Adriana Cerezo: “Lo que puedo cambiar es lo que está por venir”

La actual subcampeona olímpica de taekwondo, Adriana Cerezo (19 años, Alcalá de Henares), continúa con su progresión. Se presentó ante el gran público en los Juegos Olímpicos de Tokio, donde obtuvo la plata en la categoría -49kg. En el Europeo de Taekwondo de 2021 logró el oro y, en 2022, el bronce. Entrena en el club Hankuk de San Sebastián de los Reyes, a la vez que compagina sus estudios universitarios de Criminalística. Antes de arrancar la temporada, la madrileña atiende a AS para valorar el momento que atraviesa.

-Ha pasado un año y medio de Tokio, ¿es cada vez más fácil asimilarlo? ¿Ya se lo ha terminado de creer?

Bueno, yo creo que es más fácil cada vez verlo más lejos y ver más cerca los siguientes Juegos. Ya desde el momento uno estaba súper enfocada en París, así que ahora que ha pasado un año y medio, más todavía.

-A Tokio llegó sin mucho bagaje internacional; a París llega como una de las favoritas. ¿Cuáles son las principales diferencias al preparar la cita?

Vamos a intentar que no sea ninguna. Yo al final espero llegar a París, aunque primero nos tenemos que clasificar. Si llego tendré 20 años, sigo siendo la joven, por así decirlo. Lo que haya conseguido es algo que se va a quedar así, y que voy a valorar toda mi vida. Pero es algo que ya está, que ya pasó. Solamente lo que puedo cambiar es lo que está por venir, y creo que ahora mismo esa forma de afrontarlo es lo que mejor me va a venir.

-¿Ha cambiado algo en su método de entrenamiento o mantiene todo igual?

No, lo único que, al empezar con la Universidad, tengo horarios más flexibles que al estar en Bachillerato. He podido coordinarme más para ir a entrenar por las mañanas, pero he intentado mantener mi vida lo más igual posible. Creo que el proceso estaba siendo el adecuado y quiero que siga siendo ese.

-Compagina sus estudios de Criminalística con el deporte. ¿Cómo lo lleva?

Es algo a lo que siempre he estado acostumbrada desde pequeña. Mis padres me decían que, para poder entrenar, tenía que sacar buenas notas, y es algo que se me ha quedado. También me viene bien, aunque el deporte es mi prioridad. Pero lo otro tampoco es incompatible. De momento no voy a remolque, he sacado las asignaturas de la carrera y me viene bien tener dos preocupaciones. Cuando encierras tus problemas en uno solo, en mi caso, en el taekwondo, se hacen mucho más grandes.

-A pesar de tener 19 años, ¿se siente respetada por las demás y que está entre las mejores del mundo?

Ojalá que sí, creo que las expectativas siempre son algo bueno porque eso significa que estamos haciendo las cosas bien, y espero este año seguir haciéndolo igual, que la gente siga esperando de mí durante muchos años más. No creo que nadie tenga expectativas de mí más altas que yo misma.

-¿Cree que tiene mucho espacio para mejorar?

Sí. Siempre se puede dar algo más. O evolucionas, o te quedas estancado, y eso es lo bonito del deporte. Todo lo que podamos hacer, todo lo que podamos mecanizar, todo lo que podamos entrenar siempre va a ser una mejora.

-¿Cómo sería para usted cerrar un buen año preolímpico?

Sería quedar campeona del mundo, o ganar todos los Grand Prix. Pero lo principal es intentar ser oro mundial, clasificarme para París y, sobre todo, encontrar el equilibrio de estar a gusto con todo lo que hago para llegar en las mejores condiciones a París.