dólares extra por la “actuación de la noche”. “Cuando llegué al peso y todo estaba bien, solo di gracias a Dios. Tuve una lesión en la rodilla, mi ligamento cruzado anterior estaba completamente roto. Cuando obtuve el dinero de la pelea, estuve bien. Gané la pelea y la bonificación, pude operarme y relajarme durante un par de meses y recuperarme bien”, comentó el brasileño. Este dinero cambió su vida y pudo recuperarse tanto física como económicamente. Y unos años más tarde, consiguió su objetivo: se proclamó campeón de la UFC.